-Suecia-
- Time to sleep - Estados Unidos acomodó a Azteca en el sofá, poniéndola una cobijita y su peluche a lado - Para que tengas muchas energías para mañana.
- Estoy muerta por dentro - Azteca gruño.
- I love your spirit - aplaudió, tomándome del hombro para salir del cuarto - ¡Buenas noches!.
Cerramos con seguro el laboratorio, mirando a todos dormidos en la sala, excepto Dina.
- Oye Dinamarca ven aquí - me acerqué a ella enojada.
- No me reclames por lo de ser vikinga - se sirvió cafe.
- Por supuesto que lo haré - intente hacer contacto visual con ella pero me evitaba a toda costa - ¡MIRAME DINAMARCA TE ESTOY HABLANDO!.
Por fin me vio, aporreando la taza contra la mesa fastidiada
- ¿Que demonios quieres?.
- No me importa todo lo de ser vikinga, pero los vikingos se mantienen juntos, somos un equipo Dina - puse mis manos en mi cadera - Siempre están unidos Y MÁS LA FAMILIA, no puedes irte por tu lado sin decirnos.
- No quería involucrarlos en esto - susurro para no despertar a los demás.
- ¿Que hubiera pasado si te lastimabas, o peor aun, morías?, nosotros nunca nos hubiéramos enterado.
- Entonces ese es mi problema - se giró para irse.
- Deja de alejarte de nosotros Dina - la detuve - Te queremos, eres nuestra hermana mayor, ¿por que estás actuando así?.
- Por que perdí mucho tiempo intentando ser la mujer perfecta - se quito enojada - Tu igual lo estas perdiendo.
- ¿De que hablas?.
- Hablo de todo lo que Noruega nos hizo dejar atrás para ser más agradables a la sociedad, para ser "perfectas" - se jalo del cabello - Estoy harta de actuar, no quiero ser así para toda la vida.
Se giró hacia las escaleras
- Tu en algún punto te vas a cansar igual, y entenderás como me siento.
Subió las escaleras hacia el laboratorio.
Suspire, apoyándome de la mesa de la cocina.
Me sentía mareada, demasiada información por un día.- You okay? - Estados Unidos se acercó - Que pelea la que tuvieron eh.
- Si ya se - me masajee la sien para relajarme.
Estados Unidos colocó enfrente mío una taza de cristal, con chocolate caliente, crema batida, unos mini bombones , chocolate rayado y un popote de galleta encima.
- ¿Cuando hiciste esto? - mire el chocolate caliente sonriendo.
- Mientras se peleaban me tome el tiempo para hacerlo - me sonrió quitándose los lentes - Te la preparé, tómatela.
- Parece que me quieres engordar - me apoye de la mesa, tomándole de a sorbitos a la bebida, no estaba tan dulce como me lo esperaba, era simplemente perfecta.
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Si nos volvemos a encontrar
FantasyDespués de su exilio a un pequeño pueblo en Islandia, México tendrá que aprender a controlar sus impulsos violentos para poder regresar a su país y entender sus sentimientos hacia Rusia, que constantemente está ahí para ayudarlo. Mientras tanto, un...