Después de Borja, Stella llegó al festejo junto a Andrew. Rápidamente mostró su regalo con entusiasmo. Gavrel le agradeció y bromeó acerca de dejarlo con los otros cincuenta trajes que le obsequió años anteriores.
También trajo un pastel para volver a cantarle el feliz cumpleaños preparado por su empleada, la cual era muy buena en la pastelería.
Permanecieron hablando de diferentes temas a la espera de Edward. Fingían que la noche marchaba de maravilla, pero detrás de sus sonrisas tranquilas se ocultaba un presentimiento inquietante.
—¡Feliz cumpleaños! —Exclamó su padre apenas entró al departamento —Esto es para ti —Le dio la bolsa de Giorgio Armani. Gavrel la aceptó y sacó el suéter de esta.
—Gracias —Murmuró con calma.
Juntos caminaron hasta el living donde los demás tomaban vino.
—Buenas noches —Dijo haciéndose notar.
Todos llevaron su atención a él y Stella lo saludó primero.
—Edward, él es Andrew, mi pareja —Ambos estrecharon sus manos con confianza, no obstante sus miradas advertían al otro mantener distancia.
—Bueno, estamos todos así que ya podemos cenar.
Gavrel los invitó a sentarse en la mesa del salón.
—Iré a buscar la cena, preparé tu comida favorita —Miró a su madre.
—¿Mi comida favorita? —Preguntó riendo y acomodando la servilleta en su regazo —No sabía que la tenía.
Él rio levemente y fue a buscar los platos a la cocina.
—Así que es profesor en la academia —Edward aprovechó que su hijo no estaba para hablar de él.
—Así es. Su primer año comenzó bastante bien, ya se ganó el afecto de sus alumnos. Hoy lo sorprendieron con una pastel muy bonito, fue un momento más que agradable —Stella sonrió.
—Como tú, recuerdo que desde los niños hasta los adolescentes te adoraban —Comentó, en un intento por querer sentirse de vuelta parte de la familia. Ella solo atinó a asentir.
Los demás permanecían en silencio, escuchándolos.
Gavrel volvió con todos los platos y le entregó uno a cada uno.
—Lasaña —Su madre analizó la comida con detenimiento —Tienes razón, es mi favorita —Todos rieron a su comentario.
—¿A qué te dedicas? —Le preguntó Borja a Andrew. Trataba de fingir interés solo porque su padre estaba presente y quería molestarlo.
—Soy director de cine —Respondió con una sonrisa —Gavrel, esto sabe delicioso. Podrías ser un gran chef si quisieras.
—Gracias, Andrew. Por el momento solo es un hobbie en el cual invierto mi tiempo libre.
Andrew comenzaba a parecerles un tipo relajado y simpático a los hermanos Novak. Los escándalos no parecían tener lugar en su vida. Tal vez eso era lo que Stella vio en él, porque necesitaba paz y tranquilidad en la suya.
—¿Cómo va la empresa? —Preguntó Andrew mirando a Edward.
—Excelente. Estos días aproveche para ir a la compañía. Todo estuvo normal durante mucho tiempo pero últimamente hubo algunas irregularidades que ya solucionamos con Borja —Observó a su hijo mayor y él sonrió con falsedad.
La cena continuó serenamente. A Gavrel le sorprendía que su padre no hiciera comentarios fuera de lugar. Quizás contarle de antemano que su madre tenía pareja, hizo que razonara un poco y no se comportara como un idiota.
ESTÁS LEYENDO
Me quedaré contigo una noche más ©
Romance¿Qué pasaría si un día te das cuenta que lo que te han contado, no es la verdadera historia? Zoe se crio entre secretos y ahora que ya es una joven adulta, ha creado los suyos propios. Así es como llega a la ciudad de Nueva York para entrar a la Aca...