Tradición -Rivamika- (Finalizado)

II

¡Holaa! Es mi primer fic, actualmente lo realizo por mi tlf y es algo complicado, pido de antemano disculpa por los errores ortográficos que se me pueden escapar, por ahora solo llevo 3 partes de este fic. Aún no ha sucedido el intento de secuestro por parte de Annie, les aumente un poco la edad a los personajes ya que si no me equivoco en ese arco, ellos tenían 15 más o menos. Bueno, espero la disfruten, seria agradable leer sus críticas constructivas y depende del recibimiento de este fic veré si lo expando a uno más largo o queda en uno de 3 partes. Sin más que agregar, los personajes de este Fic no me pertenecen, hay mucho contenido adulto, lenguaje, escenas, etc.

-Penétrame más fuerte. – Ordenaba la rubia quien montaba salvajemente al chico.

-Annie – Gruño el varón mientras apretaba los rebotantes senos de su compañera, ella marcando el ritmo, ambos sudando. – Eres la mejor, siempre lo has sido.

La chica sonríe con suficiencia mientras se deja caer profundamente sobre el pene de su compañero. –Lo sé. – Dice en un susurro mientras se acerca y lo besa.

Abro los ojos de golpe, mi respiración agitada por la furia, es una pesadilla para mí. Observo por la ventana, el cielo sigue oscuro, por la intensa negrura, deduzco que aún faltan más de 3 horas para el amanecer. Desde arriba de la litera donde duermo, puedo observar como mi camarote está casi completamente vacío, después de la reunión anual esta tarde, hay 3 días de festejo en los cuarteles, las 3 divisiones conviven mucho más, eso implica alcohol, peleas y mucho sexo. La mayoría de las reclutas estarán cumpliendo la misión, dentro de la habitación solo estaba Christa la cual dormía plácidamente con Ymir en la cama continua y yo. Bajo de un solo salto de mi cama, sin importarme despertar a mis compañeras, era estúpido intentar dormir cuando claramente no lo haría, cada vez que cerraba mis ojos imaginaba a Annie con Eren. Me puse mis botas debido a que no me había quitado el pantalón y camisa del uniforme, solo la capa, los arneses y la chaqueta. Me dirijo a la sala común. Salgo al pasillo, todo está oscuro, mas no silencioso, desde acá se escucha el bullicio formado en el salón, camino recto, apenas doblo a la izquierda encuentro a una pareja besándose, el chico apretujando a la joven contra la pared, mientras sus manos acariciaban sus muslos, él está de espaldas y su compañera cubierta por su altura así que no puedo ver exactamente de quienes se tratan, la sangre se agolpa en mi rostro, pero continuo caminando como si no hubiera visto nada.

Una gran cantidad de personas se encontraban bebiendo alcohol, conversando, gritando, paseo mi mirada por el salón buscando algún rostro conocido, más al fondo se encontraban los altos mandos en una mesa, consumiendo alcohol y hablando de forma mucho más civilizada que los jóvenes. Me sorprendió ver al Comandante Erwin bebiendo, pero con la teniente Hanji a su lado, como siempre de parlanchín e imprudente no me sorprende. Unos poco más alejados de ellos se encontraba el escuadrón elite junto a su capitán. Levi observaba el contenido de su vaso mientras de forma desinteresada, Auruo estaba sentado de una forma similar a como lo estaba su capitán, su expresión corporal transmitían suficiencia, hablaba de un tema al azar al cual sus compañeros de mesa no prestaban atención, debido a que Gunther estaba durmiendo, seguramente borracho sobre la mesa, Y Petra miraba soñadoramente a Levi, que bueno, los ignoraba a todos mientras estaba absorto en su mundo, o eso creía, porque a medida que me adentraba en el salón, el levanto su vista y la dirijio sin pena alguna directamente a mi rostro. Le sostuve la mirada, su par de ojos azul oscuro parecían dagas, y yo le devolvía la mirada con odio, aun recordaba la paliza que le dio a Eren a pesar que a este mismo no parecía importarle, la intensidad que reflejaba su mirada extrañamente me incomodo, me sentía indefensa, a pesar de valerme de mi fuerza y valentía para amenazarlo, sabía perfectamente que ese enano, era el soldado más fuerte de la humanidad "quizás hasta me pueda dominar a su antojo" pensé e inmediatamente me sonroje mas no cedi. Nuestra pequeña guerra de miradas duro lo suficiente como para que petra, la cual estaba observando a Levi con admiración, pasa a mirarme a mí, siguiendo la trayectoria de la mirada de su capitán. Inflo las mejillas con frustración, me miro como una total intrusa e inmediatamente le comento algo a Levi el cual volteo en su dirección haciendo que se rompiera nuestro contacto visual.