Un Contratiempo Infantil

16: Contra la que Elijas

Eiden entró por la puerta vestida de león, pegando un portazo tan fuerte que asusto a Myke.

—¡Eiden!— Gael fue el siguiente en cruzar m pie era tras ella, así que Myke lo detuvo

—¿Que sucede?—

—pregúntale a este idiota— Gael señaló a Erick que acababa de entrar a la casa junto a Zack

—¿Que hiciste Erick?— Myke cruzó sus brazos

—nada— respondió el pelinegro apoyando sus brazos del respaldo de uno de los sillones

—¿Y por qué Eiden está vestida como león?—

—no fue mi culpa— Erick apreto la mandíbula

—¿Y de quién carajos es?— pregunto Gael retóricamente abandonando la sala enojado

—quiero que subas ahí arriba y le expliques a ella, porque no es tu culpa— ordenó Myke, Erick tomó su mochila y subió escaleras arriba

Eiden estaba sobre la cama, con la capucha de león abajo.

—no fue mi culpa— Erick habló en cuanto entro a la habitación

—¡Ya me cansé!, ¡¿Por que tratas de hacerme sentir una mierda?!— gritó la chica levantándose de la cama

—el puto disfraz no lo compré yo, ¿Okey?, le pedí ayuda a alguien y terminaron...— Erick intentó mantenerse tranquilo —y no revisé lo que compraron— se encogió de hombros

Eiden volvió a sentarse sobre la cama y respiró hondo.

—no entiendo, te juro que no entiendo por que que me odias—  Eiden lo miró 

—¿Por donde comienzo?—

—tu y yo ni siquiera hablamos— la chica se levantó de la cama

Erick se quedó en silencio viendo cómo se quejaba.

—¿Me estás escuchando?— pregunto Eiden notando su cara neutra

—si— Erick ni siquiera la estaba mirando

—¿Ves?, lo haces de nuevo, parece que estoy hablando con un puto maniquí— de reflejo Eiden tomó una pelota de la encimera y la lanzo sin rumbo

Esta rebotó contra la pared y fue a parar contra su propia cara.

—mierda— maldijo cayendo al suelo

Erick soltó aire mientras Eiden se levantó con dificultad, y soltó un quejido, Erick se acercó a ayudar.

—si lloras te lanzó por el balcón—

Eiden quitó su mano de su boca y Erick la inspeccionó, notando una pequeña abertura en su labio inferior.

—hay que desinfectarlo— Erick pasó su dedo pulgar por el labio de Eiden, haciendo que Eiden se quejara de dolor

—¿Desinfectarlo?—  Eiden abrió los ojos como platos al sentir el tacto de Erick en su rotro

—si—

—Myke suele besarme las heridas— Eiden dijo sus pensamientos en voz alta

—¿me pides que te bese?— Erick levantó una ceja 

—no, no me refiero a... es solo por— a la rubia intento enmendar su error—no te voy a negar que tienes una boca que... bueno tu sabes pero... pues... yo no estaba pensado en eso... no... bueno no hasta ahora... ¡pero eso no quiere decir que yo... quiera besarte... no es... ¿de que estábamos hablando?— aclaró su garganta

Erick se acercó a ella, haciéndola retroceder unos pasos.

—¿quieres que te lo diga o quieres que lo haga?— Erick levantó las cejas esperando una respuesta