45. A salvo

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En el colegio todo era un caos.
Mía y Miguel habían conseguido reunir más pruebas y estaban tratando, junto a todos los compañeros del salon, de hacer entrar en razón a Gandía, quien se negaba a poner cartas en el asunto para que no hubiese un escándalo.

Todo eran quejas, reclamos y gritos cuando apareció fumando un cigarro e hizo callar a todos solamente con su presencia.

-Señor Bustamante, que placer tenerle aquí

-Que está pasando aqui? Que circo es este Gandía?

-Nada, los chavos quieren una hora libre el viernes para terminar antes las clases

-Eso no es cierto! - No había desplegado sus mejores poderes de sailor moon en esa misión para que ahora Gandía la pasase por alto e iba a aprovechar que Bustamante estaba ahí, aunque no sabía si, conociéndole, iba a hacer algo. - León, en el colegio hay un grupo de chavos que se dedican a perseguir a los becados. Prendieron fuego la bodega en la que tenían todas las pruebas pero conseguimos más

-Que fantochada es esa? Una secta? En el colegio? Pascual, como has permitido algo así?

- Señor Bustamante, la alumna Colucci solo está exagerando. Son simplemente chiquilladas de crios, ya me entiende.

-Hubo un incendio y fue una chiquillada?

-Claro que no!! Por qué no le dice que casi matan a Diego también?

-COMO? Donde está mi hijo Pascual? Y por qué no se me ha avisado de esto? Voy a ordenar que se clausure este colegio hasta que me digan quienes forman ese grupito y esten todos expulsados e incluso presos.

Viendo que Bustamante comenzaba a ponerse nervioso y que sus compañeros gritaban cada vez más, fue Miguel quien dio un paso adelante y se puso frente al padre de su amigo.

-Señor, Diego está bien. Yo estaba con él en el incendio y llegaron justo a tiempo para sacarnos. El ahora mismo está buscando a Roberta, porque creemos que uno de los integrantes de la Logia la secuestró.

-Como? Tambien existe la posibilidad de que haya una alumna secuestrada?

Justo en ese momento entró Giovanni empujando a Rodrigo, quien llevaba la cara ensangrentada, dejando a todos los allí presentes horrorizados.

Después entraron Diego y Roberta, quienes no se habían soltado desde que habían cogido el camino de vuelta al colegio.

Seguia temblando en los brazos de Diego, y ahora, con la todas las miradas de sus compañeros sobre ellos, más aun.

-Hijo, que te pasó?- Se acercó a él y le cogio una de sus manos ensangrentadas, haciendo que se separase de Roberta, sintiendose totalmente desprotegida ante la pérdida de contacto.

Pero Diego no tardo en apartar bruscamente la mano para volver a abrazarla, sin olvidar tampoco en ese momento el daño que su padre les había hecho a los dos.
Bustamante se dió cuenta perfectamente del gesto de su hijo, pero no dijo nada. Solamente pudo ir relacionando los hechos con lo que le habían contado. Y sabía perfectamente que había pasado al ver las manos de Diego y la cara de Rodrigo.

-Que pasó para que le golpearas?

-Intentó violarla

El salón se quedó unos segundos en completo silencio bajo las caras de asombro de todos. Hasta que Luján se lanzó sobre Rodrigo pateandolo y tirandolo al suelo bajo insultos. Acto que Miguel acompañó.

El caos se habia desatado.

Gandía y Gastón trataban de sujetar a los alumnos que se habian enzarzado en la pelea, pero un grito de Madariaga, quien acababa de entrar, les hizo callar.

-Se acabó! Pascual, si no denuncias esto, lo haré yo. La logia tiene que terminar hoy si o si.

Rodrigo empezó a reirse mientras tosía, haciendo que todas las mirasas cayesen sobre él.

-Estan locos si creen que vamos a desaparecer así como así. Si no somos nosotros, serán otros. Porque nadie quiere a esta estirpe de los becados cerca. Y la Logia va a acabar con ellos, cueste lo que cueste.

-Me cueste lo que me cueste a mi tu vas a salir de este colegio, como que me llamo Enrique - Le empujó de camino a la dirección seguido por Gandía y Gastón, llevándose la lista con los nombres de los integrantes que Mia y Miguel habían conseguido.
Los chavos comenzaron a celebrar sabiendo lo que venía ahora que todo se había descubierto y que Bustamante tambien se había enterado de lo que estaba pasando.

Pero Roberta seguía temblando. Muerta de miedo aun por lo que casi ocurrió. Rezando para que de verdad fueran todos los miembros de la logia expulsados y no verles la cara nunca más.

Los brazos de su persona favorita la estrujaron aún mas contra su cuerpo y ella lo miró.

-Creo que deberiamos ir a que te des una ducha y te cambies de ropa.

-Puedo ir yo sola.

-Yo no te pienso dejar sola

-Gracias por salvarme

-Siempre.- Besó su cabeza y salieron de alli para encaminarse a la habitación de Roberta, quien sabía que ahora si, estaba a salvo.

¿Que hubiera sido? ~Diego&Roberta~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora