Tradición -Rivamika- (Finalizado)

XXIX

* 3/3 EN MI PAIS AUN FALTAN 30 MINUTOS PARA LAS 12 ASI QUE OFICIALMENTE SI SUBI LOS 3 EL DIA DOMINGO HAHA, espero hayan disfrutado este mini maraton <3*

La noche se me pasó en un parpadeo, he de admitir que era la primera vez que despertaba con una mujer entre mis brazos, era una persona que tenía pésimos hábitos para dormir, generalmente descansando un máximo de 3 horas y muchas veces en sillas. En mis recuerdos más lejanos aún queda la sensación de un largo descanso nocturno y eso era cuando aún era un niño, en donde el único alivio temporal al hambre era tener muchas horas de sueño. Era hasta triste que usara una necesidad básica para remplazar a otra, él sentía que si ahorraba energías durmiendo podría aguantar el día sin morir en el intento.

A pesar de tan reparadora noche, una vez Mikasa abandono mis aposentos tuve que levantarme a cumplir con mi rutina, la situación estaba extremadamente delicada y no tomamos medidas la noche anterior porque el brazo de Erwin necesitaba ser atendido. A paso rápido me dirigí a las oficinas del rubio y entré sin tocar la puerta, no me sorprendió encontrar a ese par de personas allí desde tan tempranas horas; sin embargo, no me agradaba que el rubio no descansara un tanto más. Erwin estaba con un semblante pálido y ojeroso y Hange a su lado ni siquiera reparó en mi presencia, ojeaba como loca montones de hojas que tenían esparcidas por el escritorio. Me sentí un poco mal por descansar cuando ellos habían estado matando sus horas de sueño, pero lo recompensaba la movilidad mejorada que sentía en mi tobillo. No era momentos de relajo, lo capte cuando ninguno de ellos me dio los buenos días; rápidamente me senté en el escritorio, ni siquiera serví mi té como estaba habituado, Erwin me miró y comenzó a ponerme al tanto de la situación.

- Entonces, ¿Crees que la policía militar empezaran por fin sus macabros planes?- Le pregunté intentando encajar todas las suposiciones del rubio.

- Es lo más lógico, ¿Qué mayor momento de debilidad que este?, además, hay que abandonar este cuartel, deben esconderse y proteger con mayor énfasis a Eren y a historia quienes serán el focus de ellos.-

- ¿Qué pasará contigo?- El rubio me miró fijamente y no pronuncio ni una palabra, yo trague grueso, era una pregunta tan idiota, si seriamos catalogados como criminales lo lógico sería aprisionar en primer lugar a la cabeza de la legión, en este caso quien nos representa frente a la corte es Erwin. - ¿Qué pasa con el imbécil de Fabián? ¿En que nos puede ayudar?-

- Este tiempo nos ha suministrado provisiones y nos ha ayudado en la burocracia, pero tanto tu como yo sabemos que el no gano el puesto de comandante de la policía militar, el maldito de Nile siempre fue muy astuto.-Dijo lo último chasqueando la lengua, me sorprendió un poco el vocabulario del hombre, generalmente yo era quien decía esas palabras.

- ¿Estas consciente el riesgo que eso conlleva?- Me dolía la cabeza de pensar tantas posibilidades en tan poco tiempo, la pena de muerte que seguramente podrían dictarle a Erwin era algo que me preocupaba de sobremanera.- Deberías irte con nosotros.

- Eso empeoraría las cosas Levi, hay que luchar por todas aquellas pequeñas esperanzas que se nos presente.-Por primera vez intervino Hange quien aún se veía completamente concentrada en su lectura, hablaba tan serio y preciso que me costaba creer que fuera la misma idiota irritante de siempre.

- Hange tiene razón, ya he conversado mis ideas con ellas, y los necesito, los necesito a ambos.- Yo suspiré, de nada servía comerme los sesos cuando al final debía confiar en Erwin y su estrategia.

- Entonces al final, por muy duque que sea, el imbécil de Fabián no nos sirvió para nada.- Estaba enojado y no sabía que otro punto tratar sin que me causara enojo.