Dentro... ¡Fuera!//Mo Dao Zu Shi

El comienzo de algo...

No iba a negar que tenía miedo, miedo a que los días llenos de felicidad se terminaran. Realmente ya no estaba muy segura de querer volver a su mundo, ya había hecho una vida aquí, tenía a un niño de quien cuidar ahora, una secta que proteger y... Una vida eterna por delante. Le mataba de ternura como es que Xue Yang creció tan rápido, no faltaba mucho para su cumpleaños numero once y ya se había convertido en un niño muy justo, obediente pero algunas veces muy travieso, le encantaba pasar tiempo con alguien que no tendría malas intenciones contra ti, que te ama incondicionalmente como una hermana. El niño había comenzado a practicar la cultivación, pues según él, ahora le tocaba salvar a su Shijie.

Wen Yuan con siete años ya era un niño demasiado responsable, sus travesuras aún no habían cesado pero poco a poco comenzaba a parecerse a Lan WangJi por influencia, el mayor trataba de educarlo para que no fuera tan desastroso como Wei Ying, el chiquillo tenía un buen futuro como cultivador o al menos eso fue lo que dijo Lan Qiren al conocerlo, pues Wen Yuan fue llevado por un par de meses a Descanso en las Nubes por petición del Segundo Jade, ahí conoció a Lan JingYi, su mejor amigo de ahora en adelante.

Lan Qiren habló con Zhang Min por un tiempo, sus años de experiencia en el clan no fueron suficientes para darse cuenta de que la familia era algo todavía más importante que su posición social y eso se lo dejó muy bien en claro la menor. Que su sobrino amara a alguien ya era algo por lo que debía alegrarse, por la felicidad de él es que dio su palabra de no entrometerse en sus decisiones, después de todo ya no era un infante. Para convencerlo de la mejor manera, entre menos le importara cada acto que hacían sus sobrinos, menos desviaciones de Qi tendría... Con eso ultimo le encontró grandes ventajas a la idea.

Pensando un poco... incluso ella temía por el gran poder e influencia que tenían sus palabras.

Jin Ling estaba a nada de cumplir los tres años de edad, pese a su cortita edad ya tenía algo de carácter, sacado de su padre y tío Jiang, era innegable lo inseparables que eran Jin Ling y Jiang Cheng, se hacían enojar uno al otro, se divertían nadando en los lagos de Yummeng y juntos eran regañados por YanLi por sus imprudencias. Zhang Min se prometió que ese niño jamás volvería a estar solo.

Pese a tantos años de comodidad y sin presencia de rencores, gran parte de las sectas seguía pensando en la ejecución de los Wen restantes por lo que hicieron en un pasado, incluso con más de tres años transcurridos ellos seguían sin poder salir de los túmulos, aunque, a ellos no les molestaba del todo, gran parte de ellos eran ancianos y personas no muy sociables, pero se preocupaban por Wen Yuan quien necesitaría conocer y desarrollarse socialmente, Wei Wuxian no lo veía muy necesario porque para eso lo llevaba a Gusu para que jugara con su mejor amigo Jingyi y lo llevaba al Muelle del Loto para convivir con Xue Yang y los otros niños.

Aunque desearía que conociera a Jin Ling, ese bebé crecería muy solo.

En cuanto a Wei Wuxian él se casaría después del cumpleaños de Jin Ling, ya no le preocupaba practicar el cultivo demoniaco y dañar a las personas que amaba por falta de control, pues hace apenas unos dos minutos comenzó a sentir un núcleo en su interior. Lo examinó por casi media hora y tal parece que el núcleo no tolera el cultivo demoniaco porque es parte de él. Xian podría jurar que no era obra de Wen Qing, siendo ella la única persona que conoce que sería capaz de crear otro, aunque era en exceso imposible porque casi nunca se acerca a él por disfrutar a su mejorado hermano. Comenzaba a pensar era una especie de milagro por todos los sacrificios que hizo, pues se le fue otorgado una pareja de por vida, un precioso sobrino, un hijo (tal vez) y un nuevo núcleo.

- ¡Wen Qing!- Llamó desde su cueva sin dignarse a ir a buscarla, volvió a gritar recibiendo un golpe con el rábano más grande que ella encontró en los huertos- ¡Wen Qing! ¡Volvió a aparecer otro núcleo!