Ofiuco:
—¿Lo hacemos primero o prefieres estar un poco a solas con ellos? —me preguntó el abuelo.
—¡Quiero intentarlo! ¡No me rendiré nunca, sé que ahora va a funcionar! —exclamé con determinación.
Sao asintió y se acercó a la cama, antes de acariciarle el pelo a mamá. Ella había sido una de sus cuantas hijas, pero él les tenía un cariño especial a todas. Me puse rápidamente de pie y acerqué la silla al abuelo, el cual asintió como agradecimiento y se sentó en ella.
—¿Crees que va a funcionar? —cuestionó este.
—No perdemos nada por intentarlo. Además, su fuerza es increíblemente fuerte, por lo que lo mejor sería intentarlo.
El abuelo asintió y cerró los ojos. De repente un aura roja apareció por todo su cuerpo, y segundos después un pájaro de fuego salió de su pecho y se posó en su rodilla. Sao abrió los ojos y suspiró con alivio, antes de girarse hacia mí.
—¡Pensaba que no iba a funcionar! —exclamó con una sonrisa nerviosa—Leo es el único que puede hacerlo aparecer a voluntad, y para los demás lo hace solo cuando siente una situación importante en la que deba meterse.
Asentí en silencio y miré con determinación al Phoenix. Si esto funcionaba...
El pájaro voló encima de los dos cuerpos, antes de posarse en el de mamá. Se quedó durante largos segundos ahí, antes de acercarse a papá y hacer lo mismo. Cuando este se separó de él nos quedamos ansiosos, mirando los dos cuerpos. Pero después de un minuto de espera, nada pasó.
—¡Lo siento mucho, hijo! —susurró el abuelo con tristeza—¡Creo que no hay solución para ellos!
—¡Imposible, no pueden no despertar! —exclamé poniéndome de pie y poniendo una rodilla sobre la cama—¡Quizás si sienten mi presencia se despertarán! Después de todo soy su hijo.
—¡Ofiuco, no...!
—¡Mamá! ¡Papá! ¡Soy yo, vuestro único hijo! —exclamé con una sonrisa triste—¡Vine a visitarlo, para que ustedes pudiesen despertar! ¡Por favor no me hagan esto, no me dejen solo de nuevo!
—Ofiuco...—susurró el abuelo.
—Déjame con ellos, abuelo. Quiero yo también caer en un sueño profundo del cual nunca despertaré.
Me acerqué más a ellos, antes de acostarme entre ambos. Cerré los ojos y abracé a mamá, esperando que así funcionara.
—¡Te amo mamá! ¡Te amo papá! ¡Te amo abuelito! —susurré con una sonrisa—¡Dormiré un poco con ellos!
Escuché un suspiro de la parte del abuelo, y escuché la puerta abrirse y cerrarse en señal de que había salido. Sonreí con tristeza. Sabía que no podría caer en un sueño profundo como ellos, pero tenerlos al lado me daban una sensación rara de paz mental.
—¡Buenas noches, papá y mamá!
Rachel:
—¡Es aquí! —exclamó Red con una sonrisa—¡Aquí están las personas que querías ver, pero resulta que están durmiendo!
—¡Al contrario, es bueno que duerman! —les expliqué—Entraré para ver si todo está en orden, espérenme aquí.
Entré adentro, aprovechando mi poder de oscuridad para camuflarme de los demás humanos. Avancé dos pasos antes de sentir como alguien me seguía.
—¿Igris!? —cuestioné sorprendida.
—¡No voy a dejarla sola, mi reina! ¿Y si le pasa algo mientras nadie está con usted?
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La Aventura del Zodiaco [PAUSADA]
Dobrodružné¡Leer primero "La aventura zodiacal" antes de leer esta, ya que esta es la segunda parte de mi historia! ¿Que pasa si de un día a otro, 12 signos descubren que tienen poderes, y que tendrán que ir a salvar a su abuelo del lado malo? Asi comienza la...