|72: "El Mensaje"|

893 77 6
                                    

Reproducir canción en todo el capítulo,  gracias❤

Iana Bennett.

Observé detenidamente a Max frunciendo mi ceño mientras el hablada por el móvil.

— Si, todo en orden. Pueden comenzar con toda la remodelación… ¿En dos semanas más? Mierda… Puedo conformarme con eso pero mantenme informado… Claro, puedes llamarlo y decirle que supervise la estructura y me haga un informe para el sábado en la mañana — continuó hablando mientras me encontraba completamente confusa e intrigada de saber que estaba hablando.

Luego de esa conversación, pude notar que Max se encontraba relajado. La verdad es que tanto a él como a mí nos hacía falta comunicarnos, él se encontraba tranquilo mirándome de vez en cuando para dedicarme una sonrisa tierna. ¿Acaso vamos a terminar bien? Dentro en mi cabeza la idea de que Omar esté cerca de nosotros me da escalofríos y nervios, y me hace preguntarme ¿Por qué tan solo no se da por vencido? Pero luego recuerdo el odio, el rencor, y el deseo de matar que abunda dentro de él. Es un completo psicópata, que no tiene límites para logar sus objetivos.

— Quiero fotos para esta tarde… No voy a salir hoy por un inconveniente dentro de la casa… Cuando pueda iré, adiós — cortó la llamada y se dirigió hacia el sillón donde me encontraba sentada de piernas cruzabas.

Max llevaba una toalla alrededor de su cintura dejando al descubierto sus abdominales formados y su tordo ancho fuerte, su cabello estaba húmedo a causa de la ducha de la cual había salido. Se veía sexy, apetecible y deseo. Contuve el aliento por unos segundos sin dejar de verlo, estoy totalmente cohibida de él y de su cuerpo, miles de pensamientos perversos cruzaba por mi cabeza e instintivamente relamí mis labios.

— Ey — murmuro sacándome de mi trance — Si sigues mirándome así voy a descontrolarme — me ruborice de inmediato levantándome del sillón para fijarme en él.

— Como si tus advertencias me dieran miedo — sonreí ladina retirándome de su lado para caminar en dirección hacia la salida de la habitación — Iré a la cocina, ¿Quieres que suba algo? — pregunté tierna viendo como el asentí.

— Algunas galletas, tengo un antojo muy fuerte ésta tarde — me miró con picardía pasando una mano por su cabello húmedo y yo asentí tensa asintiendo despacio.

¿Hasta cuando tendré que soportar los efectos que producen sus palabras? Al cerrar la puerta solté todo el aire retenido en mis pulmones y liego me dirigí por el pasillo, baje los escalones a pasos rápidos y luego crucé el recibidor para llegar a la cocina, me alegró encontrarla vacía así no tendría que escuchar los cotilleos del personal con mi presencia. Me acerqué hasta el refrigerador y tomé dos barras de chocolate, creo que también tengo antojo. Luego caminé hacia la despensa y tome un paquete de galletas seguido de dos botellas de agua. Mientras ordenaba todo en la encimera el timbre sonó llamando mi atención, lamentablemente desde la cocina no se puede visualizar nada de la puerta principal porque lo que me abstuve de saber quien había llegado.

Volví a tomar las cosas y me dirigí de nuevo con el camino recorrido antes. Una vez en el pasillo note que la puerta de la habitación se encontraba abierta y confusa fruncí el ceño. En el umbral sentía que el mundo me caia encima. Era la imagen más excitante y codiciosa que en mi vida había logrado ver.

— ¡Mierda! — exclame en un susurro viendo a Max tendido sobre la cama con una bola de pelos castaña clara que ladraba suavemente. Pero lo mas erótico de todo es que cuando Max dejo de jugar con el perrito se fijó en mi y mis piernas temblaron.

Todos y cada uno de mis músculo se tensaron, mi respiración se paralizó y mis labios se separaron por instinto. Su rodilla estaba flexionada, mientras que la otra solo se mantenía tendida sobre el colchón. Su torso desnudo y ese rostro provocador enviaba cosquillas a mi entrepierna. Nunca había presenciado un momento tan tenso t caliente, o bueno algunos junto a él. ¡Pero Dios, parece sacado de una revista porno para adolecentes!

Más Que Amor ✔3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora