Narra Pilar
Me acabó de despertar y por la poca luz que pasa por la ventana es temprano. Miró a mí alrededor, con los pelos en la cara, y Marizza seguía durmiendo cómo un tronco; para ser más especifica estaba durmiendo en una posición muy rara y que sino fuera porqué parecía que se peleó con las sabanas que estaban en el piso no podría ver lo torcida que duerme. Mí vista se puso en Mia que seguía durmiendo, ella es de las personas que tienen el sueño ligero y que duerme cómo las rapiditas de las princesas de Disney, no digo que Mia despierta y ya se enamora del chico que tiene a su lado sino que duerme muy bien y cuando digo muy bien significa que no ronca, ni habla dormida, no sé cómo pero lo hace igual a la dormilona de Aurora, hasta se parece... Yo debo ser un desastre durmiendo seguro que hasta ronco pero hoy es sábado y voy a seguirlo haciendo sin que me importe. Cerré mis ojos por un momento pero el sonido de que alguien toca la puerta hizo que gire la cabeza.Como dije, Mia se despertó, se puso sus lentes y sus pantuflas. Se levantó y abrió la puerta mientras la veía.
Quién pudiera tener esas ganas de levantarse, un sábado y cada vez más cerca de invierno
Faltaba mucho para invierno pero cuando estoy medía dormida no suelo tener todo el funcionamiento de mis sentidos, lo que sí es que hacía frío y eso para mí es un gran motivo para quedarme en la cama todo el día.
— Señoritas, el señor Dunoff las cito para que en media hora vayan al aula —dijo Blas y fruncí el ceño al igual que Mia.
— ¿Pero pasó algo grave? —le preguntó ella.
El morocho dio un vistazo adentro de la habitación observándolo todo hasta detener la mirada en mí.
— Eso lo dirá Dunoff —se limitó a decir y se fue dejándonos confundidas.
Mia cerró la puerta y se dirigió a su cama para sentarse conservando su expresión.
— ¿Para que el director nos habrá citado? —salio de su boca.
Me enderece un poco en mí cama y pensé un poco la razón.
— ¿Será para decirnos que cómo es sábado nos podemos ir del colegio? —respondí no muy segura.
Nos quedamos un rato en silencio mirando a la nada. La forma en que Blas nos informo eso fue rara ¿Sospechara algo de nosotras? Capaz sea cosa mía pero también le había parecido raro a Mia. Solo se me ocurrió cambiarme, teníamos media hora para hacerlo y como si Mia me hubiera leído la mente se empezó a cambiar. A Marizza la despertaríamos después solo porqué se pone de malhumor cuándo la despertamos.
Narra Manuel
Hoy, durante Tomás se duchaba y Pablo dormía recibí una llamada de Juana...me avisó que mí papá iba a venir dentro de una semana a Argentina, eso me causo un poco de gracia porqué era muy irónico que en una semana viene y después de una semana se va; sus viajes de trabajo no deberían ser tan largos como lo son pero lo mismo tarda un mes en volver a casa, pero de a poco me acostumbré a que lo sean.
Antes no solía tardar tanto en volver y si así fuera estaba perfectamente acompañado sin una estúpida niñera y sin que Juana se deba quedar más tiempo a cuidarme aunque tenga un hogar al que ir. Ella siempre estuvo la mayoría de veces que la necesite mientras que él no, y eso me hizo dar cuenta como las cosas habían cambiado, como su atención hacia a mí cambio cuando para mí debió ser al revés. Él debería estar siempre pendiente a mí, como si me fuera a pasar algo o si me está pasando algo.Las cosas no son como uno quiere que sean. Nada dura para siempre... Y nadie es para siempre.
Hay veces en que pienso cosas como está, siempre cuándo lo hago viene a mí mente lo mismo una y otra vez, como si fuera un recordatorio de mí error el cuál no volveré a cometer, no debo hacerlo. Una vez dudé en olvidarlo y resultó mal, muy mal. Y ese fue otro error, dudar si fue mí culpa lo fue porque si lo era aunque quisiera pensar que no solo para dejar de divagar mis pensamientos en eso...
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La Apuesta: Rebelde Way [Cancelada]
Teen Fiction2 grupos de amigos. 2 apuestas distintas que cumplir. ¿Podrán lograrlas? ¿Se arrepentirán de hacerlas?