LIV. Fuerza.

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No soy capaz de abrir los ojos, los párpados los siento muy pesados, mi respiración es algo tortuosa, es como si mi cuerpo estuviese hecho pedazos, específicamente mi cadera; de repente percibo algo de movimiento. Me es difícil mantener la conciencia.

Suena un teléfono.

-¡¿Qué hago?! ¡No sé si está muerta!... ¡QUE NO LO SÉ! ¡ES POSIBLE QUE AHORA ESTÉ CONDUCIENDO SIN RUMBO CON UN CADAVER, ¿SABES?... No lo sé, ¡no sabía que estaba en sentido contrario! ¡Te juro que frené lo más rápido que pude!... Sí, ¡sí es ella, estoy más que seguro!-

El sujeto hace un breve silencio.

-No, al parecer nadie salió, no sé si escucharon algo... ¡No pude dejarla ahí pero ya no sé qué hacer, Colin, posiblemente estoy conduciendo con un maldito cadáver en la cajuela, NO ME DIGAS QUE ME CALME!- Grita la última frase y de pronto el silencio reina de nuevo.

Lucho con todas mis fuerzas por mantenerme despierta, no puedo levantarme y correr, ¡por Dios, ni siquiera termino de procesar lo que está pasando!

-¡Mierda! ¿Qué hago, qué hago, qué hago?- Susurra la voz masculina. -No puedo abandonarla en el maldito desierto, cielos...-

¿El desierto?

¿¡Qué diablos hará esta persona conmigo¡? ¡VAMOS ALY DESPIERTA!

Siento todo lo contrario, las fuerzas abandonan lentamente mi cuerpo.

¡No por favor, no ahora!

Un rato después, que no puedo determinar si son minutos o segundos,  despierto con la sensación que alguien me levanta, una ráfaga de aire frío hela mi piel... Lucho lo más que puedo por abrir los ojos aunque sea una vez más pero se siente como si tuviera parálisis del sueño.

Después de un corto andar y un par de sacudidas siento gotas de agua cayendo sobre mi cuerpo. El sujeto me recuesta sobre mi flanco derecho en lo que parece ser el frío y duro suelo, puedo jurar que es el pavimento de la calle.

-Lo siento, ahora eres problema suyo.- Menciona el hombre, esta vez creo que puedo reconocer su voz.

Escucho el sonido del motor de un auto.

¡Estoy gritando por dentro! ¡Que alguien me ayude!

Reúno todas las fuerzas de mi cuerpo y por fin logro abrir los ojos, en medio de la torrencial lluvia puedo alcanzar a ver un auto huir a toda velocidad.

¿Dónde demonios estoy?

Miro a mi alrededor, nada en particular. Intento sentarme pero no logro ni siquiera levantar mi cabeza en el primer intento, Dios, siento como si todo mi cuerpo estuviera desconectado de mi cerebro, como si nada "respondiera".

¡Vamos, tienes que hacerlo o morirás aquí en la calle!

La gélida temperatura de la lluvia hace mi cuerpo reaccionar y poco a poco me siento en el pavimento

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La gélida temperatura de la lluvia hace mi cuerpo reaccionar y poco a poco me siento en el pavimento.

Me froto los ojos con las manos para después tratar de descifrar dónde rayos estoy. Estoy muy mareada, como si hubiese bebido demasiado... Me levanto con toda la dificultad del mundo, ¡cielos! ¡No puedo siquiera describir este dolor tan inmenso que tengo en la cadera! Me tambaleo un par de veces hasta que logro medio quedar de pie. Miro hacia todas partes, estoy en medio de la calle de la casa de Turner.

Baby, I'm yours.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora