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-Dale Valentina, apurate que no llegas. - grita mi mamá. Bajo las escaleras escalón por escalón, porque sino la valija se me hace mierda.
Hoy nos vamos para Villa Gessel Bautista y sus amigos, Mila, Pia, Santiago, Julián, Federico, Lucas y yo así que vamos a ser como veinte personas en una o dos casas. Mi mamá nos va a llevar a mis amigas y a mi, Bautista va con sus amigos y después a los chicos los vemos allá.
- Acá vengo- termino de bajar la valija, la dejo al lado de la puerta y vuelvo a subir a agarrar mi bolso de mano con todas las cosas personales e importantes.
- Nos vamos diez días, no un mes- dice Bautista llegando con una valija más chica que la mia.
- Por lo menos ella no se olvida nada- Mi abuela lo reta entregandole una pila de ropa interior para que guarde.
A las ocho llegan mis dos amigas y finalmente nos vamos.
- Creo que es la primera vez que me voy de vacaciones con tanta gente- comenta Pia desde el asiento de atrás.
- Les quiero decir una cosa a las tres- dice mi mamá- no quiero que excluyan a Agustina en nada, cualquier cosa que hagan la invitan queda en ella si quiere o no ir. Yo se lo que es estar embarazada joven y por suerte nunca me dejaron de lado, ¿la invitaron a venir?
- Si mamá, nunca la dejamos de lado. Para Mila y yo es más difícil por la distancia, pero nunca dejo de mandarle mensajes como hacíamos antes.
- Siempre que puedo voy a verla- contesta Pia- pero cuando la invitamos dijo que se iba a ir con sus otros amigos, y eso pasó antes de que sepamos que estaba embarazada.
- Tampoco se enojen con ella, ahora hablando de Gesell no quiero ir a buscarlas porque están presas, pasenla lindo, conozcan a chicos y usen forro. - termina de decir Malena, estaciona el auto y bajamos.
Entramos a la casa y como somos las primeras en llegar elegimos las mejores habitaciones, somos esto. Cuando llegan Bautista y los amigos Malena habla con los padres y después se van.
- Llegamos- grita Julián. Bajo las escaleras corriendo para saludarlo, pero primero veo a mi novio- fui ignorado.
- Hola mi amor- dice apretándome a él.
- Te extrañé mucho- le doy un beso, me bajo de arriba suyo y finalmente saludo a los chicos. Desde el veinte de diciembre que no los veo, porque no viajé a ver ningún partido, la peor novia ya sé. - ¿cómo fue el viaje?
- No quiero volverme a subir a un auto donde maneje Julián- se queja Lucas- no tenemos siete vidas.
- Pobre Julito- lo abrazo y este se hace el que llora- ¿vos sólo manejaste?
- Santiago también, pero son dos extremos distintos. - Federico se sienta en el sillón- tu novio es una vieja manejando.
Santiago le rebolea un almohadón en la cara, que buena puntería tiene mi novio. Vamos hasta el patio donde están todos en la pileta.
