-México-
2000- Vamos chicos ya estamos cerca - los llame, adentrándome en la selva.
- Señor México, Ya no puedo más - Biel se quejó - Me duelen los pies.
- Yo te cargo - Ucrania de acercó a su hermana, cargándola y caminando - Casi ni pesas.
- ¿Estás seguro que es aquí Señor? - Georgia pregunto temerosa.
- Conozco este lugar como la palma de mi mano - con un machete corte las plantas - Ya estamos cerquita, se siente más fresco el ambiente.
- ¿Fresco de donde? - Kazajistán miró alrededor - Creó que estas alucinando.
- Ya aquí es - anuncié levantando los brazos.
Por fin habíamos llegado al dichoso cenote al que les prometí ir. Estaba súper cristalino, hasta el suelo podía ver.
Me quite la camiseta, girándome a ver a los chicos que ya estaban listos con sus trajes de baño.
- ¿Quien se avienta primero? - apunte al cenote.
Los niños se acercaron a ver, apartándose temerosos
- Esta demasiado alto - Biel me miro - Imposible que tú te puedas tirar.
- Si tú te tiras, yo igual - Georgia se acercó a mi - Al mismo tiempo.
- ¡Bien! - tome la mano de Georgia - Vamos chicos sin miedo, no se van a morir.
- Yo me quedare leyendo - Ucrania se apartó sacando un libro de su mochila - Diviértanse sin mi.
Tome la mano de Georgia y la aventé, cayó en picada y cuando salió me la mentó toda. Reí como un loquito hasta que Kazajistán me empujó, aventándose igual.
- Oye se supone que yo los aventaría a todos - me queje.
- No podía evitarlo - Kazajistán sonrió.
Mire a la boca del cenote, viendo a Biel asomándose
- Vamos Biel tírate - grite.
- No puedo México está muy alto - me gritó de regreso mientras escalaba la cuerda hacia ella.
- Vamos niña - me incline enfrente de ella - Tu puedes.
- No la verdad no puedo - se cruzó de brazos.
- Okay esta bien - me levante, alejándome hacia atrás para tirarme.
Tome impulso, corriendo hacia el cenote, tomando a Biel y cargándola, ambos nos tiramos, ella gritándome en el oído cubriéndose los ojos.
Cuando caímos la dejé ir, rápidamente nado hacia la superficie- ¡México que te sucede! - me gritó aventándome agua.
- Je je je - me reí - Pero pudiste hacerlo ¿si o no?.
- S-supongo que si - miro hacia arriba.
- Y no te moriste así que si puedes - le aventé agua.
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Si nos volvemos a encontrar
FantasyDespués de su exilio a un pequeño pueblo en Islandia, México tendrá que aprender a controlar sus impulsos violentos para poder regresar a su país y entender sus sentimientos hacia Rusia, que constantemente está ahí para ayudarlo. Mientras tanto, un...