Capítulo 38

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-México-

- ¿Ya te confirmo? - mire el teléfono de Rusia.

- Si pero que me va a costar mucho - bufó.

Le metí una mordida al taco de canasta mientras nos sentábamos en la banqueta, ya que no quedaban sillas donde sentarnos. A Rusia no le gusto la idea por que no le gusta la suciedad pero de todos modos lo hizo.

- Me caga - gruño viendo su teléfono.

- Bueno, por lo menos en Hawaii estaremos mejor - suspire viendo los letreros de las campañas políticas.

Sofi miró el taco confundida mientras lo saboreaba

- Sabe rico pero no se ve rico - susurro.

- Son tacos mija no se que te dio Rusia, caviar o cosas finas - le acerqué mi taco a la cara - Esto es comida de verdad.

- Me gusta más el pastel - me acercó su taco a mi cara.

- ¿Puta madre Rusia le diste pastel por dos meses? - lo mire mientras él miraba a otro lado ocultando su cara.

- Puede ser - le dio una mordida al taco.

- Con razón esta rellenita como peluche de feria - la mire - Bueno no tanto, los peluches de feria parecen como si los hubieran aplastado.

- Oye, yo fui gordo en mi infancia - me dio un golpe detrás de la cabeza - Y mírame ahora.

- Viejo sabroso - me mordí el labio.

- BASTA - se giró a otro lado rojo.

Ronronee seductor mientras el de apartaba sonrojado.

- Pinches jotos - nos gritó un pendejo pasando en bici.

- Ay a la verga - me levante pateando la rueda, haciendo que salga volando - Me cojo a tu vieja si quiero pinché naco.

Rusia se levantó con Sofi en una mano, tomándome a mi con la otra y jalándonos lejos

- No tengo ganas de lidiar con esto - gruño.

- Para la próxima te poncho la llanta y un huevo - le grite.

- Un huevo - Sofi repitió.

- Si mi amor diles - levante a Sofi - Has la señal especial.

Sofi levantó el dedo sacando la lengua juguetona

- Que se la pelas dice - Le grite al pendejo.

El vato se levantó enojado, aventándose para pegarme. Rusia le metió un derechazo en la cara botándolo al suelo desmayado.

- ¿Alguien más? - pregunte mirando a los que habían contemplado la escena atónitos - Creó que no.

- No pues que te van a decir con eso brazos que te cargas - camine mientras él me alcanzaba - Fácil lo matas de un golpe.

- Si he matado gente de un golpe - bufó.

- Bueno no sabía pero ahora se - mire a Sofi bajando su mano por que seguía haciendo la mala señal - Y no se que hacer con esa información.

- Nada, guárdala - me sonrió.

- Bueno solo falta una cosa - mire a Rusia - Ver a mi mamita linda bella hermosa.

- Entendido - se detuvo.

Levantó la mano haciendo un círculo con su puño cerrado, luego sopló una tonada que reconocía, sonaba como un chiflido grave o el sonido de una caracola.

Si nos volvemos a encontrar Donde viven las historias. Descúbrelo ahora