Escritorio

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Narra Hoseok

La música se detiene y solo mi agitada respiración se escucha en la sala. Creo que lo hice bien.

-¡Perfecto! Estás maravilloso- el profesor confirma mis pensamientos y me hace sonreír. -Serás alguien muy reconocido en poco tiempo, aunque desde ahora ya tienes fans.

-¿Fans?- aquello me hizo confundir.

-Por el video de JK. Tu nombre fue tendencia por algunos días, debiste sentirte bien- ¿mi nombre?

-No entiendo. ¿Mi nombre estuvo en tendencia?

-¿No lo sabías? "Hoseok, el chico que tocó el cielo" las fans suelen ser un poco extrañas en sus títulos- él ríe pero eso no me causa chiste. Eso significaba que ya sabían de mí y que no tendría calma. Mierda, había ido a bares gay recientemente y tal vez alguien pudo verme por allí.

-¿Dónde está Taehyung?- debía hablar con él, nunca me dijo que mi identidad ya había sido descubierta.

-En su oficina, creo que- empiezo a recoger mis cosas interrumpiéndole.

-Me iré por hoy. Gracias, profesor- hago una reverencia y salgo de allí con prisa. No me importaba estar sudado y que mi camiseta estuviera húmeda. Debía hablar con Taehyung.

Entré a su oficina sin golpear primero y pude notar su sorpresa al verme. -¿Qué haces aquí?

-Necesito hablar contigo.

-Mierda. Yugyeom está aquí, solo fue por un café, debe estar ya de regreso- el alma se me va al piso y me bloqueo.

-Me voy a ir- me doy media vuelta para irme.

-¡NO! Se van a encontrar en el pasillo. ¿Por qué hoy de todos los días, Hoseok?

-¿Qué hacemos? Si se entera que trabajo aquí va a saber que todo lo que le dije era mentira, se supone que terminamos en buenos términos.

-Métete debajo del escritorio. No te verá porque llega hasta el suelo.

-No, no quiero quedarme aquí tanto tiempo. Es muy estrecho- digo viendo aquel escritorio.

-No me importa, es eso o que Yugyeom te vea. Jungkook también va a llegar en unos minutos. Metete en ese escritorio si no quieres problemas- jodida mierda, por qué hoy de todos los días.

-Trata de sacarlos de aquí- iba a decir algo más pero la puerta fue golpeada y corrí a meterme bajo el escritorio.

-El café de aquí es asqueroso.

-No entiendo por qué sigues comprándolo- Taehyung se escuchaba nervioso como hace segundos atrás.

-Porque me trae recuerdos de nosotros tres. Ese café nos hizo amigos. Jungkook era tan callado y huía de todos- bueno, hoy me enteraré de muchas cosas. Y no sé si será bueno.

-Jamás creí que Jungkook se volvería tan audaz y descarado. Pero estoy feliz de que haya conseguido ser famoso.

-De no tener nada, ahora lo tenemos todo- escucho a Yugyeom sentarse. -¿Por qué sigues siendo manager?

-Porque me gusta ser parte de esta empresa. El tiempo libre me gusta ocuparlo en cosas de provecho- mierda, mi pierna empezó a amortiguarse. Quería gritar por la sensación de hormigueo, no podía tener tan mala suerte.

-Por eso me gustaría que tomaras tu verdadero puesto. Ya casi no nos vemos y siempre me dices que estás cuidando de aquel chico problemático. ¿Cuándo saldremos a tomar algo?- ¿por chico problemático se refería a mí? Taehyung solo cuidaba de mí.

-No hablemos de esto aquí. Vayamos a tomar algo este viernes.

-¡Pero es lunes!- nunca había escuchado a Yugyeom quejarse como niño y si no fuera por el amortiguamiento hubiese reído.

-El sábado fui a tomar con un amigo. No puedo ir tan seguido- había sido reciente nuestra salida y todavía los chupones estaban rojos. Yugyeom dejó demasiadas marcas, me recordó a lo posesivo que era Jungkook.

-¿Cuál amigo si solo nos tienes a Jungkook y a mí?- quise reír por eso y me tapé la boca para que no se escuchara nada. Pero mierda, mi pierna también se movió y aquella sensación de porquería se intensificó y casi me hace quejar en alto.

-Deja de ser idiota, sabes que no es así. Vamos este fin de semana con Jungkook a nuestro bar favorito.

-Amo con mi vida a ese bar. Siempre me da buena suerte. Este fin de semana me hizo encontrarme con mi chico- mi respiración se atoró. ¿"Mi chico"? espero que no haya sido yo. Tal vez se encontró con alguien más aparte de mí.

-¿En serio? Eso es genial- escuché a Taehyung moverse por la oficina, estoy seguro que piensa lo mismo que yo.

-Sé que te lo dije antes, pero él me vuelve loco. Hoseok es tan joven, risueño, hermoso y el suspenso que deja entre ambos me sigue fascinando. Es imposible mantener mis manos quietas si estoy cerca de él. Lo he tenido tantas veces entre mis brazos y no me canso de su olor y su tersa piel.

Quería que la tierra me tragara y me escupiera lejos de este lugar. Estaba tan avergonzado que quería morirme. ¿Ese era el nivel de confianza que se tenían? ¿Taehyung ya había escuchado de mí por parte de Yugyeom? No creo que pueda volver a ponerme tan rojo de nuevo en mi vida como en este momento.

-Lo siento por la demora- mierda, ahora llegaba Jungkook. Y el amortiguamiento tampoco me pasaba y estaba empezando a desesperarme. -¿De qué hablaban?

-De nada, cosas asquerosas de Yugyeom- Taehyung lo dijo con rapidez. El pobre tenía que soportar esto por mi culpa.

-¿Cosas asquerosas?- Yugyeom sonaba dolido.

-¿Qué te pasa? ¿Por qué estás sudando tanto?- Jungkook pregunta.

-Eso te iba a preguntar, cuando llegué luego de comprar mi café ya estaba nervioso y está actuando raro- sabía que era demasiada presión para Taehyung. Juro que le invitaré a comer algo para recompensar lo que estaba ocasionando.

-Estoy bien. Solo mucho trabajo- escuché pasos acercándose al escritorio y me tensé. -¡Jungkook!- el grito de Taehyung me indicó que Jeon era el que se acercaba.

-¿Qué sucede contigo? Solo iba a sentarme. No tienes que sujetarme tan fuerte- mierda. Me quiero morir.

-No puedes sentarte allí. Ese es mi lugar- la voz de Taehyung sonaba más temblorosa que antes.

-¿Desde cuándo te ha importado?

-¿Qué pasa contigo, Tae? Estabas bien antes de irme por el café.

-Creo que deben irse por hoy. Tuve una pelea con Suzy. Sigue buscándome y me dijo algo que me preocupó mucho. Necesito tiempo- ¿eso era cierto, o solo estaba mintiendo por mí?

-Somos tus amigos, se supone que debemos estar contigo en estos momentos. Siempre nos cuentas tus cosas- no podía creer cuan dulce era Yugyeom. Se escuchaba muy preocupado por Taehyung.

-Hoy no, veámonos este fin de semana en nuestro bar. Por ahora necesito que me dejen solo- el pobre se escuchaba cansado.

-No, es mañana o no me voy de aquí- Yugyeom, deja de ser tan dulce, por favor.

-Mañana hablamos. Ahora necesito que se vayan- escuché pasos hacia la puerta y me puse feliz. Por fin se acababa este sufrimiento.

-Te llamo más tarde.

-Nos vemos, suerte, Yugyeom. Chao, JK- la puerta se cerró y escuché un suspiro pesado. –Puedes salir.

Escuché pasos acercándose y luego Taehyung estuvo arrodillado frente a mí. Se veía pálido, muy sudado y cansado. –Lo siento tanto. Siempre te causo problemas.

-No se puede evitar. Dame tu mano- se la doy y me hala un poco para intentar ponerme de pie pero mi pierna amortiguada casi me hace caer al piso. Odiaba esta sensación de mierda. Taehyung me sostuvo de la cintura y yo me apoyé en él.

-Olvidaba- la puerta se abrió por completo y nosotros dos nos quedamos estáticos allí. Él sosteniendo mi mano y mi cintura y yo apoyado completamente en su pecho. –¿Hoseok?- la vida me odia.

¡NO SOY ÉL! [JUNGHOPE]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora