➡Tercera parte de "Whatever People Say I Am, That's What I'm Not"⬅
En el último año y medio han pasado infinidad de cosas que el frotman de los Arctic Monkeys y Alexandra Hutton, su novia, jamás imaginaron; en especial el radical cambio que sus vi...
-Mardy Bum...- Menciona la voz del frontman de Arctic Monkeys mientras me sacude ligeramente.
Estoy despertando en la habitación de Alex, en casa de sus padres en Sheffield. El día ha sido muy largo, después de apartar la fecha de la boda en la iglesia fuimos a almorzar a un restaurante cercano, de ahí llegamos a la casa de los Turner, desempacamos, tomamos una ducha, conversamos con los padres de Al, cenamos y se supone que yo simplemente descansaría un poco los ojos antes de llamar a casa para saber de ¡Arabella!
-Tenemos que llamar a Arabella.- Digo bostezando, me siento en la cama y estiro mis brazos.
-¡Aquí esta! ¡Arabella, dile "hola" a mami!- Exclama Turner, sosteniendo su teléfono celular frente a mí.
Lo miro y veo a mi madre sosteniendo a nuestra preciosa hija en la pantalla, en videollamada. ¡No me cansaré de decir lo hermosa que es! ¡Se ve tan tierna usando el gorrito rosa con orejitas que Andrea le regaló!
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-¡Hola preciosa! ¿Cómo estás?-
El semblante de la pequeña cambia rápidamente, abre los ojos como platos, estira su brazo derecho, como intentando alcanzarme, empieza a desesperarse y llora.
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-¡Noo, no hermosa!...- Me volteo a Al. -¡Voy a llorar también, la extraño!-
-¡Tranquila, cariño!- Responde Turner para luego abrazarme.
Mi madre calma a Arabella quien deja de llorar casi de inmediato.
-¡Tranquila, ella está bien, sólo te extraña!- Añade mi madre mientras arrulla a la bebé. Ha dejado el teléfono asentado en lo que parece ser la mesita de centro de la sala.
-¡La extraño tanto! ¡Mañana cumple 5 meses! Es la primera vez en todos los meses que ha cumplido en la que no estaré con ella.-
Y es cierto. Cada vez que cumple un mes hacemos una pequeña celebración, le tomamos una foto, hacemos una cena especial, quizá pueda parecer ridículo pero es algo muy significativo para Alex y para mí.
Mi madre ríe, recuesta a Arabella en el sillón y toma el teléfono.
-Aly, no te preocupes. Mañana a primera hora te enviaré su foto y te prometo que tendremos un día especial, ¿verdad Arabella?-
