Dyanna Waters - la bastarda de Jaime Lannister - siempre se sintió sola en Desembarco del Rey.
Sin saber siquiera quién es su madre, anhela conocer su herencia, pero su padre no está dispuesto a compartir.
Cuando la Guerra de los Cinco Reyes empieza...
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"Me entrenarás?" Ella le sonrió a Jon, que la miró con sorpresa por su petición.
"Entrenarte en qué?" Preguntó.
"Quiero aprender a luchar!"
"Tienes dragones para eso." Se burló. "Me estás diciendo que la Princesa de Rocadragón no sabe cómo sostener una espada?"
"Eso es precisamente lo que estoy diciendo - una amiga me enseñó a sostener un arco hace mucho tiempo, pero nunca una espada. Quiero aprender a luchar."
"Suenas como mi hermana." Jon reflexionó mientras el par subía los empinados escalones de Rocadragón. "Tal vez cuando esto termine, te enseñaré."
"Cómo se supone que te ayude a ganar contra el ejército de los muertos si no puedo blandir una espada?" Dyanna frunció el ceño.
Jon miró hacia arriba, hacia donde cuatro dragones estaban volando. "Creo que ellos serán de utilidad."
"Sólo hay un dragón que me es leal." Dyanna sonrió. "Y admito que su espalda no es el lugar más cómodo para sentarse."
"Si tenemos tiempo, entonces sí, te enseñaré a luchar." Jon sonrió, y Dyanna sintió alivio inundar a través de ella por sus palabras. Necesitaba saber cómo defenderse si algo salía mal.
Cuando el par llegó a la cima de la escalera, Tyrion los saludó con un rostro solemne.
"Qué ocurre?" Dyanna preguntó, sintiendo el miedo filtrarse en su alma.
"Capturamos Roca Casterly." Tyrion dijo, y Dyanna estaba un poco aliviada. Había visitado Roca Casterly unas cuantas veces en su juventud. Era bonito allí.
"Eso es bueno, no?" Preguntó una vez que notó que Tyrion no estaba aliviado.
"Ni siquiera se molestaron en defenderlo." Tyrion miró hacia abajo. "Saquearon Altojardín en su lugar."
"Otro aliado perdido?" Los ojos de Dyanna se agrandaron. "Daenerys lo sabe?"
"Sí." Asintió. "Ella me culpa."
"Eres su asesor militar, por supuesto, que te culpa." Dyanna sacudió su cabeza. "Pero eso no significa que tengas la culpa."
Dyanna, Jon y Tyrion se precipitaron al salón del trono, donde Daenerys despotricaba contra Missandei - y paseaban frenéticamente.
"Perdí a todos mis aliados - me los arrebataron mientras estaba en esta isla."
"Su Majestad." Dyanna se inclinó al entrar. "Sigues teniendo el ejército más grande."
"Que no podrá comer porque Cersei se llevó toda la comida de El Dominio." Daenerys se giró a mirar a su hermana - con rabia en sus ojos.
"Llama a los Inmaculados - tenemos suficientes barcos para llevarlos al continente. Si nos comprometemos a bloquear Desembarco del Rey-" Tyrion intentó alentarla, pero la rabia de Daenerys se acumuló en su interior.
"Tus estrategias nos han hecho perder a Dorne, las Islas del Hierro y El Dominio."
"Si he subestimado a nuestros enemigos-"
"Nuestros enemigos? Tu familia, querrás decir? Tal vez no quieras dañarlos después de todo."
Tyrion le envió una mirada a Dyanna, que a su vez cerró los ojos con fuerza. Estaban yendo en círculos.
"Basta de tus planes. Tenemos dragones y volaremos con ellos a la Fortaleza Roja." Daenerys miró a Dyanna que se inclinó obedientemente, temiendo la idea de volar a otra batalla.
"Hemos discutido esto." Tyrion trató de advertirle sobre el plan, pero Daenerys no lo escuchó.
"Mis enemigos están en la fortaleza roja. Qué clase de Reina soy si no estoy dispuesta a arriesgar mi vida para luchar contra ellos?"
"Una inteligente." Tyrion respondió, pero Daenerys solo negó, y sus ojos finalmente se posaron en Jon.
"Qué crees que debería hacer?"
"Nunca pensé que los dragones existirían de nuevo - nadie lo pensó. La gente que te sigue sabe que lograste hacer algo imposible, y quizás eso les ayuda a creer que puedas lograr otras cosas imposibles - construir un mundo diferente al que conocen. Si los usas a ellos para derretir castillos y quemar ciudades no eres diferente, serás más de lo mismo."
Daenerys miró a su hermana - con su pelo revolviéndose en su cara. "Volamos."
"A dónde, su Majestad?" Dyanna preguntó.
"A El Dominio." Miró a Tyrion. "Reúne a todos los Dothraki, salimos de inmediato."
"Como desee."
Daenerys fue a prepararse para la batalla, pero Dyanna se giró hacia Jon antes de que se fueran.
"Gracias, por convencer a mi hermana de no quemar una ciudad."
"A dónde vas?" Jon preguntó preocupado.
"Presumiblemente a vengarme de mi familia por haber tomado Altojardín." Dyanna se rió un poco. "Si necesitas algo, háblale a Tyrion."
"Mantente a salvo." Jon dijo mientras ella se alejaba, mirando al cielo. Era casi como si Rhaenyra pudiera sentir la urgencia de la mente de Dyanna, y el dragón bajó en picada - encontrando un lugar para posar su gran cuerpo mientras lo hacía.
Era la primera vez que Jon veía un dragón de cerca, y ni siquiera estaba tan cerca de ella cuando vio a Dyanna montarla. Los dragones eran más grandes de lo que él podría haber imaginado.
"Volamos." Dyanna susurró mientras acariciaba su mano sobre las escamas azules. Soltando un chillido de emoción, el dragón azul se impulsó hacia arriba en el frío aire de Rocadragón.
