La molestia en su mirada era notoria, abrió su boca un par de veces y la cerró las mismas sin decir una palabra, sin mover un músculo y sin apartar sus cafés ojos de los míos.
-¿Me engañaste? - repetí más firme ésta vez.
El se limitó a quitar mi mano de su computadora y a abrirla nuevamente, dejándome exactamente igual que al principio.
-Adam, contéstame.
Hablé más exigente.
-Tengo que enviar ésto Emma, es importante, no es momento para ser infantiles.
Con una respuesta tan inconclusa no hizo más que molestarme cada vez más.
-¿Infantil? - dije sinceramente ofendida. -¿Ésto te parece infantil?.
Hablé a la par que sacaba de mi galería en el teléfono la fotografía de Adam besando a una rubia.
Él la miró por un pequeño momento, pasando saliva y después volviendo su vista a la pantalla que tenía delante de si.
-No es el momento.
-Es una respuesta de si o no Adam, por amor de Dios, solo tienes que responder un maldito si o no - mis palabras estaban saliendo de mi sin meditarlas, me había sobrepasado con la indiferencia que parecía tener en la situación. -Lo preguntaré una última vez, ¿me engañaste?.
Esta vez el me miró con los ojos bien abiertos.
-De verdad crees que soy así de miserable Emma? Realmente crees que sería capaz de hacerte algo así? Crees que sería tan bajo de engañar a la chica a la cual su familia me acogió como uno más, me dio la educación que no pude tener y que me hizo socio directo de su negocio, crees que soy la clase de persona que le da la espalda a los que le tienden la mano? crees que no me importaría tirar por la borda la confianza que han depositado en mi y todo el tiempo que he invertido para regresar algo de lo que me han dado, crees que soy la mierda de personas que muerde la mano que le da de comer?. Pues no, no soy esa clase de persona, gracias por el voto de confianza, esas fotografías son mucho antes de reencontrarte, todo eso es historia que no compete nuestra actualidad, son fragmentos de mi que no vale la pena recordar, he avanzado Emma, no soy el mismo chico incrédulo que se deja enredar por fantasías de una semana.
Me dejó sin palabras por el motivo erróneo. Dejó en claro que el no sería un traidor por todo lo que había hecho el apellido Parks por él, en ningún momento dijo que no lo haría por el amor hacia mi. Tenía razón, no era el mismo y yo era la que no se había dado cuenta de ello.
Nos quedamos viéndonos mutuamente unos minutos, yo esperando que dijera lo que era obvio que no pasaría, él esperando probablemente que lo dejara continuar con su trabajo.
Un suspiro salió de mi boca y me di la vuelta con los ánimos en el suelo, muy dentro de mi estaba aliviada por escuchar que esas fotografías no eran recientes (algo que su cabello ahora largo podía confirmar) y que no eran lo que parecían, pero otra parte de mi estaba destrozada por descubrir que probablemente el seguía a mi lado por el compromiso de no defraudar a mi familia.
Llegué hasta mi habitación, me recosté sobre la cama y abrazada a una de las almohadas dejé que mis lágrimas corrieran en silencio, me obligué a dejar de lado todos mis pensamientos para dejar que el dolor saliera en forma de llanto pacífico, todo el sentimiento de la asfixia que había estado en mi garganta por fin se liberaba de mi cuerpo.
El frio ambiente me abrazaba y recorría mi cuerpo interna y externamente, un vacío palpitante se hacía cada vez más grande en mi pecho, era como si hubieran robado una parte importante de mi adentro.
No fui consciente del tiempo que pasé ahí tumbada, mi único referente era el sol que se movía conforme pasaban las horas, mi llanto cesó en cierto punto pero el vacío que se había formado en mi era cada vez mayor, al cabo de un rato escuché que abrían la puerta de la habitación, no me molesté en girarme para saber que se trataba de Adam, podía escuchar sus pasos en el suelo de madera hasta que se detuvieron y sentí la cama hundirse del otro lado, el silencio que se había formado en el ambiente creó una incomodidad palpable.
Pude escucharlo soltar un suspiro para después sentir como sus brazos me rodeaban y me atraían a su cuerpo, aún así me negué a verlo directamente a los ojos, no estaba segura de poder resistir observar su falta de amor hacia mi persona, pero entonces dijo algo que no esperaba para nada.
-Estoy cansado - dijo con sus labios pegados a mi cabeza. -Estoy cansado Emma.
Me limité a dejarme sentir su abrazo mientras yo apretaba con más fuerza la almohada que yacía entre mi cuerpo y mis brazos, tenía que tomar una decisión sobre lo que pasaría tarde o temprano, pero mi corazón no estaba listo para ello.
Me levanté de la cama y me escurrí fuera del abrazo de Adam para ir al baño a darme una ducha, de repente me había surgido la necesidad de aclarar mis ideas bajo el agua, sin pensarlo dos veces me desnudé y abrí la llave para dejar caer el chorro sobre mí, sentía como si todo estuviera pasando en cámara lenta, mis oídos se taparon y me quedé bajo el agua un momento, tras la puerta de cristal empañada que separa la ducha y el resto del baño noté como una silueta se movía en dirección a mi, cuando por fin giré para ver lo que ocurría Adam abrió y entró mirándome a los ojos.
Completamente desnudos y bajo el agua ambos nos abrazamos como deberíamos de haberlo hecho en un principio, pero por alguna razón había un extraño matiz de despedida en él, la idea de perderlo hizo que mis lágrimas salieran una vez más, escondiendo mi cara en el pecho de Adam comencé a llorar nuevamente en silencio, hasta que la respiración de éste me hizo mirarlo para confirmar lo que no había visto en mucho tiempo, él también estaba llorando.
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Vuelve a mí, Adam [COMPLETA]
RomanceSegunda temporada de "Solo llámame Adam" "¿Crees poder perdonarme?" "No lo sé." "Lo siento." -Con una trayectoria casi impecable y una carrera traída de la tumba, llega una vez más al cuadrilátero para probar suerte. Con 1.88 metros, 83 kilogramos y...