Baby, I'm yours.

LXVI. Catarsis.

Hablamos por videollamada con Andrea y mi madre, por supuesto, para despedirnos de Arabella.

Me siento como adormecida, como una simple espectadora; como si nada de lo que estuviese pasando fuera real. Detesto este sentimiento, odio no sentirme capaz de tomar las riendas de este asunto justo ahora.

Han dado las dos de la tarde, lo que significa que en este momento mi madre y Arabella deben estar despegando hacia Reino Unido.

Andrea ha mandado unas tres maletas y dos bolsas con mis cosas aquí, a la casa de Alex; lo más conveniente es que me traslade lo menos posible.

El plan es empacar todo, subir las maletas al auto para después ir a la estación de policía, hacer mi declaración, preguntar cómo va todo y, finalmente ir rumbo a Malibú a prácticamente esconderme del posible asesino que está prófugo de la justicia.

-Bien... Creo que empacaré mis maletas ahora.- Menciona Turner después de mirar su reloj de pulsera por unos cortos segundos.

Asiento con la cabeza emitiendo un sonido de aprobación.

-Sé que es estúpido que lo diga pero, intenta ver el lado positivo, Arabella y sus abuelos podrán pasar un buen tiempo juntos, mis padres conocerán a tu madre... Tendremos una casa solo para nosotros en Malibú.- Dice, arqueando una ceja al llegar a la última oración.

Rio por unos cortos segundos.

-Ahorita regreso.- Añade el británico para después darme un beso rápido en la mejilla y retirarse a su habitación.

Yo únicamente me limito a desparramarme en el sillón más grande de la sala.

"Intenta verlo como tiempo para ti, una especie de vacaciones"

Repito sin parar esa frase en mi cabeza pero en realidad suena vacía y sin sentido.

-Creo que eso es todo, ¿Estás lista?-

Levanto la mirada, Alex está justo frente a mí con 2 maletas negras.

Me limito a asentir con la cabeza.

Ambos tomamos nuestras respectivas maletas y caminamos hacia el garaje de la casa.

El británico me ayuda a subir mis maletas a su vehículo.

Sin hablar subo al auto con la mirada fija hacia el frente.

-¿Estás segura de querer hacer esto?-

-Sí, confía en mí.-

El resto del camino hacia la estación de policía me sumergí en un sepulcral silencio. Hay suficiente escándalo en mi cabeza como para tener ganas de hablar de otras cosas.

En minutos que sentí como horas llegamos a la estación de policía. Turner estaciona a una calle y hace una llamada.

Se supone que la declaración que daré hoy será en un ambiente controlado en vista de que puede correr el rumor de que la policía desconoce el paradero de Henry quien, hasta ahora, es el sospechoso principal de todo lo que pasó pero hace un par de calles pudimos notar que un auto nos seguía.

¿Cuándo se terminará todo esto?

Abro la puerta del vehículo y bajo de él; Alex me mira con una mueca de susto.

Mientras cruzo la calle veo a cómo se frota el entrecejo, para después bajar del auto y seguirme a paso rápido.

Corre hasta alcanzarme.

-La policía me indicaría cuando fuera seguro que bajaras del auto.-

-Lo siento, quiero acabar con esto de una vez por todas.-