(Nota importante al final)
Laura—¡Corre! —me ordenó Benjamín, yo solo no podía entender—. Corre y huye lo más lejos de mí —volvió a ordenar con su mirada fría.
No sentí las ganas de refunfuñar y llevarle la contraria, temerosa y sin saber dónde mierda estoy, por primera vez hice caso lo que me ordenó Benjamín cuando escuché el primer disparo.
Con un disparo proveniente de la casa supe que no estaba con niños ricos tal vez como yo.
—¡Vete! —gritó Benjamín asustado al escuchar el mismo disparo.
Lo miré por última vez, tal vez la última vez que vería sus ojos grises.
Y empecé a correr con miedo, como si un lobo estuviera detrás de mí persiguiéndome.
Corrí hasta llegar al auto de Benjamín, me subí de inmediato.
Lo encendí y salí de ahí acelerando tanto como pude.
Joder.
No pude evitar empezar a temblar.
Ese tipo casi me viola.
Subí a ese cuarto buscando algún baño, y a cada cuarto que entraba estaban cogiendo o haciendo cosas, menos en el tercero, ese estaba vacío, entré y no cerré la puerta de la habitación, solo la del baño.
Al salir aquella puerta estaba cerrada, y ya no me encontraba sola.
—Que guapa eres —dijo aquel tipo de unos 25 o más tal vez.
—No te acerques —amenacé viendo que puso seguro la puerta mirándome con perversidad.
Busque con la mirada algo con que defenderme pero nada, no encontré absolutamente nada, todo estaba vacío, solo una cama.
—No te haré daño pequeña —mintió acercándose lentamente a mí, desabrochando su pantalón.
—¡Aléjate! —grité retrocediendo— ¡EVAAA! —grité más duro esperando a que alguien me escuchara aunque dudaba mucho ya que el volumen de la música estaba tan alto— ¡EVAAAA! ¡AYUDA! —grité viendo que el tipo seguía acercándose a mí y yo no sabía que hacer.
—Una niña indefensa como tú no debería estar aquí —se sacó la camiseta que llevaba puesto.
Mierda.
Benjamín por favor escúchame y ven a salvarme.
—¡BENJAMÍÍÍÍN! ¡AYUDA! —grité esperando que esta vez me salvara de aquel tipo retrocediendo golpeando con la pared de aquel cuarto.
Se acercó a mí en un instante y me agarró de las manos apoyándome contra la pared.
Olía claramente a alcohol, tabaco, drogas y más.
—¡Suéltame! —grité tratando de jalar pero él era muy fuerte.
—Cállate o será peor para ti —amenazó.
Sintiendo cómo empezó a besar mi cuello apegándose a mi cuerpo y sin soltarme cerré los ojos dejando caer algunas lágrimas.
—Por favor —supliqué con un hilo de voz mientras lloraba.
No, no Laura, tú eres fuerte y puedes con él.
Me apoye a la pared y con una pierna pateé impulsándome tratando de golpearle en la ingle. Él no se cayó, solo me soltó un poco por el dolor.
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Mi No Tan Terrible Vida
Teen FictionDiría mi terrible vida, pero no es de esa forma. Todo va bien hasta que alguien llega a poner mi vida de cabeza, y se imaginarán que es una historia cliché de amor, pero yo no, yo diría que es una historia de un de amor un poco masoquista. Te odio y...