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P.O.V ALEC:

Mientras Magnus y yo regresamos a la limusina, reflexiono sobre lo que me ha dicho Maya. No entiendo porque se ha enfadado de esa forma, tan de repente. Si yo decido confiar en Magnus, ella no puede hacer nada para impedírmelo. Lo de Michael pasó hace mucho tiempo y se comportó de forma muy distinta a Magnus. Así que creo que no debería preocuparme, o eso creo.

- ¿Estás bien? - pregunta Magnus mirándome preocupado- No has hablado desde que hemos salido, y tienes el ceño fruncido adorablemente. 

- Solo estaba pensando en lo que me ha dicho Maya- contesto inmediatamente, no tengo razones para mentirle- Y no soy adorable.

Magnus, abriendo la puerta de la limusina, sonríe hacia mi.

- Claro que lo eres. ¡Y mira ese sonrojo! Un omega completamente  adorable. 

Sonrío tímidamente hacia el mientras me siento en la limusina. Veo como Magnus se sienta a mi lado y me abrocha el cinturón a la vez que me da un suave beso en la frente. 

- ¿A donde vamos Magnus? 

- A trabajar. Cuando lleguemos te darán el uniforme y te ayudarán en todo lo que necesites para sentirme cómodo.

- P-pero, ¿no empezaba mañana? -estoy desconcertado, el dijo que empezaría mañana, no hoy. 

- En un principio si, pero cuando estabas hablando con Maya, me ha llegado un correo urgente de Ragnor, diciendo que debería ir inmediatamente a las oficinas -explica mientras saca una botella de agua de una pequeña nevera situada delante de él- Y como no quería dejarte solo en el loft, he pensado que podrías acompañarme y empezar a trabajar hoy.

Después de unos veinte minutos la limusina para delante de un edificio moderno. Es muy alto, de color blanco y lleno de ventanas, en algunas de las cuales se puede ver a gente trabajar en escritorios. En la azotea se ven unas grandes letras rojas que dicen B&R EDITORIAL. Es espectacular. 

Magnus baja primero de la limusina y me abre la puerta con una sonrisa. Bajo del vehículo, y los dos entramos al edificio. Por dentro es aún más increíble. Puedo ver que todo está perfectamente ordenado y limpio, no hay ningún papel en el suelo y la poca gente que hay está sentada esperando su turno para entrar a una sala.

- Esa sala es donde se hacen las entrevistas de trabajo. Si consideran a alguien bueno para el puesto, me lo mandan a mi o a Ragnor y nosotros decidimos si lo contratamos -explica Magnus, al ver que miró la sala curioso- Tranquilo, tu no tendrás que pasar por el proceso. 

- Una pregunta, ¿qué tipo de empresa es esta?

- Somos una editorial, ¿acaso el nombre de la empresa no lo deja claro? -contesta Magnus riendo- Revisamos y publicamos libros.  

- ¿Editorial? ¿Porqué el dueño de una editorial tendría tantos edificios?

- Me sorprendes Alexander. Aunque hayas vivido la mayoría de tu vida en la calle, no eres nada tonto y sabes de lo que hablas -dice visiblemente sorprendido. Sonrío tímidamente- Tengo tantos edificios porque soy un inversionista. 

- ¿Inversionista?

- Si. Básicamente compré todos esos edificios para obtener más ganancias -explica mientras nos dirigimos al ascensor.

- Vaya, eso es inteligente. 

- Gracias, Alexander. 

Magnus pulsa dos botones en el ascensor. Las plantas 6 y 23.

- Siempre que estemos trabajando puedes venir a mi oficina, sea el momento que sea, da igual la razón para la que vengas. Tu solo pregunta dónde está y te dejarán entrar. Hoy conocerás a tu jefe. El es el encargado de supervisar y ayudar a los nuevos empleados en sus primeros días. También es el jefe de todos los empleados más jóvenes. Cuando lo veas tu solo di que eres Alexander y el sabrá que hacer. 

- ¿C-como sabré quien es?

- Tiene los ojos y el cabello castaños, a parte de ser bajito. Pero la clave final para reconocerlo es que lo verás con cara de mala leche- dice riendo- A no ser que este con Ragnor

- ¿Con Ragnor?- preguntó demasiado confundido

- Exacto, después de todo tu jefe es su omega.

En ese preciso momento el ascensor se detiene, las puertas se abren y agnus me empuja hacia afuera del ascensor.

- Pero Magnus, ¿¡cómo se llama?! - Magnus solo mueve la mano en señal de despedida mientras las puertas del ascensor se cierran.

Perfecto, ahora estoy en un edificio desconocido, lleno de gente desconocida y tengo que ir a buscar a un tío que ni se como se llama. 

Observó donde estoy, todo son pequeños cubículos con gente trabajando en ordenadores. Parece que nadie se percata de mi presencia. Al fondo de la gran sala hay una puerta donde pone escrito mantenimiento. Me dirijo hacía allí con paso rápido. Abro la puerta de golpe y con nerviosismo. Pero a medio abrir, la puerta da contra algo.

- ¡Joder! ¿Puedes tener cuidado? -grita enfadado un chico, no mucho mayor que yo, pero bajito- ¿Y tu quien cojones eres? 

Cumple con las características que me ha descrito Magnus, debe ser él.

- H-hola soy mm... Alexander, supongo que Magnus a avisado sobre mi.

- Ah, si, el nuevo. Seré tu jefe de ahora en adelante, supongo. Soy Raphael. 

El amor no tiene escape (malec omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora