➡Tercera parte de "Whatever People Say I Am, That's What I'm Not"⬅
En el último año y medio han pasado infinidad de cosas que el frotman de los Arctic Monkeys y Alexandra Hutton, su novia, jamás imaginaron; en especial el radical cambio que sus vi...
Llego a un complejo de oficinas aquí en Hollywood. Queda un poco apartado del edificio en donde trabajo. Aparco el auto y camino hacia el edificio.
Estoy en el 6650 de Franklin Ave por N Highland Ave, en un edificio estilo Art deco color beige , de aproximadamente 40 metros de alto, en la planta baja tiene una especie de marquesina en la se puede leer "MONTECITO", hay uno que otro árbol en frente del frontispicio del lugar.
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"Bien, hora de la verdad". Me digo a mí misma con un nudo en la garganta.
Entro al edificio, en la planta baja, a la izquierda hay un guardia de seguridad, es robusto, de estatura media, cabello cano, aproximadamente de 40 años de edad, viste un uniforme azul claro con pantalones oscuros y un gorro de oficial, detrás de una especie de mostrador el cuál tiene una computadora, un teléfono fijo y varios papeles encima.
-¿Buscaba a alguien, señorita?- Me cuestiona el guardia al verme sospechosamente mirar hacia todas direcciones del lugar.
-Ahh... sí, busco a Gina Fenders.-
El hombre toma el teléfono y marca un número.
-¿Señorita Fenders?... Le busca una persona, dice que se llama...- Él voltea a verme y levanta una ceja-
-Alexa Hutton, quiero programar una entrevista con ella.-
-Alexa Hutton, dice que quiere programar una entrevista con usted... ... ... ... ... Excelente, ahorita le indico el camino.-
El guardia que por lo que veo en su gaffette se apellida Brinley cuelga el teléfono pero no deja de mirarme con desconfianza.
-Bien señorita Hutton, el departamento de la Señorita Fenders es el A104, está del lado izquierdo del edificio, puede subir por este elevador, está en el sexto piso.-
-¡Gracias!-
Camino por el lugar hacia el elevador y observo con detenimiento todo. Recuerdo que cuando era niña y cruzábamos por la calle de este edificio mis padres decían que aquí vivió el ex presidente Ronald Reagan cuando vino a vivir a Hollywood, en sus primeros años de actor.
Mientras subo los pisos del edificio varias personas suben y bajan del elevador, aproximadamente en el piso 3 nadie vuelve a subir.
No puedo dejar de pensar, ¿qué le diré a Gina Fenders cuando la vea? Sé que accedió porque le dije que quería que me entrevistara pero, ¿dejaré que lo haga?
Estoy enojada conmigo misma, en una situación como esta debo sentir mucha seguridad, este es un asunto personal, digo, no filtraron cualquier foto mía, es una foto de mi pequeña hija de tres meses de nacida y lo que lo hace peor es que fue sin mi consentimiento. Sólo quiero advertirle que si no retira la foto de internet, aunque en este punto no sirve de nada porque se ha salido de sus manos ya que estoy segura que circula en todas las redes sociales habidas y por haber, la demandaré, e igual a Colin Lester por haberle dado la foto sin el permiso de Alex y el mío.