- ¡Vamos, Nadya!Quedan 3 minutos para las 12.-camino con mi vaso de doce uvas hacia la hamaca del jardín.
Desde hace dos años, los chicos y yo celebramos la entrada del nuevo año en casa de Lucas, con la tradición española de las doce uvas. Es la manera que encontramos para que Lucas no pasara estas fechas completamente solo, sus padres pasan de celebraciones y siguen trabajando.
Me siento y observo a ambos lados, todos están alrededor de la piscina. Miran la pantalla del televisor, en él se refleja un reloj.
Empiezo a tomarme las uvas a la vez que oigo la voz de los chicos hacer una especie de cuenta atrás de la que no se entiende nada, puesto que tienen la boca llena de las pequeñas frutas.
- ¡Feliz año nuevo, cabrones!-oigo los gritos de Lucas hacia los chicos y no puedo evitar reírme.
Cierro los ojos y respiro. « Feliz año, ángeles de la guarda», pienso para mi misma.
Me encantaría pasar estas fechas con mis abuelos, pero dos de ellos viven en España, y, bueno, creo que lo otro se entiende.
No tenía mucha edad cuando murieron, y es por eso que los echo tanto de menos. No puede disfrutar de ellos como quisiera. Una pequeña lágrima resbala por mi mejilla, la limpio con mi pulgar y esbozo una sonrisa. « Os quiero, abuelos»
Respiro hondo y abro mis ojos, mirando al cielo. Escucho las voces de mis amigos celebrar y sonrío.
- Vamos, Nad. ¡Ven con nosotros!-me levanto de mi lugar y camino. Mi móvil vibra en mi mano y lo miro. « Zack», eso se lee en la pantalla, y sonrío como una tonta.
Intento cogerlo, pero se corta antes de que poder hacerlo. Intento volver a llamarlo, pero me envía al buzón. Suspiro y vuelvo a caminar hasta los chicos.
- Feliz año, Nad.-Lucas me abraza, le correspondo al abrazo con las mismas ganas. Este chico es como un hermano para mí, un poco pesado, pero menos que Brook.
- Feliz año, Lucas.- besa mi frente y se aleja para que pueda abrazar a los demás.
Abrazo con especial fuerza a Jules, sus padres la dejaron tirada en Navidad por su trabajo, y lo han vuelto a hacer esta noche. Además, Cameron... bueno... aún no sabemos nada de él.
- Feliz año, rubita.-sonríe triste.
- Feliz año, Nad.-besa mi mejilla y yo la estrecho en mis brazos un poco más.
Me siento en una de las sillas y cojo un vaso que Lucas me tiende. Nos enfrascamos en una conversación sin sentido, el alcohol va haciendo estragos en nuestros sistemas.
Después de unas horas, decido que es buena idea volver a casa. Brook me dice que se quedará en casa de Lucas, así que vuelvo sola en mi coche.
Durante todo el trayecto siento que alguien me sigue, me siento observada y hay una sensación de presión en mi pecho. Me concentro en la carretera, el semáforo se pone en rojo y freno el coche. Reposo la cabeza en el respaldo e intento tranquilizarme. Miro hacia un costado y sonrío al recordar la moto de Zack, cuando todavía era un chico misterioso para mí. Vuelvo la mirada al frente mientras noto la tensión salir por cada uno de mis poros. El color verde vuelve y arranco de nuevo.
Busco en la marcación rápida del coche el número de Zack y lo llamo, esperando que lo coja esta vez, pero no es así. Vuelve a mandarme al buzón. Bufo con frustración y vuelvo a concentrarme en la carretera.
Al aparcar el coche en casa siento la presión de nuevo. Es un nudo de emociones que me hace querer vomitar. Miro por la ventana, todas las luces de mi casa están apagadas. Mis padres fueron a casa de mi tía Tess, han decidido mudarse a la ciudad. Tienen una casa preciosa.
Bajo del coche y oigo otro motor rugir, una moto. Levanto la vista, esperanzada de que sea Zack. Pero mi cara pierde todo el color al ver como el conductor saca un arma y la detona en mi dirección.
Sabes ese momento de las películas, en las que ves como la bala se mueve a cámara lenta, eso es lo que yo vi. Siento como el tiempo se para. Un dolor agudo aparece en mi abdomen, siento como choco contra el suelo.
Mis ojos se vuelven pesados mientras escucho como el motor se acerca cada vez más, el conductor sube la visera de su casco y lo veo. Shawn.
- Feliz año, linda.
Mi pesadilla se hace real de algún modo. Su promesa de que yo sería la siguiente. Me guiña un ojo y ese simple gesto me hace estremecer. Vuelve a bajar la visera y arranca a toda velocidad , dejándome allí tirada.
Empiezo a sentir frío, mis ojos cada vez más pesados, amenazan con cerrarse pero lucho por que no sea así.
Como es posible que nadie haya oído el disparo. Hace como diez minutos que estoy aquí tirada, o quizás sea mi imaginación.
Otro motor ruge con más fuerza y frena justo a mi lado. Estoy demasiado cansada. Oigo una puerta abrirse y cerrarse con fuerza.
- ¡Nadya!-su voz. Está aquí-¡No, no , no! Vamos, bonita.-Lo miro por unos segundos, antes de que todo se vuelva negro.
Oigo su voz maldecir y gritar mi nombre unas cuantas veces más. Siento como me levantan del suelo.
« Te amo, Zack.» Es lo que me ha quedado por decirle. Antes me hubiera decepcionado si hubiera sido la única en sentirlo, pero ahora...Ahora lo único que deseo es poder decírselo.
Caigo en un descanso profundo. Estoy muy relajada, siento mi cuerpo calmado.
Ya no duele nada.
Estoy en completa paz.
Nota autora: Lo sé, he desaparecido muchos días, pero ahora que he acabado los examenes puedo estar al 100 %. Quedan aproximadamente 6 capítulos para el final de Hell :( , además de unos cuantos extras, aún no están escritos por lo que no tengo ni idea del número exacto de los que serán.
Cambio un poco de tema, ¿qué tal el capítulo? Cabe decir que no es uno de mis favoritos pero no está mal, quizás lo acabe editando, ¿quién sabe?
Teneís el siguiente capítulo en unas horas, nos leemos en el siguiente capítulo.
N:)
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Hell [DISASTERS#1]
Teen FictionAcostumbrada a vivir en el cielo, ¿estará preparada para bajar a los infiernos por él? Primer libro de la saga DISASTERS.