ESMERALDA

CAPÍTULO 18 Nicolás Martini

- Nicolás y una cosa más, salió- colgó inmediatamente porque sabía lo que le podía hacer. 

Después de Mario Loveling decirme que ni siquiera se encontraba en el país, que Emma estaba desaparecida hace días pero que Jackson estaba con su papa y negarme su participación en todo, supe que esto no era por las esmeraldas. Había vuelto, Kara había vuelto. Mario podría ser mi competencia pero jamás me había negado alguna vez sus ataques. No ocultaría que me había hecho daño, esto no era cosa de él. 

Mi padre cuando se murió dejo dicho en su testamento que tenía una tercera hija, 2 años menor que yo, su nombre era Kara pero no llevaba nuestro apellido, Darío Loveling la había reconocido como su hija para no hacer público el romance de su mujer con mi padre, de ahí todo el rencor que hay entre las familias. Mi padre visitaba a Kara todos los sábados, siempre pensaba que era cosa de mi padre para estar con sus amigos. Pero no era así. Un año después de su muerte me acosté con Kara, sin saber que era mi hermana. No la conocía, nunca la había buscado y no pensaba hacerlo. No quería un familiar nuevo que luego me diera la espalda. Me busco 8 meses después diciendo que el hijo que llevaba en su vientre era mío, respondí a todos los gastos de Jackson, incluso después de enterarme que era mi hermana. Ella se había enamorado de mí, y aunque no la quisiera Jackson era mi hijo y lo amaba. Oculte a Jackson de todo porque eran años difíciles y llenos de sangre en mi vida. Después de estar viviendo con ella 3 años, a Kara le diagnosticaron esquizofrenia. Habían días que me amaba y era obsesiva pero otros ni siquiera me prestaba atención a mi o a Jackson. La tuvieron que internar porque cada día era peor, cuando estuvo estable me confesó que Jackson no era hijo mío que era de un tal Erick Wilson y ahí fue cuando empezó mi problema con Erick. 

Me lleve a Jackson a vivir conmigo donde los Quandt pero fue una pérdida de tiempo por mucho que quisiera ya legalmente Jackson era hijo de Erick, y nunca lo supe. Me arrebataron a Jackson. Me sentía traicionado por segunda vez por mi propia familia. Solo Emma me permitía verlo de vez en cuando en secreto. 

Y por otro lado estaba Kara, quien después que los médicos dijeran que podía estar bien si seguía la medicación y yo dejarla por traicionarme y meterme un niño que ni siquiera era hijo mío y aun sabiendo siempre que era mi hermana, se obsesiono conmigo, juro matar a cada mujer que se metiera en mi camino. Después de verla matar a una de mis asistentes con las que tuve una aventura a sangre fría supe que no era ningún juego, convencí a Emma para que la volvieran a internar y lo hicieron. No volví a preguntar por ella ni a escuchar de su existencia para mi estaba muerta. Pero después de lo que le paso a Nica y escuchar a Mario, supe que era ella. Había vuelto Kara. La maldita Kara. Seguramente ya estaba buscando a Valeria.

 Estaba en mi despacho cuando colgué el teléfono y entraba un Andrés agitado en bañador. 

- Nick, es Nica, se la intentaron llevar

- Joder y no había nadie con ella?- ya sentía como hervía mi sangre 

- Si, detuvieron la camioneta que se la lleva a dos cuadras del parque océano.

 - ¿Porque la dejaste salir Andrés? Aquí estaba bien!- le grite a Andrés y de una vez me arrepentí, él no tenía la culpa, la tenía yo

- Nick hay que ir, chocaron contra la camioneta donde la llevaban 

- ¡Joder! – me pase la mano por el cabello, Nica se estaba metiendo en mi piel y en este preciso momento tenía miedo de perderla

Conduje como un psicópata por las calles de Royal, cuando llegue al lugar, era una jodida locura, había policías, ambulancias, cámaras, era un caos. Empuje atodo el que fue necesario para acercarme hasta la ambulancia, Nica estaba siendo subida a una ambulancia, estaba despierta gracias a Dios. A pocos metros dos camionetas negras estaban impactadas de frente, pero Nica estaba viva y con eso me bastaba.