Capítulo 36

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Hunter salió de su habitación ya listo para ir a la primera clase del día y se encontró con Lìa sentada en el sofá. Se quedó mirándola atónito, hasta esa misma mañana, no había visto su nuevo look.

Ella volteó a verlo y enarcó levemente una ceja.

—Cállate Hunter —Murmuró por lo bajo.

—No he dicho nada —Se defendió rápido mientras levantaba ambas manos.

—Pero lo pensaste.

—¿Qué dices? ¡Te queda fenomenal!

Jane apareció en la sala de estar y observó que su hermana todavía tenía puesto el pijama.

—¿Irás a clases? —Preguntó con un tono prepotente.

—No —Contestó la castaña y se recostó en posición fetal.

—¿Esperaras que tu pelo crezca para volver a ver a Gavrel?

Lìa no respondió.

Gavrel entró a la escuela cargando con el cansancio y el estrés causado por lo que había ocurrido con Lìa

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Gavrel entró a la escuela cargando con el cansancio y el estrés causado por lo que había ocurrido con Lìa. Al caminar vio que, en uno de los estudios, estaban todos los bailarines reunidos. Escuchaban al presidente y a Petra. Entró rápidamente para saber qué anunciaban, aunque ya tenía una idea de qué podía ser.

—¡Gavrel! Al fin llegaste —Exclamó el presidente con alegría. Gavrel se acercó con una actitud distante —Te presento a la nueva directora del ABF, ya la conoces.

Petra lo miraba con una sonrisa triunfadora y ambiciosa, una sonrisa que le decía "Te lo dije".

—Felicitaciones —Murmuró y sonrió apenas.

El presidente se retiró, Petra se presentó ante los alumnos y dijo unas palabras antes de que comenzará la clase. Mientras ella hablaba, Gavrel se encargaba de buscar con la mirada a la castaña entre todos los bailarines, pero no la encontraba por ninguna parte.

Supuso que no fue porque no quería verlo y estaba en lo cierto, de todas formas, fue hasta Jane para hablar con ella.

—Jane, ¿Y Lìa? —Preguntó.

—No vino.

—Iré a la residencia, necesito conversar con ella.

—¡No! No te quiere ver —Hizo una mueca de pena con los labios —Déjala que se tome su tiempo.

Él pelinegro asintió.

—¿Estuviste jugando todo este tiempo con mi hermana?

—Claro que no —Negó sin pensarlo —Quiero explicarle que esa chica no es mi novia.

—Cometió una estupidez, cuando la veas lo entenderás y espero que no la juzgues.

—Cometió una estupidez, cuando la veas lo entenderás y espero que no la juzgues

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Me quedaré contigo una noche más ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora