Esclavo por equivocación (vampiros)®

Escena escandalosa

Después del suceso donde casi pierde su vida, una persona común de seguro tendría miedo de perder su cuello, en cambio la reacción en Victor fue inesperada incluso para él también. Sentir aquella lengua caliente recorrer la piel de su cuello junto con el roce de los colmillos que podrán desangrarlo hizo la que sangre latiera con más fuerza.

-¿Qué crees que haces?- soltó con los dientes apretados tratando de mantener la compostura mientras casi estrujaba el papel en su mano.

Jinsu se separó lentamente sin importarle esconder su lengua y mucho menos dejar de mostrar sus colmillos.

-Acaso eres idiota- le soltó con una sonrisa felina ocultando la impresión que se llevó el mismo con sus propios movimientos provocados por sus instintos que respondían al desea natural hacia su esclavo, no sería tan estúpido de mostrarle eso a Victor- Lo que ves es lo que hay-

Y con un rápido movimiento se quitó las gafas grandes que le estorbaban, se levantó y se sentó en el regazo de su esclavo y le agarró ambas manos sobre el espaldar del sofá. Un gruñido salió de humano pero Jinsu solo entrecerró los ojos. Bueno, ya que había empezado por qué no seguir. No había recibido su dosis esa mañana y ponerle un cuello tan cerca…él no lo pidió pero tampoco lo iba a desaprovechar.

-Suéltame- le exigió Victor intentando inútilmente soltarse. Tanto el cuerpo como el agarre con el que estaba siendo sometido, era sumamente fuerte y lo inmovilizaba. Además, una sensación caliente comenzó a envolver su estómago, como si su cuerpo se sometiera al menor sobre él.

-¿Dándome órdenes?- Jinsu sonrió- Creo que seriamos la primera pareja de esclavo y amo donde el esclavo supuestamente manda a su amo- y que este fuera de paso su jefe- Además no te resistas. No creo haber sido yo el que dijo que necesitaba sangre dos veces al día y hubo alguien que se olvidó de ese pequeño detalle en la mañana- dijo mostrando sus colmillos.

Victor entrecerró los ojos.

-A diferencia de alguien soy un hombre de negocios muy ocupado donde su día empieza muy temprano- increíblemente su cuerpo se estaba relajando en vez de seguir luchando y él no lo podía creer. Acaso le estaba gustando aquello o era debido a que era un esclavo. Ni loco seguiría los pasos de su secretario.

-Hombre de negocios que se acuesta con un extraño, por eso estás en esta situación.

Jinsu alzó una ceja en tono burlón y notando que el cuerpo del humano no mostraba resistencia lo soltó para cruzar sus brazos sobre su pecho, aunque siguió sentado en su regazo con las piernas abiertas a cada lado de su cadera. El tipo tenía buenos muslos, tenía que reconocer. Los brazos de Victor se desplazaron y sus manos cayeron sobre las rodillas del menos. Jinsu pensó que lo iba a empujar para quitarlo de arriba, algo que no lograría, pero Victor simplemente se quedó mirándolo sin responderle su provocación.

-¿Qué? ¿Tengo algo raro en la cara?-

-No tengo sexo en mi oficina- soltó de buenas a primeras Victor con el rostro serio

-¿Eh?- Jinsu hizo una mueca fea- En que parte de la conversación mencionamos el sexo que no me entero-

Esta vez fue Victor el que alzó una ceja.

-Acaso olvidaste nuestro trato. Sangre a cambio de sexo-

El vampiro hizo una recapacitación mental de los últimos días y sí, hay estaba la conversación que en su aturdimiento por los sucesos pasados había dejado a un lado.

-Wou Wou Wou. Un momento, yo tampoco quiero sexo en tu oficina y menos en público. Tienes idea de cómo duele el culo después de tener sexo en un lugar cualquiera y sin las condiciones adecuadas. Me curo rápido pero no me gusta el dolor. Además tengo que pasar mucho tiempo sentado últimamente terminando tu puto proyecto como para someterme a esa tortura. ¿Qué clase de depravado sexual crees que soy?-