CAPÍTULO 11 Nicahealy Quandt

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Ya habían pasado dos semanas desde que Andrés me había encontrado con Nicolás en la casa del lago, no me la pasaba en casa, trataba de estar afuera la mayor parte del tiempo o en mi habitación, desde ese día solo lo he visto en tres ocasiones y en ninguna me quede un minuto más cerca de él, papá me había hecho firmar unas órdenes y me conto que ya iniciaron la construcción del centro comercial  no tenía ni el más mínimo interés ya de saber que harían debajo de ella, así que no me metería mas en sus asuntos, y menos si estos incluían a Nicolás. 

Durante la última semana, el ginecólogo, Carlos Laguna, me había invitado varias veces a cenar, decline todas las veces que pude inventándome alguna excusa, pero la última vez ya no tenía más nada que decir así que acepte, al fin y al cabo que podría salir mal en una cena. Me encontraba viendo que me pondría me había dicho que íbamos a ir al Ross,un restaurante que no había escuchado antes, me imaginaba que era algo elegante así que me decidí por un vestido de bandage verde esmeralda de tiras. Se ajustaba en cada una de mis curvas, incluso hacia ver mis pechos más grandes con el escote en v, y mi cintura más pequeña por lo ajustado que era, se pegaba a mi cuerpo hasta por encima de la rodilla, junto con unas sandalias de tacón fino negras. Me veía jodidamente sexy. Solo esperaba que Carlos no fuera a malinterpretar mi atuendo, sin más me alise un poco más el cabello y me puse una gabardina negra que me llegaba hasta la rodilla. Recibí un mensaje de Carlos que ya estaba afuera, así que empecé a bajar las escaleras cuando escuche la voz de Nicolás que venia del pasillo al otra lado del piso, era enserio el mundo me estaba haciendo una mala jugada. Antes de que se me acercara con Andrés baje rápidamente las escaleras y Salí. Carlos estaba al final de la escalera con un traje azul oscuro, no me equivoque sí que era un lugar elegante, él estaba demasiado bien en realidad, pero no sé porque no me gustaba era muy atractivo, no entendía. Solo me la pasaba pensando en que no era Nicolás . Lo salude y sin más salimos del camino de la mansión a la vía principal.  

Cuando llegamos el restaurante era muy acogedor, estaba lleno de retratos por todos lados de personas famosas, junto con elegantes mesas redondas con candelabros como centros de mesa, te daba la sensación de que no estabas en Royal. La luz era muy tenue que no dejaba divisar los rostros de las personas que estaban en las otras mesas dándole un aire misterioso y más con la música lenta que estaba de fondo. Los camareros salían de dos cortinas rojas en la pared del fondo y entre las dos cortinas se extendía una dorada con dos hombres al lado de ella. Era un lugar diferente a otros a los que había ido.

Después de entregar nuestros abrigos y sentarnos, empezamos a charlar, en realidad era un buen sujeto, no quitaba la mirada del escote de mi vestido, incomodándome un poco,pero que les puedo decir se iban a salir, me di cuenta que Carlos en realidad no tenía ningún interés en conocerme, no dejaba de hablar de él,  del hospital, de sus pacientes, era un obseso de su profesión, yo no podía decir mucho porque era otra pero en realidad ni si quiera había dejado de hablar un minuto de él. Cuando terminamos de comer fui al tocador, cuando iba entrando a retocarme el maquillaje, sentí que cerraron las puertas con seguro, me asuste de inmediato, no solo porque me habían encerrado sino porque el lugar me intimidaba, había poca luz, todo el lugar estaba lleno de dorado y negro dándole un toque elegante pero a la vez demasiado misterio para mi gusto. Joder en verdad estaba asustada. 

- ¿Hay alguien ahí?- nadie respondió pero escuchaba la respiración de quien sea que estuviera detrás de la pared que dividía el tocador del baño de la puerta. No quería acercarme porque el miedo me estaba consumiendo. 

- Nica- salió Nick detrás de la pared negra, enseguida sentí como se aceleraba mi corazón, estaba impecable como he dicho muchas veces con un traje negro que solo fue hecho para él, sin corbata. Cerré el lápiz labial de una y lo deje sobre el tocador. 

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