¿Que hubiera sido? ~Diego&Roberta~

33. No te vayas

Le había dicho que aunque esa noche no había tormenta quería dormir él.
Le extrañó pero aceptó encantado la idea.

Y al final sólo él pudo conciliar el sueño. Ella se pasó toda la noche abrazada a su novio llorando sobre su pecho sin que este se diera cuenta. Quería pasar la mayor cantidad de tiempo posible con él antes de tomar ninguna decisión.

Miró la paz en el rostro de él mientras dormía y sonrio. Ya no sabía si era así de guapo o era su visión de enamorada. Pasó el dedo índice por el contorno de su cara y miles de recuerdos se le pasaron por la cabeza.

-El día que la abordó como un gorila enfadado defendiendo a Vico y quedó alucinada con él, pero en ese mismo instante le odió

-Las constantes peleas por todo. Las amenazas, los insultos.

-Y los besos. Todos esos besos que se habian dado con escusas, que si por vengarse, que si para que Alicia no les descubriese, para que la policía no encontrase a Diego, porque fingian ser novios...la de escusas que habían puesto solo para no aceptarlo hasta que por fin se decidieron.

Y parecía que todo eso no valía de nada.

Sabía que lo que iba a hacer les iba a destruir a ambos, pero no veía otra salida. No veía solución.

Cuando el sol empezo a entrar por la ventana se levantó con cuidado para no despertarlo y le miró antes de darle un beso.

-Perdoname mi amor.

Al levantarse la buscó y no estaba. Supuso que se había ido temprano para que no la cachasen su habitación y evitarse problemas. Pero durante el resto del día no la encontró.

La llamo varias veces pero daba apagado. Fue a su habitación y no obtuvo respuesta.

Para el final del día lo consiguió, más bien ella le encontró a él. Con un mensaje.

"Te veo en diez minutos en la bodega"

Se extrañó con la simpleza del texto.

-Y ahora que hice?

Como ella le había indicado, se dirigió directamente a la bodega.
Cuando llegó ella estaba ya allí, aparentemente nerviosa, andando en círculos. Inmediatamente el corazón empezó a latirle con fuerza, algo le estaba pasando a su novia.

-Intensa que pasó? Te desapareciste todo el día - Se acercó y cogiendo su cara entre sus manos la besó.

Entonces lo sintió.

No le había recibido el beso. Ni un movimiento de labios.

Separó su cara de ella y la miró. Estaba seria, muy seria.

Despacio agarró las manos chico y las apartó de su cara.

"Ahora o nunca Roberta"

-Tenemos que hablar

-De que o qué?

-De esto Diego. Ya no da para más

-A ver Roberta, de qué fregados me estas hablando?

-De que quiero cortar

-No

-Como que no?

-No. No vamos a cortar

-A ver Diego, que no entiendes?

-La mosca que te ha picado

-No me ha picado nada, simplemente quiero cortar. No ves que no podemos estar juntos? Wey somos muy diferentes y mejor tronar ahora que tener que dejarlo porque nos hayamos matado

-Se te fue la cabeza Roberta? No es nada nuevo lo distintos que somos. Me puedes decir que te pasa y por que este pancho ahora?

-Ok. Quieres que te lo diga claro?

-Si

-No te quiero. No quiero estar contigo. De hecho no sé ni como hemos llegado hasta aqui.

-Aja, parale a la bromita porque no está haciendome para nada de gracia.

-No es ninguna broma. Neta pensabas que iba a beber los vientos por ti o algo? Mirate. Eres un niño de papi que no sabe hacer nada por si solo. No eres más que una linda cara, pero estás vacío por dentro.

-Roberta...

-Roberta que? Que no entiendes que no quiero tener nada que ver contigo?

-Me dijiste que...

-No manches, aun no sabes que suelo meter la pata por aventada? Contigo me aventé, pero ya se me pasó. Me lo pase bien un rato pero wey, ya me aburriste. Neta ya, superalo si? Te mentí. Escuchame NO TE QUIERO -Se dio la vuelta dandole la espalda dandole a entender que se había acabado la conversación, pero fue solo para que no viene las lágrimas que empezaban a caer por sus mejillas.

-Roberta, piensatelo muy bien. Porque te juro, que es el ultimo momento que tenemos para olvidar esta neura que te dió. Roberta -Pero ella no se giraba, no le hablaba, no le miraba. Ya estaba todo dicho.

No podía hacerlo. No podía seguir con eso. No sabía como había sido capaz de decirle todas esas cosas mientras su corazón se estrujaba hasta el punto de hacer que le doliese el pecho. No iba a continuar. No podía alejarse de él, daba igual lo que pasara, pero ella iba a permanecer a su lado.

Se dio la vuelta para enfrentarle y decirle la verdad.

Pero no estaba. Se había ido. No podía ser. Se habia acabado de verdad?

-Diego? Diego donde estas? Muñequito..no...

El dolor comenzó a subir por todo su cuerpo acompañado de un extraño mareo y zumbido. Un golpe de realidad.

Lo había alejado de verdad. Lo habia hecho, y sabía que ya no había remedio, que ya no había explicación que a él le fuese a valer.

Se dejó caer al suelo y empezó a gritar mientras intentaba asimilar lo que había pasado.

-DIEGO! MI AMOR NO TE VAYAS! NO ME DEJES!

El aire comenzó a faltarle, cuanto más le llamaba más se vaciaban sus pulmones y menos fuerza tenía.

Acabó tumbandose en el frio suelo de la bodega mientras seguía llorando y llamandole, sin poder creer el error que había cometido.