*Cinco*

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Despedirme de mamá a pesar de la distancia, se hace tan o más difícil como si estuviéramos cerca. Y estoy segura que mientras esté acá tratará de buscar cualquier excusa para llamarme, aunque me ha prácticamente jurado que me dejará disfrutar mis vacaciones.

El color ocre de las paredes a hora le da un poco de energía a mi cuarto, papá lo ha escogido bien. Con la toalla enrollada en mi cuerpo luego de mi baño, busco mi teléfono y me siento en la cama para llamar a mi amiga Cam mientras saco de mi maleta la ropa que me pondré para ir a mi fiesta de bienvenida. Marco su número y aguardo a que conteste sosteniéndolo entre mi cabeza y mi hombro mientras examino la ropa que traje.

—¿¡Qué tal por allá!? —pregunta muy interesada.

—Bien, todo perfecto —respondo desechando una blusa blanca.

—¿Qué haces ahora? ¿Ya te aburriste de ver la cara de tu padre?

—¡Oye! —chillo—, por supuesto que no, estoy escogiendo lo que voy a ponerme.

—Ah sí, ¿acaso vas a salir? —pregunta poniendo una cara exagerada de sorpresa.

—Así, es —confirmo vanidosa para seguirle el juego y deje de pensar que vengo a aburrirme en este pueblo—, Joshua vendrá a recogerme para llevarme a una fiesta de bienvenida.

—¿¡Lo dices enserio!?

Vaya, sí que logro mi objetivo. No tengo quejas de papá, él siempre hace que me sienta... mimada y bienvenida. Mamá sí que debe temer a eso.

—Ya basta. —Le pongo fin a su teatro de buen padre—, y no te preocupes, también estoy sorprendida por eso.

—Yo estaría preocupada —prosigue acariciando su barbilla un tanto lampiña.

—¡Por qué!

—Nunca me has contado que te hagan fiestas de bienvenida, a parte de la particular que te hace tu padre. No crees que es raro.

Achina sus ojos y eso me hace carcajear. Jamás lo pondría a competir con Carl, pero él es el mejor; sin embargo, en medio de su broma me ha puesto a dudar un poco.

—¿Y por qué sería raro? A ver, dime —le exijo.

No es que crea que haya algo raro.

—No lo sé. Tu amigo Joshua tiene novia, ¿no?

—Si, así es; pero que tiene, no la organizado él.

—¿Entonces quién?

—Su novia. Ella sabe que somos buenos amigos.

—Eso me huele mal —expresa como si augurara una tragedia y yo ruedo mis ojos.

—Que puede salir mal, solo será una fiesta, además, solo lo dices porque estás celosa.

—No estoy celosa —se queja—, solo me parece raro, pero bien, disfruta tu fiesta.

—Vale, lo haré —afirmo sonriendo con la el vestido perfecto para la fiesta.

—Odiosa perra.

—Yo también te quiero —respondo a su cariñoso insulto de amigas—, Josh no demora en recogerme, tengo que colgar.

—Me cuentas como te va.

—Mañana te llamo —digo y cuelgo para empezar a arreglarme.

Mientras lo hago deshago de mi cabeza las palabras de Cam, que puede ir mal. No soy muy amiga de la novia de Josh, pero tampoco tengo problemas con ella como para que quiera hacerme alguna broma.

Termino de hacerlo y me miro en el espejo del bonito tocador que también hizo mi padre. Escucho que tocan mi puerta.

—Allie, llegaron por ti —avisa desde afuera de la puerta.

—Ya bajo —respondo y me apresuro en ponerme mis zapatillas.

Escucho los fuertes pasos de sus botas al bajar las escaleras y yo busco la chaqueta vaquera con borrego que me regalara en mi anterior viaje, una cartera pequeña cruzada y abro la puerta.

Bajo rápido a la sala y directo hasta la puerta. Josh está allí, pero está solo. Sabía que vendría a recogerme con su novia Sophie, pero no deja de incomodarme la idea. Él me sonríe cuando me ve y ella también, pero más comedida. Papá se hace a un lado cuando me ve llegar.

—Te ves linda, nena —dice y yo ruedo los ojos.

La verdad quiero chillar de vergüenza. Omito lo que dice y me dirijo a los chicos.

—Hola Sophie, y hola de nuevo Josh.

—Hola, podemos irnos ya —dice ella y se da la vuelta para volver a la camioneta de Josh.

—Sí, claro —digo y me giro hacia papá. Me inclino y le beso la mejilla—, nos vemos al rato Pa.

—Te esperaré despierto —anuncia y yo flipo.

—Ay no, por favor.

—Por supuesto que sí. Ahora vete.

Básicamente me empuja y yo salgo para ir con Josh, ya que Sophie se adelantó y tomó su puesto en el lado del copiloto. Exhalo bajo y me digo que es normal que se porte así. es su novio y yo soy una aparecida, aunque, ahora más que nunca voy a fijarme en Josh. Sophie es una chica linda, un tanto delicada y muy diferente a mí, y muy a mi pesar se ve muy bien junto a Josh.

Ocupo mi lugar en la parte de atrás y Joshua al volante poniendo en marcha su camioneta. —Gracias por la fiesta, Sophie —intento mostrarme amable—, cuando Josh me dijo, realmente me sorprendió.

—¿Por qué? Si eres amiga de Joshy, también lo eres para nosotras. Además, Scarlet la tenía planeada, solo te sumamos a la idea.

—Gracias chicos —esbozo algo confundida con su actitud, entre buena y no tanto.

—De nada —acota y no puedo evitar mirar que coloca la mano sobre la que Josh tiene puesta en el volante, como si demostrara con ello su propiedad sobre él.

Yo solo pienso que ni al caso. Josh... ya no me interesa...

***

Un chico malo en mi verano✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora