EL REGRESO.

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Escaleras abajo una sudorosa rubia no podía dormir,algo o mas bien "alguien",perturbaba su sueño—no.......no...me..comas--balbuceaba la gemela dando vueltas en su litera,sintió unas manos frías tomar su mejilla,abrio los ojos y vio a una palida figura de cabello negro taparle la boca para que no gritara,su corazón estaba en la garganta,pensaba que seria su fin.

--Amaia,no dejas dormir—al escuchar la conocida voz se tranquilizo,fue liberada poco a poco--¿estas bien?—le preguntaron.

--no—

--¿tienes miedo?—el tono burlon que utilizo su hermana la hizo sonrojarse—bueno,como sea,no dejas dormir,deberías de ir a dormir con mama—aquello le parecio a la rubia la mejor idea,pero no iba a dar su brazo a torcer muy fácil.

--me ire con una condición—

La melliza alzo una ceja esperando a que le dijera cual.

--regálame solo un poco de tu cabello,solo un centímetro—

Alura la vio con extrañeza—claro que no,¿para que lo quieres?—

--ya lo veras,solo te digo que es para Alonso—

Al escuchar el nombre de su hermano sonrio con malicia—esta bien,vamos al baño—

Amaia se incorporo notando que el dolor casi había desaparecido por completo,ambas chicas fueron al baño y tomaron unas tijeras,Alura corto un poco de su cabello dándoselo a su hermana—espero que no hagas nada raro con el—

--ya lo veras,pásame el pegamento—

Los dos se acercaron a Alonso,el chico estaba con la frazada toda enredada en los pies,las dos se vieron y sonrieron con malicia.

Minutos después veían su obra de arte con orgullo—bueno,ya es hora de seguir durmiendo—Alura se iba a ir a su litera cuando la mano de Amaia la detuvo--¿Qué quieres?—le pregunto.

--acompañame a la habitación de mis mamis—el enorme puchero que Amaia hizo,fue irresistible para la pelinegra,rápidamente tomo su mano y caminaron hacia la puerta,al abrirla chocaron con otros dos cuerpos.

--no me coman,comanse a Alura—hablaba la rubia.

--shhh,van a despertar a mis madres—las callaba Regina.

--ohh,¿Dónde andaban?—les pregunto Amaia elevando sus cejas con picardia.

--afuera,pero vimos a una chica palida,de cabello negro llamada Jessica,creo que te buscaba—al hacer ese comentario Amaia palideció.

--llevame con mis mamis—le suplicaba a su hermana.

Regina comenzó a reir por las palabras que dijo su novia--¿hay algo que no sepa?—

--deja que volvamos a la escuela y te lo mostrare—le contesto Emma caminando hacia el baño.

Escaleras arriba el matrimonio Zor-El se encontraba profundamente dormido,Kara se encontraba con su trasero al aire mientras descansaba sobre el pecho de su esposa,la primera en escuchar ruido en la puerta fue Lena,abrio los ojos viendo las llamas de la chimenea reflejadas en el bronceado cuerpo de la ojiazul,comenzó a acariciar la suave piel de su mujer—cariño—llamaba a su rubia esposa—cielo—su mujer ni se inmutaba, acerco su boca al oído de la ojiazul—taladro Zor-El,quiero hacer el amor de nuevo—de inmediato la rubia se incorporo,le mostro una adormilada sonrisa,aun ni abria sus ojos debido al sueño,pero rápidamente se acomodo entre las piernas de la pelinegra.

--Kara,amor,alguien toca la puerta—Lena sabia que debia detener a su mujer antes de que fuera demasiado tarde,trataba de cerrar las piernas pero su esposa no la dejaba,sentia a Karito comenzar a animarse,su esposa tenia los ojos medio cerrados y sentia como movia su cadera buscando su entrada,tomo el adormilado rostro de la rubia para que la viera a los ojos—ve a vestirte y a ver quien esta en la puerta,y no me hagas pucheros porque no caeré tan fácil—la rubia asintio bostezando.

HOSPITAL NATIONAL CITYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora