- escuchen todos - Daishinkan los llamó a sus báculos - quiero que vengan ahora mismo al restaurante principal, vamos a almorzar!
-si padre - respondieron todos.
Pasaron los minutos y nadie había llegado, Daishinkan se había desesperado hasta que por fin llegó Awamo y luego Martinu.
- ya era hora - suspiró - ¿y los demás?
- no tengo ni la menor idea padre - comentó Tini - pero creo que vi a Cuckatail en la playa.
- iré a llamarlos - Awamo tomó su báculo y fue por los demás, luego de unos minutos regresó y todos vieron que Daishinkan los esperaba con una expresión enojada.
- ya nos cargó el payaso - suspiró Cognac.
- ¿por qué se tardaron tanto? - dijo Daishinkan al fin - si se puede saber.
- hay papá - le dijo Marcarita - no seas exagerado! nos tardamos como 5 minutos!
- correción - Daishinkan miró su reloj -7 minutos con 18 segundos - frunció en ceño - ustedes creen que tengo todo el tiempo del multiverso, pero no es así! entiendan de una buena vez - golpeó la mesa haciendo que todos los que estaban en el restaurante voltearan asustados - ustedes ya no son niños!
- pero yo si soy una niña - dijo Cus asustada.
- pues igual! - Daishinkan se enojaba progresivamente - comprendan que el trabajo que les he otorgado deben tomarlo enserio!!! los ángeles guardianes deben ser puntuales!!! deben acatar órdenes y asistir al primer llamado ¿entendido?
- si padre - suspiraron - discúlpenos.
- está bien - suspiró y se calmó - pero que esta sea la primera y última vez! no pueden ir por esta vida haciendo lo que se les dé la gana... de eso no se trata.
- que vergüenza - le susurró Vados a Whis - toda la gente nos está viendo.
- ¿quieres decir algo hija? - Daishinkan la miró serio.
- no papá - bajó la cabeza y se estaba aguantando la risa.
- escuchen - suspiró - yo no quiero que ustedes me teman, no quiero que piensen que soy un hombre enojado que no tiene nada de paciencia, aunque lo soy - admitió - pero no quiero que lo piensen!
- eso sonó como un discurso político - comentó Mojito en voz baja y comenzaron a reír con disimulo.
- ¿se puede saber cual es el chiste? - Daishinkan se cruzó de brazos.
- no es nada padre - respondió Cognac rápidamente.
- Cuckatail - Daishinkan miró a su hijo con mucha atención - ¿qué es lo que estás escondiendo bajo la mesa?
- ¿qué?! - se extrañó - ¿de qué habla?
- sabes perfectamente a lo que me refiero - lo miró a los ojos - ¿qué es?
- usted gana padre - sacó a 2 perros que estaban allí y ellos comenzaron a olfatear a Daishinkan - ellos son Cavernet y Merlotte, los encontré en la playa y pensé en... - fue interrumpido.
- no, no, no, no, no, absolutamente no y claro que no - se adelantó Daishinkan - prohibido mascotas en el castillo!
- pero Truba vive conmigo - dijo Cuckatail - 2 amigos nuevos no le vendrían nada mal.
- vaya amigos - Mojito comenzó a reír - tienen nombres de tipos de uvas.
- aún así - Daishinkan se mantuvo firme - no hay manera de que te lleves a 2 perros de procedencia desconocida a tu castillo - se alteró - eso si que no!!!!
- padre - trató de convencerlo - no sea así! ellos merecen un hogar.
- mi chacha tiene razón - opinó Korn - ¿qué culpa tienen ellos de que a usted no le gusten las mascotas?
- las mascotas me gustan - les comentó - lo que no me gusta son las mascotas en el castillo!
- padre... no sea así! - Sour intentó persuadirlo - los perritos necesitan a un dueño que los quiera y los cuide mucho - sonrió.
- y lo tendrán - sonrió de vuelta y todos se esperanzaron - pero no será Cuckatail!
- papá! - protestó este - pero yo quiero adoptarlos! - los abrazó y estos le lamieron la cara.
- pues que mal! - Daishinkan se cruzó de brazos - la respuesta es no!
- padre! - reclamaron todos - no sea así!!!
- lo siento - les confesó - pero cuando digo "no" es "no"!
- papá - razonó Campahri - si usted fuera un perro, le gustaría que lo adoptaran.
- pero no lo soy - se cruzó de brazos - Cuckatail, tienes 10 minutos para ir a dejar a los perros donde los encontraste.
- si padre - dijo este a regañadientes y se fue a dejar a los perritos, los demás ángeles se quedaron muy indignados.
Luego Cuckatail regresó.
- ¿enserio los dejaste? - le preguntó Whis al oído.
- no - le sonrió - los escondí en el báculo.
- ¿alguna vez te han dicho que eres un genio? - rió Marcarita.
- muchas - se vanaglorió.
- oye - Daishinkan se acercó a él - si me llego a enterar de que me estás mintiendo y tratas de llevarte a esos perros te las verás conmigo!
- si papá - dijo este disimulando.
- niños - se preocupó Daishinkan - ahora que lo pienso.... ¿dónde están los bebés?
- oh! - le explicó Cus - verás, nos dimos cuenta de que se podían guardar en los báculos! - sacó a Rumsshi y a Gowasu - ¿ves?
- escuchen - suspiró Daishinkan - si les he confiado a esos niños es para que los cuiden, no para que los guarden en sus báculos! - obligó a todos a que los sacaran - muy bien, ahora que estamos todos hay que comer.
Lam mesera se acercó a la mesa y ordenaron lo que comerían, Daishinkan estaba en silencio y de brazos cruzados.
- ¿qué va a comer usted padre? - le preguntó Awamo.
- yo no quiero nada - se resignó.
- ¿está seguro? - le preguntó Vados.
- he dicho que no quiero nada - mantuvo su postura.
- como usted diga - la mesera se fue.
- papá! - Quitela trepó por los hombros de Cognac y se sentó en su cabeza.
- bájate de allí - le advirtió Cognac - te vas a caer.
- no! - Quitela le pegó en la cabeza.
- te digo que te bajes! - Cognac comenzó a mover rápidamente su cabeza y Quitela salió disparado a los brazos de Daishinkan.
- Cognac - dijo este tratando de no enojarse - te comportas como si fueras un niño! este bebé - le entregó a Quitela - es como tu hijo! debes cuidar de él, no lanzarlo por los aires - hizo una representación dramática de lo que pasó con una servilleta.
- padre - dijo Whis - con todo respeto, creo que usted está siendo un poquitín exagerado.
- Vaya - opinó Marcarita - y viniendo de Whis eso es mucho decir.
- ¿exagerado me dices? - se ofendió - ¿exagerado? yo no soy exagerado!
- si que lo eres - se escuchó una voz muy familiar - siempre lo has sido!
- papá - bufó Daishinkan - ¿qué haces aquí?
continuará....
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1 multiverso, 12 pequeños problemas
Hayran KurguDaishinkan deja a los ángeles a cargo de los dioses de la destrucción cuando estos son bebés. ¿podrán desempeñar bien su trabajo?