Bullying, Anorexia y un Angel - Niall Horan

Capitulo 27

Niall

— ¡Niall! ¡Niall! –giré a causa de aquellos gritos que venían desde lejos. Ahí, corriendo hacia mí, se encontraban Liam y Zayn.

— ¿Qué les sucede? –hablé una vez que estaban frente mía.

— Alejandra... –dijo Zayn agitado mientras colocaba ambas manos en sus muslos y respiraba rápidamente. Liam imitaba su gesto

— Harry y Josh... –habló Liam ahora con la voz jadeante. Al segundo me enderecé.

— A ver, díganme que es los que está pasando –exigí. No me sentía para nada bien al oír "Alejandra" y "Harry" en una misma oración.

— Harry arrastró a Alejandra hasta el baño que está cerca de la tienda de comida junto con Josh. Llegamos cuando la estaban golpeando –abrí los ojos como dos huevos fritos, y estoy seguro de que mi boca también lo estaba.

Son unos hijos de puta.

— ¿Qué? –exclamé alterándome.

— No sabemos cómo sucedió ni nada –habló Zayn.

— Pero oíamos como Harry hablaba con alguien en el baño de hombres y no era precisamente una conversación muy buena –habló Liam esta vez.

— ¿Dónde está? –pregunte al segundo de que se calló.

— Siguen en el baño.

— ¿Siguen? –fruncí el ceño. ¿La habían dejado ahí con Harry y Josh?

— Tuvimos que llamar a Alex que se encontraba en la tienda de comida. Es su novio y debe protegerla.

Era cierto. Ella y él estaban juntos. Yo no podía hacer nada al respecto. Incluso declaré mis sentimientos hacia ella y ella llegó a responderme con un hubo un momento en el que comenzaste a gustarme pero todo se esfumó gracias a la llegada de Alex. No podía ir a consolarla como lo hice las últimas veces pero...

Si podía darle un merecido a Harry, ¿no?

— Chicos, necesito que encuentren a Harry por mí. Yo igual lo estaré buscando pero si lo ven; me avisan. Debo arreglar las cosas.

— No arreglaras nada a los golpes Niall –habló Liam al instante.

— ¡Deber tener su merecido!

— ¿Y por qué no hablas con él sin causar algún daño?

— No creo causarle más daño del que él haya causado alguna vez –respondí más serio. Recordando aquella vez que estaba en el baño de la biblioteca golpeando a Alejandra y yo me interpuse a aquella patada que iba directo a su rostro.

— No estoy contigo en esto Niall. Sabes que odio todo lo que tenga que ver con violencia –negó Liam. Miré a Zayn y él imitó su gesto.

— No puedo darle un merecido después de que yo igual hiciera lo que él hizo. Tanto él como nosotros dos deberíamos tener aquel merecido –habló tranquilamente.

— Bien, yo iré sin su ayuda. No dejare que vuelva a hacerlo –hablé molesto.

Me di la vuelta, no sin antes de agradecerles. Pero antes de girar hacia la tienda de comida, giré en su dirección y grité:

— Deja de pasar tango tiempo con Liam, Zayn.

Y luego de aquello salí corriendo hacia el baño. Primero tenía que ver como estaba mi princesa. Porque así lo sentía. Mi princesa.