Capítulo 23 - Karma (3/3)

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El domingo, lunes, martes y miércoles, pasaron rápidos, sin novedades, nada nuevo, todos hablaban de lo espectacular que seria el viaje, otros de la fiesta de la mañana.

 En el trabajo me iba bien, aunque como ya saben la coordinación no se me da del todo bien, y algunas cosas se  me habían caído... Aparte de ganar mi saldo diario me quedaba con las propinas que dejaban, y como aquí solo vienen personas "sofisticadas" esas propinas eran muy generosas. Ahora me encuentro en mi casa, saliendo del baño, ya que luego de llegar del instituto, me duche, hice los deberes y estoy cambiándome; elegí ponerme un jean azul, una camisa color rosa pastel trasparente y unas vans negras, me hice una coleta alta y tome una mochila pequeña de jean en la que metí mis llaves, el telefono, algo de dinero y una campera por si refrescaba. Mi tía no estaba muy de acuerdo con que trabajara, pero no le hice caso, ella entraba ahora al hospital, asi que me dejo en el café y entre

. – Hola Clarissa- salude a la encargada, era una señora de 38  años, alta, ojos marrones, y rubia teñida. 

– Buenas tardes Eli ¿Qué tal tu día?- me respondió,

 - Sin novedades- le sonreí, deje mi mochila,  tome un libreta en la que anotaba los pedidos, y un delantal dorado y negro, que usan los camareros de aquí.

Atendí a unos cuantos clientes, y mi hora ya estaba por terminar, faltaban solo unos 20 o 25 minutos aproximadamente. 

Y lo peor llegó... Jessica estaba allí, junto con sus amigos, unos de ellos levantó la mano, para pedir una camarera, y para mi suerte, esa mesa me tocaba a mi, la alegría que tenía se había borrado, pero fui hacia allí.

 – Bienvenidos al café el oro. ¿Qué quieren pedir? – les salude.

 - Reed... ese delantal te queda bien, y este trabajo ni hablar! Estas a disposición de los otros, nada nuevo...- sonrió falsamente Jessica.

 – Mis amigos pedirán 3 jugos tropicales, y para mí un té de limón, y rápido. – me ordenó, sin protestar tome nota y fui hacia la cocinera.

 - 3 jugos tropicales y un té de limón- le avisé, luego de darle el pedido, fui hacia la barra y me senté en uno de los asientos.

- ¡Eli!- dijo mi amiga, mientras me daba un beso en la mejilla.

 -¡Lili! ¿Qué haces aquí?- le sonreí.

- El sábado es mi aniversario con Liam, y no sabia que regalarle... estaba pensando en un balón de fútbol americano con su nombre... tu que dices ¿Te parece original?- continuó.

 - Sisi, super creativo, pero no me digas que viniste hasta aquí solo para eso...- respondí.

 - De echo.... Sí. Aparte no tenía nada mas interesante para hacer, Liam esta en el entrenamiento, ya que el viernes que viene tienen un partido, y por lo que escuche es de mucha importancia, y mas para los que se quieran dedicar a jugar al fútbol americano luego de terminar el colegio- me informó.

 - Tú sabes, ¿no?- le pregunté.

 - ¿Qué cosa?- continuó.

- El viernes que viene... es 18... El cumpleaños de Nick...- le contesté.

 - ¡Oh Dios! ¡Cierto! ¡Gracias por recordármelo!- me respondió. - ¿Tu crees que haga fiesta?- siguió.

 - No lo sé, y si es en su casa no creo poder ir... Su madre me prohibió la entrada...- le dije, y ella soltó una carcajada.

 - Elizabeth,  este es el pedido para la mesa 11- interrumpió la cocinera, cuyo nombre no recuerdo.

 - Okey... ¿Lili me esperas? Este es mi ultimo pedido- comenté, y ella asintió con la cabeza, fui hacia la mesa de Jessica, a darle su pedido, lo deposite sobre su mesa.

Enamorada del Jugador EstrellaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora