Capítulo 10

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10. Como un adolescente.


Abro los ojos con lentitud y una pequeña sonrisa se dibuja en mi rostro al sentir la calidez del sol sobre este.

Después de aquel día había estado saliendo con Joe en secreto un par de veces más. Otras la pasaba aquí en casa de mi madre y nos sentamos a conversar y a ver TV. No importaba lo que hiciéramos ni dónde estuviéramos, con el simple hecho de tenerlo a él era más que suficiente.

Termino de lavar el último plato cuando escuchó la puerta principal abrirse y segundos después veo una cabellera pelirroja asomarse por la puerta.

— Buenos días linda — el chico de mirada verdosa se acerca para tomarme por las mejillas y depositar un casto beso en mis labios.

— Hola Joe — respondo con una pequeña sonrisa la cual me devuelve el chico.

— ¿Qué quieres hacer hoy? — sus manos bajan de mi rostro a mi cintura y me pega un poco más a él.

Aquello hace que mi rostro se sienta caliente y desvío la mirada mientras me encojo ligeramente de hombros.

— ___________

— ¿Sí?

— Me iré a Londres.

Apartó mis manos de él y doy un paso hacia atrás rompiendo nuestro contacto.

— ¿Qué?

— Iré por motivos de trabajo, no pienses que estoy mudandome — aquellas palabras hacen que una ligera sensación de alivio me invada — así que quiero pasar mis últimas semanas por acá contigo.

No puedo evitar que mi corazón lata con fuerza ante sus palabras y sin más doy un par de pasos para lanzarme sobre el y unir nuestros labios en un cálido beso. Siento sus manos abrazar por completo mi cintura y yo me aferró a su cuello mientras siento sus labios moverse sobre los míos con lentitud.

Casi un minuto después nos separamos ante la falta de oxígeno y sonreímos ligeramente.

— Salgamos a caminar — asiento frenéticamente y el castaño rojizo me roba un último beso antes de salir corriendo junto a mí con nuestras manos entrelazadas.

[...]

Los días parecían irse volando y el tiempo no nos alcanzaba lo suficiente.

Había pasado las casi dos semanas completas saliendo con Joe a distintos lugares y aún así no nos era suficiente, siempre terminabamos queriendo más tiempo juntos.

Hoy saldríamos, comos siempre desconocía el lugar al que iríamos pero ni siquiera me importaba como ya había dicho, todo junto a él era perfecto.

Me frente al espejo y no puedo evitar comenzar a arreglar los pequeños detalles que noto. Miro que la falda que llevo puesta no esté demasiado arriba y me acomodo un par de veces la blusa que llevo a juego. Me paso las manos por el cabello para ordenarlo un poco y vuelvo a mirarme finalmente en el espejo.

Escuchó la puerta principal abrirse y segundos después escuchó la voz del chico llamarme. Tomo la chaqueta y el pequeño bolso y salgo de mi habitación cerrando la puerta detrás de mí, bajo con tranquilidad las escaleras y camino por el pasillo hasta llegar a la puerta y ahí me detengo al verlo.

Se encuentra recargado sobre la puerta despreocupadamente mirando la pantalla su celular. Al parecer aún no ha notado mi presencia así que decido hablar.

— Hola.

— Hola — me responde dándome una rápida mirada de arriba hacia abajo — te vez hermosísima.

Una risita nerviosa se me escapa y sonriendo ampliamente le agradezco. Su mirada continúa sobre mi durante un tiempo más y finalmente sus ojos van hacia los míos.

— Pues, vamos.

Me coloco la chaqueta y me cuelgo el bolso sobre un hombro para acercarme al chico quién abre la puerta y me deja pasar a mí primero.

En el camino conversamos y reímos olvidándonos de nuestro alrededor. Caminamos durante un buen rato hasta que llegamos a un muelle, nos detenemos a sentir a fresca brisa y a mirar el lugar.

Miro de reojo a Joe y puedo ver cómo se pasa la mano por el cabello y se remueve sobre su lugar.

— ¿Qué sucede Joe? — el mencionado se vuelve hacia mí con una extraña expresión en el rostro y después me da un intento de sonrisa.

— Nada, no... Sucede nada — intenta tomar una postura relajada pero lo veo moverse sin parar hasta que finalmente lo dice — bueno, si sucede algo.

Me quedo en silencio esperando a que continúe, lo veo frotarse laa manos con nerviosismo y yo continúo mirandolo hasta que sus ojos vuelven a dar conmigo.

— Quiero que formalicemos esto.

Parpadeó un par de veces mientras me quedo muy muy quieta sobre mi lugar.

— ¿Qué? ¿H-hablas, hablas enserio?

El castaño pelirrojo asiente un par de veces y yo solo puedo volver a parpadear.

— Sé qué tal vez sea demasiado pronto o que tal vez ni siquiera sea el momento más adecuado pero... Te quiero _________.

Veo como sujeta mis manos y se pone sobre una rodilla frente a mí. La mirada de las pocas personas se va hacia nosotros y yo miro de ellos a Joe quién mantiene su mirada sobre mi.

— Dios, me siento como un adolescente — ambos reímos y siento como su agarre sobre mis manos se hace más firme — _________, ¿Quieres ser mi novia?

Siento el golpeteo de mi corazón en mis oídos mientras mantengo la mirada sobre él.

A devir verdad yo también me sentía como una adolescente, salgo con el chico que me ha gustado desde pequeña y ahora el mismo me estaba pidiendo que fuera su novia.

— Sí, Joe, quiero ser tu novia — el castaño rojizo suelta un pesado suspiro y se pone de pie para tomarme por las mejillas y unir nuestros labios en uno tiernos beso.

Puedo escuchar los aplausos de las personas que presenciaron la escena y me separo de Joe para reír al igual que él. Se aparato un poco de mí y hace una pequeña reverencia para la gente a lo que yo bajo la mirada hacia mis zapatos.

El chico se vuelve hacia mí y me abraza por los hombros mientras sigue sonriendo a la gente.

— Solo espero que nadie haya tomado fotos.

Levantó la mirada hacía el y el dirige la suya hacia mi.

White Lies [Joe Mazzello Y Tú] COMPLETA ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora