Bueno, tal vez barrer todo el día no era tan malo, lo malo aqui es que la mayoria de los terrenos de Yummeng eran de tierra ¡¿Qué se supone que debía barrer?! Si donde quiera que pisaba habia tierra. Estaba segura que la mujer que le otorgó tal tarea solo quería deshacerse de ella y no la culpaba, estar a cargo de la cocina no era cualquier cosa, al menos eso creía porque nunca pudo cocinar de manera decente.
La cocina la odiaba.
Y odiaba más la ropa que tenía encima, Yummeng es un lugar soleado y humedo por el lago, si le sumas las casi quince capas (exagerando) de tunicas sobre túnicas y para colmo botas, era como para que te diera algo peor que un golpe de calor. Algo cansada tomó el liston que le dieron como parte de la vestimenta y ató su cabello en una coleta alta, dejando que su cuello se refresque un poco.
Continuó barriendo las escaleras de la entrada, esparciendo el polvo y la arena, barrer ahí era bastante inútil, pronto llegaría un poco de viento y llenaría la entrada y las escaleras.
- ¡Oye tu!- El reclamo de una mujer frente a ella la sorprendió- No recuerdo que fueras una de mis trabajadoras ¿Quién te contrató?
- Jiang Fengmian- Respondió firme, si no mal recuerda ella era Madame Yu, de la que le advirtió Wei Wuxian el dia anterior, no le gustaba la gente debil e inútil, por ende no debía mostrarse como tal.
- Ese tipo creyéndose héroe- Susurró, indiscretamente- En el clan Jiang no se permiten débiles e inútiles- Ya lo tenía claro...- Aquí todos saben defenderse y pelear, no contratamos solo porque sepan barrer.
- Madame Yu, no lo sabe usted porque nunca lo mencioné, sé defenderme, probablemente no con una espada pero se safarme de mi oponente
Nadie iba a hacer tonta a Madame Yu, así que sin demorar más, la llevó al campo de entrenamiento. En cuanto a "Zhang Min"... Estaba perdida, por no saber controlar el miedo y su boca terminó en otro lío.
- Guarden sus espadas, dijo que no sabía pelear con una- Ordenó la mayor- Aún eres menor de edad y eres mujer, así que para una pelea justa, derribalos de uno en uno
Eran por lo menos quince tipos, se hará de noche para cuando termine.
Se acercó el primer oponente caminando amenazante mientras el corazón de la chica latía a mil, el contrario comenzó a correr extendiendo sus brazos y ahí fué cuando entró en cuenta de que siempre vivió en un país peligroso (cualquiera lo es) donde el patriarcado reina, por ende la gran mayoria de mujeres viven con miedo y deben aprender a defenderse sí o sí. Siendo una persona miedosa pero inteligente, aprendió a safarse y escapar de cualquier tipo que le hiciera daño, pero no sabía como mantenerse peleando.
Cuando el oponente estaba lo suficientemente cerca, agachó su cabeza girando su cuerpo hacía el lado contrario, tomó uno de los brazos del hombre y con su propio peso logró lanzarlo lejos, antes de que pudiera reincorporarse se sentó en su espalda tomando su brazo para finalmente retorcerlo, todo fue lo suficientemente rápido para confundirlo y darle el K.O.
- ¡Noquealo!- Gritó la mujer, solo sabía huir pero dejar a alguien inconciente... Era moralmente malo para ella, pero quería regresar a su hogar.
No tenía mucha fuerza en sus brazos, no la suficiente para un golpe notorio en su rostro pero un golpe en el lugar correcto sería suficiente. Volteó al hombre para tenerlo cara a cara, sin darle oportunidad de volver a atacar o protestar, dio con puño cerrado un golpe en la nariz.
Dirigió su mirada a la superior y seguía con la misma expresión, ordenó a más a seguir atacando.
Pasó la tarde dando pellizcos y leves golpes en lugares importantes, era obvio que también saldría lastimada, varias patadas en las piernas y apretones en sus brazos, tal vez uno que otro golpe en la espalda.
El cinturón de su padre y la sandalia de su madre, sumando los raspones por las banquetas levantadas de la calle la tenían muy bien entrenada en el aspecto del dolor.
Hasta que uno se atrevió a usar espada. ¿Con él no eran 16?
Bendita sea la vez que su madre falsificó su propia acta de nacimiento para que la admitieran en una carnicería y le permitieran trabajar ahí, aprendió a usar sables y cuchillos, por ende, también pelear con ellos... Y todo esto cuando tenía 16 años (ahora entendía porque la llamaba inútil)
- Observa _____, algún dia, dios no lo quiera, estarás en peligro y el gobierno ni la policía podrá defenderte más que tu misma- Tomó un palo corto de madera simulando ser un arma y se lo entregó a la chica- Intenta atacarme- No estaba segura si debía hacerlo, anteriormente le había hecho una llave para "enseñarle" cual era el truco y ahora cree que su brazo derecho esta deslocado, pero le iría peor si no lo hacía.
La espada solo rozó las túnicas sin alcanzar a cortar piel, con el corazón en la mano y con temblor en su cuerpo se acercó a su atacante, doblando su muñeca para sacarle la espada y con la otra mano golpeando su nariz, cuando la espada del contrario estuvo en sus manos... No supo que hacer, era una trampa. Una patada en su mano y un sofocante golpe en el estómago fué su fin en el ring.
"- Al menos aguante quince, es la primera vez en mi corta vida peleando" pensó.
- Cuando dijiste que no sabías usar la espada no creí que fueras tan inútil con ella, bueno, al menos podrás proteger a los niños- Aún en el suelo siguió escuchando a la lider del clan- Sabes algo más que barrer.
¿Eso fue un "puedes quedarte"? Comprendía el idioma de la falta de expresión en las palabras porque ella lo usaba.
Dos conocidos rostros aparecieron en su campo de visión, sonrientes y orgullosos.
- ¡Pasaste las quince de Jiang!
- ¿Las quince de quién?
- Wei Ying, aún está en el suelo.
Ayudando a levantarla, la llevaron hasta el comedor, sacudió un poco su cabello y ropa para quitarse la tierra de encima, Jiang Cheng le ofreció un pañuelo para limpiar la sangre de su boca y nariz, fue la madriza de su vida.
- Nunca había peleado antes de esa forma- Comentó, doblando el pañuelo.
- Si no mal recuerdo, dijiste que no recordabas nada- Xian, siempre un detective.
- Dije eso porque Jiang Fengmian me lo preguntó, el es alguien mayor y puede hacer muchas cosas, no quiero que busque de donde soy porque si lo recuerdo- No era muy fácil para ella mentir, nunca fué necesario hacerlo.
- ¿Escapaste?
- No sabría explicarlo de manera exacta, pero no me gusta donde vivo, tanto mujeres como hombres vivimos con miedo y debes saber defenderte- Podría usar eso como excusa, además... No era del todo mentira- No quiero hablar ahora de eso, mejor, quiero que me expliquen algo.
Intercambiaron miradas y asintieron.
- ¿Qué es un nucleo de oro?
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Dentro... ¡Fuera!//Mo Dao Zu Shi
FanfictionTanto las teorias conspirativas de la creacion del universo hasta la posiblidad de la existencia de mundos paralelos y universos distintos a los nuestros resulta ser, aún con millones de años de vida , evolución y conocimientos, algo muy misterioso...