Mi primer amor de verdad

Capitulo 42

Scarlett.

California, 31 de diciembre.

Llevo mis brazos alrededor del cuello de Noah, él posa sus manos en mis caderas mientras se mueve.

—Amo los bailes pervertidos...

—Y yo los extrañaba—digo meneándome hasta abajo.

—I just need some dick, i just need some love—Cantamos ambos al mismo tiempo sin dejar de rozar nuestros cuerpo.

Paso mi manos al cabello de Noah tirando de el mientras él rubio ríe a carcajadas.

Nuestra manera de bailar, es algo peculiar, y me gusta.

Cualquiera que no nos conoce pensaría que somos pareja, y estamos por follarnos en este instante.

En unos pocos minutos será año nuevo, y el cumpleaños de Noah.

Nos encontramos en el departamento de Luka recibiendo este año, están la mayoría de los chicos del equipo, mis hermanos y amigos.

—Es nuestro momento Scar, tenemos la atención de todos.

—Elevemos un poco a el nivel del baile pervertido...

—Con tal de que no se me eleve la polla...—bromea—

—No prometo nada rubio.

La canción cambia a una más movida, y algo sexual, perfecto con la ocasión, desde una esquina oscura capto a el chico de ojos grises mirándome con una sonrisa, se abanica con su mano.

Rayan se acerca un poco deteniéndose al lado de Ivan, ladeando la cabeza de forma divertida, le guiño un ojo.

Me voy girando moviendo mis caderas de forma circular, lenta hasta que mi espalda haga contacto con el pecho de Noah, quien rápidamente me apega más a su duro cuerpo.

—Hasta embarazada me prendes—comenta él riendo.

Tomo las manos de Noah pasándolas por mis cuervas.

Me inclino hacia delante, la posición es algo sexual, mi mejor amigo posiciona una manos sobre la otra en la parte baja de mi espalda, meneándose, haciendo que sienta su bulto.

—¡Si! ¡Con todo chicos!—grita Lea.

Coloco mis manos en mis muslos impulsando los movimientos de mis caderas, de arriba a bajo, de un lado a otro.

Ambos nos meneamos hasta el suelo, lentamente.

—¡Wu!—animan todos.

Bajo mi vestido cuando siento que quedare expuesta.

La intensidad de una mirada sobre mi me hace voltearme, Rayan sigue al lado de Ivan, veo como muerde su labio inferior, manteniendo sus ojos fijos en mis movimientos.

Desabotona los primeros botones de su camisa como si lo asfixiara.

Sonrió con satisfacción, Noah y yo seguimos en lo nuestro por un tiempo más hasta cuando la música se detiene.

Por el hecho de que faltan tres minutos para que el reloj marque las 12:00am.

Acomodo mi vestido de lentejuelas doradas, peinando un poco las hondas de mi cabello, caminando a la barra en la que se encuentra Rayan sentado con su elegante saco.

Que guapo luce...

—¿Qué tal le pareció mi baile?—pregunte divertida con una sonrisa.

Respira hondo.

—Muy provocador... Estuve pensando si debía fumar, no creí controlarme si seguías moviéndote de esa forma tan caliente.