After the paradise - Rubius & tu -

Capítulo 77.

Subimos a la habitación y empezamos a acomodar nuestras maletas ya que mañana volvemos a España.

Al terminar de acomodar mis cosas y cambiarme me eché en la cama, Rubius me imitó.

- ____.

-¿Si?.

-¿Te quedarías despierta como ayer?.- Dijo tiernamente y yo le sonreí.

-Claro.- Me cubrí con las mantas, Rubius me imitó y apoyó su cabeza en el hueco entre mi cuello y mi hombro. Pasé mi brazo entre su cuello y empecé a acariciarlo como ayer, mientras él acariciaba mi estómago por encima de la camiseta haciendo círculos. Su mano cada vez se movía más despacio hasta que dejó de moverse. Besé su frente y cerré mis ojos para poder dormir.

Eran las nueve y Rubius no estaba, supuse que estaba en el baño. Escuché la puerta abrirse y me incliné para ver quien entraba, era Rubius, sostenía una bandeja con un desayuno exquisito.

-Buen día guapa.-Dijo Rubius acercándose y dejándome un dulce beso.-Te eh traído el desayuno.

-Me di cuenta. - Le sonreí. Tomé un muffin que se encontraba en la bandeja y le di un mordisco, era de chocolate y tenía más chocolate dentro, estaba tibio, eso lo hacía mas delicioso aún. Le di un sorbo al jugo de naranja y noté como Rubius clavaba su mirada en mi.-Gracias.- Le sonreí apenas tragué el jugo. Él sonrió y noté sus mejillas rojas.

-El vuelo sale en cinco horas, tenemos mucho tiempo aún. -Me sonrió divertido mientras yo terminaba mi muffin.

-¿Eso es lo único en lo que piensas? Ahora me entró la duda de que si coleccionas putas.

-Tu no estás en esa colección.

-¿En que colección estoy?.

-En la de las que me hicieron felíz, creo que eres una de las que mas me conoce, después de mi madre, claro.- Reímos. -Eres la única en esa colección, recuerdalo.-Nunca lo escuché decir algo tan cursi, odio lo cursi, pero en él hay algo que hace que no sea del todo rosa, algo que hace que cuando él lo dice sienta dinosaurios en el estómago.

-Esto es lo más cursi que me han dicho en mi vida.-Solté una risa al igual que él.

-Si quieres te digo unos poemas. -Levanté la ceja.-Me gustaría ser pirata, no por el oro ni la plata, sino por el tesoro que hay entre tus...- Lo callé metiendo el poco muffin que me quedaba.

-Demasiado por un día. -Reí. -Ahora yo te diré un poema.- Aclaré mi garganta. - Rubén: me gustaría ser paloma, para volar hasta tu balcón, y enseñarte a ser hombre pedazo de...- Me calló con un beso.- Maricón.- Seguí la frase y reí. Acabé mi jugo de naranja.- ¿Y ahora que miras?.

-Nada, bueno, te estoy viendo los ojos,¿Me los regalas?.

-Cuando exista el intercambio ocular te los presto.-Reímos. -Voy a cambiarme, ya vuelvo.- Me levanté de la cama, tomé la ropa que había apartado el día anterior y me metí en el baño. Me duche, hice mis cosas, me lavé los dientes, me maquillé levemente y salí del baño. Tenía puesto mi camiseta negra de "feed me" , una sudadera azul, unos shorts negros con mis medias que cubrían hasta mis rodillas y por último mis vans negras.

-¿Lista muyaya?.- Dijo levantándose de la cama.