Volver a morir

448 77 39
                                    

Dicho anteriormente, pasan cinco años, de los cuales ha funcionado uno de los tantos intentos de cura contra el virus que ha atacado a la humanidad por casi dos años, no hay cuarentena pero sí una vacuna cada año, todo vuelve a la "Normalidad".

Con ayuda de su padre, movió sus cosas a su nuevo hogar "gigantesco para una sola persona" según la perspectiva del hombre, lo que no sabia es que utilizaría cada habitación para algo distinto. Después de un profundo aseo, instalaciones de luz, agua y gas a la casa, se dispuso a ordenar lo poco que trajo consigo, pues solo pudo decorar una habitación. A las ocho de la noche ya estaba duchada y sentada frente a su computadora, cuando repentinamente llega un mensaje.

_ ¿Te has curado ya?

Un usuario desconocido, confundida decide responder, no era la primera vez que intentaban extorsionarla.

_ ¿Quién eres?

_ Tu ya me conoces, solo que, en una línea del tiempo distinta.

_ No tengo tiempo para ti.

Decide ignorar el mensaje y contarle a Cheryl, obviamente no se iba a quedar callada con todas las aventuras y desgracias que vivió en aquel mundo, por un año no le creyeron hasta que les hizo una demostración con espada y la resistencia de su cuerpo. Todas seguían juntas afortunadamente e informadas de los sucesos extraños de la transmigración.

_ Zhang Min.

Llega otro mensaje y del mismo usuario.

- ¿Cómo sabes ese nombre?

- Mañana nos vemos a las siete de la mañana, tocaré el timbre de tu casa.

Trata de mandar mensajes y buscar el número pero le es imposible saber de dónde es. Termina los pendientes que tiene en la computadora y se va a dormir pasando las once de la noche. Mañana no estudia y tampoco trabaja por lo que tiene el resto de día libre. A la perspectiva de ____ pasan dos horas de sueño cuando el timbre de la casa suena, la luz del sol está llenando la casa y el reloj marcando las siete de la mañana.

"¿Será un acosador?" Piensa recordando los mensajes de la noche anterior, pero confía en sus tres años estudiados en MMA y Kung Fu. Había demasiado tiempo libre para aprender tanto.

Baja las escaleras de la casa y abre la puerta con lentitud, sorprendida de quien está al otro lado de la puerta.

- ¡Usted!- Incapaz de creer que aún lo pueda recordar, lo apunta- ¡Usted es el tipo que me tiró la maldición!

El hombre de la biblioteca, predicando que las almas nunca se iban y siempre regresaban, el mismo hombre que le advirtió que alguien se la llevaría, al hombre al que le dio el permiso de llevársela por creer que solo era un loco y un juego de palabras.

"Que me lleve" Esas fueron sus palabras para dar el sí.

- Bueno, tampoco soy quien crees- Se adentró en la casa quitándose de encima las capas de tela podrida y mugrienta- ¿Hay agua para lavar mi cara?- Tan sorprendida estaba que no puso atención a la voz, muy conocida.

- Ultima puerta a la izquierda.

Una vez que se lavó y volvió a la sala, _____ no supo que decir o hacer, apenas había despertado y ya le estaban llegando tantas sorpresas. Suspiró tallando su cara con ambas manos.

- ¿Qué carajo haces tu aquí?- Hizo una pausa entre cada palabra para remarcar su frustración.

- No soy el Wei Wuxian que conoces, soy el de la historia original- La mujer pidió una explicación con lujo de detalle. Ambos, ahora sentados uno frente a otro en la única habitación remodelada, comenzaron a hablar.

Dentro... ¡Fuera!//Mo Dao Zu ShiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora