Ha pasado un tiempo y ahora solo estamos cuatro en la inmensa sala y nadie ha vuelto desde que se fueron. La chica que me trajo aquí entra con una sonrisa y me pongo de pie. Ella me analiza para saber si soy el chico que ella guió tiempo atrás.
-Sígame- sale con elegancia y yo la sigo con mis piernas temblorosas. Aprieto mis manos con fuerza mientras caminamos por los blancos pasillos iluminados por las ventanas inmensas de cristal y trato de relajarme. -Deme su boleto, por favor.
Asiento y lo busco en mi mochila para luego dárselo a ella. Lo revisa y me abre la puerta que está al frente. Me hace una seña de que entre y lo hago, ella no entra pero cierra la puerta y camino hacia donde están cuatro personas en una mesa. El lugar es una sala de ensayos, lo sé por su gran espejo que ocupa la pared, el estéreo y el piso de práctica.
-Acércate más- camino más rápido y me paro derecho ante ellos y hago una reverencia. Mi corazón late con fuerza al ver que Jeon Jungkook está aquí, no me mira porque está leyendo algunas cosas en unas hojas.
-Deja tu mochila por allí y dame la hoja con tus datos.
-De acuerdo- me saco la mochila y la dejo en una silla y saco de una carpeta mi hoja de vida y me acerco para entregársela a un hombre mayor que usa lentes. Ni porque me acerco mucho Jeon me dirige una mirada.
Hay dos hombres de entre cuarenta a cincuenta años, el otro luce muy joven y es muy guapo, lo he visto en revistas famosas posando en ropa interior, admito que desarrollé un gusto por él y el más joven es Jeon. -Párate en aquella cruz blanca- retrocedo varios pasos y me pongo derecho mientras llevo mis manos a mi espalda.
-Puedes sacarte la gorra y el barbijo- dice el hombre de lentes y asiento con rapidez. Me doy vuelta para ir hacia donde está mi mochila y me saco las dos prendas mencionadas y las dejo sobre esta. Me doy vuelta con vergüenza y me pongo en la cruz de nuevo.
Los adultos me analizan con cuidado logrando que me sonroje y me ponga más nervioso que nunca. -Eres muy apuesto- es ahí cuando Jeon se digna a mirarme. Chocamos miradas y la aparto enseguida y me fijo en el hombre de lentes.
-Jung Hoseok. Veintidós años. Actuación y baile. Tienes muy buenas recomendaciones de tu universidad y de los dramas en los que has participado.
-¿Vas al gimnasio?- esa pregunta viene del hombre de camisa roja, guapo y modelo que no recuerdo su nombre. Los otros dos hombres no sé ni quiénes son.
-Por el momento no, pero antes iba casi todos los días- el que pregunta asiente.
-Por favor, sácate ese saco- ahora habla el de bigote y lentes y asiento. Me lo saco enseguida por lo que la camiseta se alza y me apresuro en bajarla. Miro hacia Jeon y su mirada sigue en mí, tan intensa que me da miedo seguir viéndole.
Vuelvo a la cruz blanca y ellos ahora tienen una sonrisa amable. -Trae esa silla hacia la cruz y la venda que está allí te la colocas por favor- dice el de lentes y voy por las dos cosas. Pongo la silla en el lugar y me siento para colocarme la venda y atarla con un nudo.
-Pon tus manos atrás e inclina tu cabeza hacia el espaldar- esa es la voz de Jeon y con nervios hago lo que me pide. Inclino mi cabeza hacia atrás y coloco mis manos tras mi espalda. Doy un brinco por la sorpresa al sentir unas manos heladas pasar por mi cuello y me aparto muy nervioso.
-Eso es todo, Hoseok. Puedes vestirte de nuevo- me saco la venda y Jeon está detrás de mí. Voy hacia la silla y comienzo a ponerme todo de nuevo con mis manos temblorosas. Pensé que me iban a pedir actuar o algo por el estilo, no que hiciera solo eso.
Me pongo mi mochila cuando estoy cubierto de nuevo. -Nosotros te vamos a llamar si decidimos que eres el indicado, recuerda no decírselo a nadie. Soy el dueño de la empresa y ellos dos son mis asistentes y directores. Gracias por venir.
La chica de antes ingresa al lugar y me despido con una reverencia antes de seguirla sin detenerme y mirar hacia atrás. No estoy seguro si eso fue una audición ni si me fue bien o les llegué a interesar. Me despido de la chica cuando estamos en el primer piso y salgo del lugar.
Reviso mi celular y ya son las seis, no sé qué llevó tanto tiempo, pero estoy preocupado, no me hicieron preguntas ni me explicaron nada, ni sus nombres ni una pequeña esperanza de que me fueran a llamar. Sigo caminando hacia la parada de autobuses de antes y tengo que correr para alcanzar al bus que estaba por irse.
(...)
Cuando llego a casa mi padre aún no está por lo que me toca preparar la cena a mí. Me volví muy independiente en ciertos aspectos desde pequeño porque no quería ser una carga para mi padre y conseguí un trabajo, me compraba mis propias cosas y si me faltaba algo buscaba la manera de no pedírselo a mi papá.
En eso se incluye el cocinar, mi padre se preocupaba por no poder tener comida caliente para cuando llegaba del colegio que tuve que aprender poco a poco desde los once. Cuando le demostré que podía cocinar él dejó de preocuparse por eso.
Cuando hago la cena como mi parte y la de mi padre la dejo en el horno de la cocina para que cuando llegue él solo lo caliente y coma tranquilo. Durante todo el tiempo que me lleva cocinar reviso mi celular para ver si me llegó un mensaje o algo relacionado a la audición, pero no hay nada. Aunque me dio miedo cuando él me tocó el cuello quiero ser seleccionado.
En verdad quiero salir en uno de sus videos y que alguien famoso me contrate para salir en un drama y así comenzar mi carrera como actor. Tendré dinero, fama y podré devolverle todo lo que hizo por mí a mi papá. Quiero que se sienta orgulloso de ver a su hijo triunfar en todo lo que hizo. Ya no tendremos que recortar gastos ni abstenernos a comer algo rico por la falta de dinero.
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¡NO SOY ÉL! [JUNGHOPE]
FanfictionJeon Jungkook es un artista coreano muy famoso a nivel mundial. Hoseok un estudiante de actuación y baile. Donde Jungkook escoge a Hoseok para que aparezca en su video musical haciendo escenas subidas de tono con él ya que le gustó mucho. El rostro...