CIEL (NO) ES UN DONCEL.

Norðrljós

Norðrljós 

(Especial, capítulo 50.)

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Nuestra escena comienza una hermosa y cálida mañana donde los pajarillos cantan y el sol baña a Albión con sus cálidos rayos… 

¡Momento! 

En realidad es de noche, es diciembre y el frío es mucho más grande que el del corazón de tu ex. 

Nuestra escena comienza dentro de la habitación de la joven pareja real donde estos se encuentran en cierta situación no apta para todo público… 

-¡Ngh! Se-Sebas… - gemía el príncipe abrazándose a la ancha espalda de su esposo recibiendo las últimas potentes estocadas de aquella faena nocturna. 

-¿Cómo se siente? - pregunta con un tono de voz pervertido ralentizando el ritmo de sus estocadas, pero a cambio volviendo las más profundas. -¿Quieres terminar ya? ¿Pese a que me estoy esforzando tanto? - 

Ciel por su parte no responde, tan solo sonríe antes de contraer sus músculos apretando al azabache dentro suyo impidiéndole moverse por lo cual hace que termine por correrse dentro de él. 

-¿Decías? - pregunta el menor con un tono de burla tocando su propio miembro con el afán de hacerse terminar por su cuenta. 

-Tramposo. - responde el militar completamente agitado saliendo del príncipe. -Lo hiciste a propósito. - 

-Eso te pasa por presumido… Encima dejas a tu esposo insatisfecho… Que tipo tan precoz… 

-¿Estás seguro de que soy precoz? - pregunta curioso acomodándose de nueva cuenta entre las piernas del menor. 

-Acabo de comprobarlo. - 

-Ahora vas a comprobar que no…

… 

Por la mañana…

Nuestra escena comienza en la habitación de la joven pareja real, un poco antes del amanecer donde el militar despierta a su príncipe con suaves besos por todo el rostro. 

-Buenos días querido. - saluda sonriente al príncipe que apenas abre los ojos. 

-No ha amanecido. - responde volviendo a acomodarse para dormir. 

-Bueno, eso es cierto, es solo que pensé que hoy podríamos salir. - 

-¿Es en serio? Casi me rompes hace un rato y quieres salir. - 

-Tienes razón, no sé en qué estaba pensando, dejemos mejor para otro día el viaje a ver los  Norðrljós. - 

-¿Eso es? - 

-Las Auroras Boreales… Lo sabías, ¿no? - 

-No con ese nombre, no entiendo mucho del lenguaje del antiguo reino. - 

-Bueno,  no importa, iremos a verlas en otro momento, solo que no va a coincidir con tu cumpleaños. - 

-Mi cumpleaños es mañana. Mamá organizó un baile para celebrar. Aunque quisiera ir sería imposible. - 

-Por eso mismo quisiera que fuera hoy mismo, podemos pasar la noche fuera, así estaríamos juntos las primeras horas de tu cumpleaños. ¿Que dices? -