cap.10

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Lizz

―Voy a necesitar acceso a todas las cámaras de la casa ―comento entrando en el cuarto de seguridad, es un cuarto grande, con una pared llena de pantallas en las cuales se ven los espacios que cubren tanto las cámaras escondidas como las visibles.

―Pequeña ya tienes acceso a todo esto ―habla con un tono de coquetería dirigiéndose a la puerta ―Ah, y también tienes acceso a las cámaras.

Cierra la puerta, me quedo analizando sus palabras, ¿si no era a las cámaras entonces a que se refería con...? ¡Diablos! como no capte esa labia. Niego con una pequeña sonrisa ‹‹Céntrate Lizz››

―Ahora sí, tengo que trabajar ―me ordeno a mí misma sentándome frente a las múltiples pantallas.

...

Llevo horas, HORAS, sentada como una estúpida mirando la cámara norte y no veo nada. Le doy otra revisada a la grabación en la que llega Maximiliano, es imposible que haya sido el puesto a que lo sacaron de la casa inconsciente, eso sin contar con que llego solo, rastree toda su visita a California desde que llego, hasta ayer cuando se dio aviso de su regreso a Italia.

Un momento ¿Qué es eso? Una sombra extraña en la rama de uno de los árboles llama mi atención, hago zoom y efectivamente es una persona, se ve bastante borroso, nada que no se arregle con unos cuantos programadores.

Entro en las cámaras de la ciudad, más específicamente las que se encuentran en la calle fuera de la mansión. No se logra ver nada más que su espalda y una pequeña parte de su brazo el cual se encuentra completamente cubierto, es como si conociera la ubicación y rango de cada cámara en los alrededores.

Le tomo pantallazo a la imagen más nítida que encuentro de la sombra, pasándola a mi base de datos para comenzar a editarla. Esto es fácil, simplemente tengo que esperar que se procese y exporte, y listo tendré una imagen más clara en el video.

Eso tardara unas 10 horas así que tendré tiempo para revisar el poco audio que se grabó, las cámaras cuentan con audio más sin embargo este al parecer tiene fallas a causa de la ubicación de la cámara.

― ¿Cómo vas? ―Pregunta Tania entrando junto a Ángela ― ¿Alguna pista?

―Encontré una figura, parece ser una persona pero la imagen aún no se aclara ―suspiro mirando las pantallas ―Estaba a punto de escuchar el audio del video.

―Nos quedamos aquí en dado caso, a lo mejor te podemos ayudar en algo ―Ángela achina los ojos mirando las pantallas.

Asiento, tienen razón quizás puedan ayudar. Entro a los archivos de audio y le doy clic al que corresponde al video de la sombra.

Audio: respiración masculina agitada ―Ci vediamo all'inferno principessa (nos vemos en el infierno princesa) ―ríe despacio, se escucha como cargan un arma seguido del estallido que provoca un disparo.

―È tutta colpa di quel bastardo di tuo padre, se non si fosse immischiato, io e lei saremmo felici (todo esto es culpa del bastardo de tu padre si él no se hubiera metido ella y yo seriamos felices) ―pronuncia lentamente una voz ronca en italiano, se divisa el sonido de una botella siendo abierta.

―Ma non ti preoccupare che gli terrai compagnia bella (pero no te preocupes ya le vas a hacer compañía preciosa) ―vuelve a reír antes de que las ramas del árbol crujan con fuerza, probablemente se esté bajando del árbol.

―E questo lo lascio qui perché vi ricordiate di me (ah y esto lo dejo aquí para que me recuerdes)

Con esa última frase termina el audio.

Mi infiernoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora