Empire | J.Jungkook.✔(𝘍𝘪𝘯𝘢𝘭𝘪𝘻𝘢𝘥𝘢)

Capítulo. 16.

Me encontraba en trance al salir del baño. Todo fue tan rápido que aún no lograba asimilarlo al cien por ciento. Por dios, había visto a Jungkook completamente desnudo, y en su totalidad, era mucho mejor de lo que me había imaginado. Mis piernas estaban tambaleantes y mi cuerpo no respondía a mis intentos por recobrar el aliento, me sentía agitada como si hubiera corrido un maratón. Como pude llegué a mi cuarto, cerré la puerta y fue entonces que mis pulmones recibieron un poco de oxígeno, me tapé la boca aguantando un grito que amenazaba con salir, las mejillas me dolían de tenerlas tanto tiempo estiradas. Corrí hasta mi cama y me lancé en ella tapándome la cara con la almohada, para así poder liberar aquel chillido de euforia que tenía prisionero dentro de mi pecho. Ahora no podía negarle a Jungkook que estaba perdidamente enamorada de él, pero el miedo a que le pudiera pasar algo aún estaba, temía que mi padre pudiese hacerle algo al enterarse de lo nuestro.

Me vestí y salí del apartamento rumbo a la Universidad. Estaba meditando sobre lo que iba a acontecer en la noche, hoy tenía que hablar con Jungkook ya no podía seguir huyendo... ¿Debería aceptar lo que me ofrecía y olvidarme del temor que causaba estragos en mi interior?... Sí... Voy a darme una oportunidad de ser feliz por una vez en la vida, a amar y ser amada como tanto había soñado, todo está en arriesgarse, porque el que no se arriesga no gana y sé que con él voy a ganar la historia de amor más bella que haya podido tener en mi vida.

Llegué a la Universidad y Aylin me estaba esperando en la puerta.

− Bueno, bueno...y esa sonrisa, ¿pasó algo de lo que aún no estoy enterada? − me miraba expectante, la verdad que la que parecía payaso ahora era yo.

− Lo mismo digo − alcé una ceja y arqueé los labios en una media sonrisa − ¿Qué se traen Tae y tú?.

Estaba asombrada con la expresión de mi amiga, sus cachetes se volvieron rojos y empezó a tartamudear... Lo sabía, bingo... Esos dos tenían algo.

− ¡Yo!...¿con Tae?...pss... Nada, cómo crees ¿estás loca, Eli? − sonreía nerviosa y miraba en todas las direcciones menos a mis ojos... Estaba mintiendo…

− Okay... Si tú lo dices − Me encogí de hombros − Haré como que te creo.... Pero eso sí − dije haciendo que me mirara. − Hasta que no me digas la verdad no te cuento nada.

Salí corriendo de donde estábamos paradas y Aylin me gritaba desde aquel lugar.

− No es justo, Elizabeth... Vuelve aquí aún no he terminado de hablar contigo... ¡Elizabeth!

Llegué a mi salón, hoy a primer turno tocaba Biología, odiaba a esa profesora, sus clases eran superaburridas y me quedaba dormida casi siempre.

− Buenos días, alumnos − entró aquella señora de pelo canoso haciendo parar el alboroto que había − Hoy empezaremos con el último contenido del semestre, ya saben que dentro de un mes son los exámenes finales, por esto es superimportante que presten atención...

Transcurrió el día monótono como siempre, estaba en la cafetería de la escuela esperando que llegara Aylin para almorzar juntas, pero para mi mala suerte el idiota de Max hizo su aparición.

− Pero mira a quien tenemos aquí...a la flor más bella del Instituto − rodé los ojos en señal de frustración...¿Por qué de todas las personas tenía que aparecerse este imbécil?

− Max, en serio, amaría que te fueras − pero fue por gusto pedirle tal cosa, como si le hubiera dicho ven acompáñame se sentó a mi lado.

− ¿Por qué eres así preciosa?...¿por qué te resistes a mí?, sabes que podría darte el mejor polvo que puedas tener en tu vida − y como si fuera el peor insulto que hubiera recibido, le estampé los cinco dedos de mi mano en su perfecta cara.