Supremos Kaiosama

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Luego fue el turno de que presentaran a los supremos Kaiosama. Por lo general esos bebés eran aún más tranquilos, aunque habían excepciones de las que los ex guardianes se percataron, pero no era la gran cosa.

Le pegaron a la piñata por orden de Universo y por consiguiente el palo le fue otorgado a Anat.

- él es Anat, nuestro supremo Kaiosama - Awamo se lo presentó a Sawyer. El niño al ver que hablaban de él corrió a entregarle el palo al ex guardián.

- tú, tú...

- ¿yo qué? ¿Quieres que le pegue a la piñata?

- sí - dio saltitos emocionado.

- vaya, qué generoso - le dio un golpecito suave y le dio el palo al ángel del Universo 2.

Kepler Carter esperaba ver un bebé igual de bonito que Helles, pero al ver al puberto Perú no pudo evitar impresionarse.

- ay por Zeno-Sama, a este bebé ya te lo dieron crecido...

- jeje, yo paso - él tenía demasiada vergüenza de andar con los kaios bebés todo el tiempo, apenas tenía a Gowasu como su amigo ya que eran más o menos de la misma edad. Obvio que no le quiso pegar a la piñata.

- anda pégale - el ex guardián lo animó - mira que yo ya estoy medio viejo, bueno... con las cremas anti arrugas no se nota pero tengo ya unos añitos... el punto es que a mi me encantan las piñatas, la edad no define nada.

- es que la última vez que le pegué a una piñata golpeé a Helles - dijo divertido y se acercó ya con un poquito más de confianza al oído de Kepler Carter - le pegué por accidente en las pompis y por eso se quedó plana...

- no hay nada que una operación estética no arregle, excepto la cara de rana diabólica intoxicada, eso ya es cosa seria...

Sour solo los miraba raro, aunque le agradaba que su Kaio congeniara con más personas.

Perú le dio el palo a Ea en las manitas y se aseguró de que el bebé no se fuera a golpear ni a tropezar, por ende le acomodó bien las gafas y luego le dio espacio para que le pegara a la piñata.

- un bebé con gafas - Mahú sonrió - muy curioso...

- su nombre es Ea, lo sé, nada creativo - su ángel suspiró - aunque sería peor que se llamara Pepe o algo parecido.

El niño le pegó a la piñata pero como aún no calculaba bien sus habilidades motrices se caía de pompas una que otra vez, pero solo se sobaba y sonreía.

Después fue el turno de Kuru.

- qué seriedad la de ese niño - Max opinó.

- yo sé - Cognac le dio la razón - a veces es el amargado del castillo...

- ¿cómo se llama?

- su nombre es Kuru, por lo menos no hace tanto berrinche.

- Kuru y Quitela - el ex guardián asintió y miró a ambos - me gusta la pequeña ratita.

- lo sé es muy tierno - nunca se imaginaron que Cognac podría llegar a tener ese sentimiento por el dios bebé - cuando sea su cumpleaños su fiesta será de Ratatouille y lo vestiré de Remi.

- ¿y ese quién es? Yo me quedé en el ratón Pérez.

- es una película - empezó a explicarle y la conversación se alargó, ambos congeniaron muy bien al parecer.

- por la gracia y protección de Starmund Freud, escucha las plegarias de mis neuronas y dale a mi bulbo raquídeo un poco de templanza - Teddy suspiró al ver al supremo Kaiosama del Universo 6 y se compadeció de Vados. Seguro que esos niños comían demasiado y hacían que ella fuera al super muy seguido.

1 multiverso, 12 pequeños problemasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora