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10 de noviembre,
Mar del plata.

- Hola Juani- afino mi voz cuando agarro a mi hermana de su cuna

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- Hola Juani- afino mi voz cuando agarro a mi hermana de su cuna. Le doy un beso y sonríe, amo a este ser más que a mi vida. - Llegaron las más lindas.

Nos sentamos en la mesa del comedor, mi papá me pasa un mate y Juli le da pecho a Juani.

- ¿Salís hoy? - pregunta Eugenio.

- Si, después del partido - le devuelvo el mate- voy a tomar algo con los chicos, viene a buscarme Tomi.

- Genial entonces, pero voy a buscarte. Porque van a tomar y no quiero que vuelvas con alguien que tenga alcohol en sangre.

Me río de las ocurrencias que tiene, pero no me quejo.

- Como quieras- me encojo de hombros- ¿pero no conoces a Tomi?

- Obvio que lo conozco, lo amo. Todos los martes nos juntamos para jugar un partidito, también viene Manu.

- ¿Fueron a la cancha el domingo? - asiente. - una cagada que el forro sea de boca, porque extraño ir a la cancha con él.

- ¿Te puedo hacer una pregunta? - no llego ni a decirle que si, cuando ya me esta preguntando. - ¿alguna vez pasó algo entre ustedes dos? ¿Un beso? Si es algo más no quiero saberlo.

- ¿Por qué todos piensan que pasó algo con Manuel?- me río porque esta situación siento que ya la viví. ¿Acoso tengo escrito en la frente "me comí a Manuel"?

- Perdón que me meta- Llega Juliana, con Juani, y se sienta con nosotros- pero desde que los conozco me transmiten una vibra distintinta a la que tenes con Tomi, o a la que tenes con las chicas. Es como que por más alejados que estén siempre van a volver a encontrase.

No me molesta que me digan estas cosas de Manu, porque es mi amigo y lo adoro, pero me hacen pensar.

- Mejor voy a ver que me pongo después del partido- digo yendo para mi habitación.

°°°°

- Salud- brindamos después de que nos hayan traído las cervezas.

- ¿Como estuvo el partido? - pregunta Tomás.

- Bien, con goles de Julián y Lucas- respondo con una sonrisa, mirando a Pia. Mi amiga se pone roja, por lo que largo una carcajada - ¿Lo viste, Pi?

- Si, maldita- suspira - ¿está mal que me guste tanto?

- Obvio que no- agarro sus manos por encima de la mesa- son tan lindos juntos, pero lo importante es que se quieran. Lucas es un buen pibe, pero yo no puedo decirte que hacer.

- Che, ¿pedimos unas papitas? - dice Manu, no le tenemos ni que responder cuando él ya hizo el pedido.

- ¿Lo viste a Julián? - niego ante la pregunta de mi amiga.

Buenos Aires; Santiago Sosa.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora