Qin Su. Parte2

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Los años pasaron, pero las cicatrices quedaron en el corazón de Qin Su, se volvió solitaria y juró no volver a utilizar su poder, pues ahora le aterrorizaba lo que podía provocar dedicándose totalmente a sus estudios.

Cuando cumplió 23 años, su primo Zixuan le organizó una pequeña fiesta en La Torre Carpa. Zixuan no era nada parecido a su padre e incluso había renunciado al prestigioso apellido asqueado de las actividades que practicaba la familia. Qin Su aceptó a regañadientes por presión de su madre, pues tenía años de no salir a divertirse.

Apenas había transcurrido media hora y ella no podía soportar más el ambiente jocoso del lugar. Necesitando algo de espacio salió del lugar tomando asiento en unos escalones cercanos para aclarar sus ideas.

-Lo siento, ¿te molesta el humo? - preguntó una encantadora voz a su lado. No se había percatado de que las escaleras ya estaban ocupadas.

Al mirar al joven las palabras no acudieron a su boca y sólo agitó la cabeza negativamente desviando la mirada.

El chico permaneció un rato disfrutando de su cigarro sin ponerse a conversar. Un silencio cómodo se instaló entre ambos y por alguna razón, la presencia del joven la llenaba de calma. De vez en cuando lo miraba furtivamente, era alto y delgado, su figura se recortaba contra la luz de la luna y su belleza la hizo preguntarse si acaso se trataba de un ángel, pues parecía irreal. Llevaba traje negro camisa blanca; su saco lo traía colgado sobre el hombro sosteniéndolo con una mano para que no se resbalara.

Terminado su cigarrillo se acercó un poco a ella.

- ¿Te molesta si te acompaño un rato? - preguntó educadamente con una dulce sonrisa. Qin Su de nuevo no encontró su voz y volvió a sacudir su cabeza mientras que sus mejillas comenzaron a tornarse carmesí.

Pasaron un par de minutos en silencio, pero no fue incómodo para ella.

- ¿De quién te ocultas? - preguntó el joven sin mirarla directamente a los ojos, lo que ella agradeció, pues el solo escuchar su voz le provocaba taquicardia, no quería imaginar qué pasaría si él la miraba directamente.

-De mi fiesta de cumpleaños- contestó desviando la mirada.

-Y ¿de qué modo te hubiera gustado celebrarlo? - preguntó con voz calma.

-No lo sé... en casa, supongo.

-¿No te gustan las fiestas o no te gusta celebrar tu cumpleaños?

Qin Su se animó a observarlo, era raro que el joven no la estuviera juzgando por sus respuestas, al contrario, trataba de comprenderla. Cuando lo miró pudo ver sus hermosos ojos cafés avellanados, su nariz recta y unos labios esponjosos. Sin duda era muy apuesto y lo más importante, era muy amable. Le inspiraba confianza y poco a poco pudo controlar sus nervios y conversó con él durante horas y horas encontrándolo demasiado encantador.

Cuando el frío de la noche arremetió, ofreció a llevarla a casa, no sin antes asegurarle que sus intenciones no eran otras más que ser amable, le dio su tarjeta de presentación e incluso la obligó a marcar a sus padres para hacerles saber al auto de quién se subía para no causar desconfianza. En ese momento supo que su corazón le pertenecía a Xiao Zhan.

El tiempo pasó y su relación se hizo más estrecha. Por alguna razón que ella no comprendía, Xiao la rondaba más y más. Incluso cuando el joven quiso hacer formal su relación pidió hablar con sus padres para hacérselos saber él mismo, aunque Qin Su le aseguró que eso no era necesario pues temía que sus padres se opusieran a su relación por lo ocurrido anteriormente.

Gracias a la bondad y dulzura infinitas de Zhan, Qin Su pudo superar, poco a poco, varios traumas que le había generado Guanyao e incluso fue capaz de poder disfrutar del sexo, cosa que no había intentado desde que había sido abusada y el sólo pensarlo le causaba escalofríos, pero Xiao era un amante tierno y considerado, jamás la presionó ni la obligó a hacer cosas que ella no quisiera y de pronto volvió a sentir aquellas ganas de disfrutar su vida, volvió a sonreír como antes e incluso comenzó a esperar con ansías su cumpleaños, porque tenía a su lado a Xiao Zhan.

No Imaginaba 2. PERMANECERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora