El comienzo de los cazadores de sombras / Klaus Mikaelson. (1)

Capitulo 6.

Reino de noruega 972 D.c.

Al llegar al valle donde Mikael estaba sentado en el pasto Farya se acerco a el en silencio y se sentó junto con el en el pasto mirando así el frente en silencio.

-No te necesito aquí Farya.- Le dijo Mikael a Farya.

-Se que no te interesa lo que te diga, pero me interesa lo que tu quieras decirme a mi.- Le dijo Farya a Mikael.

-No hay nada que quiera decirte.- Le dijo Mikael a Farya.

-Mikael tal vez no le quieras mostrar a nadie que tienes sentimientos, pero soy yo y se que dentro de ese orgullo también hay otros sentimientos.- Le dijo Farya a Mikael.

-Yo quiero que sea un varón, quiero tener un guerrero, no una niña débil.- Le dijo Mikael a Farya.

Farya volteo a verlo a los ojos y se notaba mucho en los ojos de su amigo la decepción de no tener un hijo varón que le haga sentir orgulloso.

-Podrás tener más hijos y más de uno saldrá varón solo ten paciencia, además yo seré la madrina de alguno de alguno de ellos y también la tía y los voy a malcriar y no podrás decirme nada.- Le dijo Farya a Mikael con una sonrisa.

-De eso no tengo la menor duda.- Le dijo Mikael con un fantasma de una sonrisa.

TIEMPO DESPUES.

Farya estaba en el jardín cerca de la cabaña de su padre, mientras recogia hierbas para algunos hechizos.

Cuando escucho que alguien corría hacia ella, ella saco su espada y le apunto en el cuello a quien se estaba acercando.

Mikael estaba parado detrás de ella con la espada en su cuello y un pequeño hilito de sangre caía de la herida.

Cuando Farya se dio cuenta de quien era, se alejo de el.

-Mikael, en que pensabas cuando te has parecido así, pude matarte.- Le dijo Farya frunciendo el ceño.

-Puedes matarme luego ahora ven.- Le dijo Mikael aunque no le dio tiempo de preguntar a Farya a donde iban ya que le agarro la mano y la arrastro a su cabaña.

Cuando Farya entro se dio cuenta por que de la prisa de su amigo.

Esther estaba pariendo.

Farya le dijo a Mikael que la llevara al cuarto mientras ella recolectaba lo que necesitaría para traer al bebe al mundo.

Cuando Farya tenia todo listo y ya Esther estaba acostada en la cama, Mikael estaba al lado de Esther mientras que esta le apretaba la mano con cada contracción, mientras que Farya le decía a Esther lo que tenía que hacer.

Despues de un tiempo y de los gritos de Esther de dolor y de Farya instruyéndola, el bebe empezó a asomarse, hasta que después de varios empujones de parte de Esther, se escucho un llanto en toda la habitación.

Farya le corto el cordón y limpio un poco al bebe antes de envolverlo en una tela limpia y entregárselo a Esther.

Cuando la recibió en sus brazos, Esther lloraba de felicidad, mientras que Mikael tenia una sonrisa en su rostro.

Farya estaba terminando de atender a Esther, al terminar se acerco a la pareja y le pidió a Esther que se la entregara por un momento.

Cuando Esther se la entrego, Farya la tomo y la acerco a ella para luego colorar sus la labios en su cabeza, le beso la frente y empezó a recitar un pequeño hechizo, cuando termino miro a la pareja con una sonrisa y les dijo.

-La niña esta completamente sana, sin ningún problema, Felicidades.- Le dijo Farya ofreciéndole la bebe a Mikael para que la tomara.

Mikael no sabía que hacer así que miro a Farya por ayuda cuando esta lo miro sonrió y le dijo lo que tenia que hacer.

Cuando Mikael la tomo y la miro, una sonrisa genuina se mostro en su rostro mientras la miraba.

Farya recogió las cosas y las dejo donde no molestaran y se deshizo de las cosas sucias.

Cuando termino le dio una bebida de hierbas a Esther para disminuir el dolor, cuando Esther acabo, Mikael aún seguía con su pequeña hija en brazos, hasta que levanto la vista y miro a Farya.

-Quiero que tu le coloques el nombre a mi hija.- Le dijo Mikael a Farya.

Farya lo miro sorprendida para luego sonreír y asentir con la cabeza.

-Muy bien dámela.- Le dijo Farya.

Cuando Mikael se la entrego y Farya la recibió, Farya la miro un momento hasta que se decidió por un nombre.

-Su nombre será Freya, deseo que los dioses te deparen un futur tan hermoso como tu belleza pequeña Freya.- Le dijo Farya con una sonrisa.

Farya se la entrego nuevamente a Mikael, el cual miro a la niña y sonrió.

-Freya es un hermoso nombre.- Dijo Mikael mirando a la bebe.

-Si, lo es.- Dijo Esther.

-Bueno, si no me necesitan más me retiro.- Dijo Farya dirigiéndose a la puerta, pero antes de salir la voz de Mikael la detuvo.

-Farya, Gracias.- Le dijo Mikael.

-No hay por que.- Le dijo Farya para luego retirarse al llegar a la cabaña de su padre, su padre estaba preocupado por ella pero al ver que llego bien le pregunto que donde estaba.

Farya le conto las buenas noticias y luego seretiro para cambiarse y seguir con sus actividades.