Rose Uzumaki, hermana gemela de Naruto y contenedora del lobo de las diez colas. Naruto Uzumaki, hermano gemelo de Rose y contenedor del zorro de las nueve colas. Sasuke Uchiha, único sobreviviente de su clan y poseedor del Rinnegan. Gaara, Kazekag...
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Una nueva luz: Capítulo 33: Un peligroso festival
"Me alegro de que estés bien"
Después de semanas de estar en el hospital y ver a Eren sentado en el mismo lugar diario, el día de aquel festival había llegado. Aquel día era el día que atacaríamos Liberio. Tenía que pasar todo el día con los guerreros de Marley, tanto los chicos que heredarían el poder, cómo los que ya lo poseían, hasta el ataque.
"El que no arriesga nada no cambiará nada"
Aquella palabras se repetían una y otra vez en mi cabeza, cómo un mantra... intentando hacer una excusa para el por qué deberíamos de masacrar a tanta gente inocente, si aquello no fuera suficiente había oído una plática del general Magath. Ellos sabían que Eren estaba aquí, por lo que traerían a gente de todo el mundo, para que presenciaran el poder de los "demonios de esa isla"
-Doctora Stones ¿está bien?-preguntó uno de los doctores del hospital, estaba a punto de salir de mi turno para ir con los chicos al festival que se organizó aquí en Liberio.
-Sí, estoy bien... solo me encuentro un poco cansada-dije con una sonrisa antes de amablemente despedirme y retirarme. Vagaba por las calles llenas de gente y de puestos que vendían todo tipo de cosas.
Estaba algo mareada, intentando procesar el hecho de que en pocas horas tendría que matar a gente inocente. Me topé con los chicos, que andaban con Pieck y Galliard.
-¡Hola, Amaya-san!-saludó Pieck con una sonrisa al verme.
-Ya les dije que no me tienen que agregar el "-san"-dije mientras saludaba a los cuatro chicos, después a Galliard y Pieck.
-Es que si alguien nos oye dirigiéndonos con normalidad a una marleyana nos regañarán-contestó Gabi comiendo algo que parecía una pizza. Me sentí algo mal por ellos, no podían si quiera hablarles con normalidad a los "marleyanos" por que está mal, no podían salir de aquella pequeña jaula por que estaba mal, no podían defenderse frente a los "marleyanos" por que está mal. Todo por un incidente que nadie de los que están vivos presenció para afirmar si si quiera fue real.
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Era de noche, cada vez el ataque de la isla Paradis se veía más cercano. Me senté en medio de Pieck y Gabi. Después de un rato de estar sentados un soldado de Marley los llamó, a Pieck y a Galliard, pues los llamaba el capitán Magath. Yo sabía que todo aquello era parte del plan, no veía a Falco por ningún lado... aquello me extrañó.
Finalmente el telón se abrió, pude ver la figura de Willy Tybur. Todos aplaudieron y luces cegadores tomaban fotografías de aquel momento.
-¡Damas y caballeros, sean bienvenidos a este festival organizado en Liberio!-exclamó Tybur para que todos lo escucharan. Todos los altos mandos de la milicia de Marley estaban ahí, embajadores de otros países del mundo y claro, todos los eldianos que vivían en Liberio. Mientras Willy Tybur explicaba la historia de la gente entre las murallas, vi a Gaara entre la multitud.
Este ya no estaba transformado. Este asintió con la cabeza, indicándome que me acercara. Me disculpé con Gabi, Zofia y Udo antes de dirigirme afuera de aquel teatro construido apresuradamente.
-Gaara, ¿cómo has estado?-pregunté abrazándolo.
-Bien, me alegro de que estés bien-me devolvió el abrazo-bueno hemos confirmado al posición de Eren, además tienes que equiparte con el equipo, pronto empezará todo-explicó mientras caminábamos por las, ahora vacías, calles. Aproveché para deshacer el jutsu de transformación, nadie estaba viendo pues todos estaban obligatoriamente congregados en la presentación de Willy Tybur.
Finalmente entramos a un edifico vacío, donde varios de nuestros compañeros infiltrados se encontraban ya, listos para atacar en cualquier momento.
-¡Naruto!-exclamé abrazando a mi hermano, este me devolvió el abrazo con una sonrisa en la cara. Finalmente nos separamos del abrazo y me dieron mi equipo. Este era nuevo, por lo que sufrí de nuevo tratando de atar los arneses. Casi muero por ahorcamiento.
Cuándo terminé me dirigí hacia alguien muy especial para mi.
-¡Levi!-exclamé mientras lo abrazaba, y cómo lo agarré desprevenido pude robarle un beso. Este me abrazó de vuelta, con un pálido sonrojo. Qué bueno que todos los demás estaban concentrados en el ataque, si no hubieran visto al capitán Levi mostrar una emoción, y el capitán Levi tenía una reputación que mantener.
-Me alegro de que estés bien-me dijo este con una ligera sonrisa en su rostro.
-Yo también me alegro de verte y de que estés bien-respondí con una sonrisa. Todos los miedos y dudas que había tenido hasta aquel momento se fueron, me sentía segura en sus brazos. Si pudiera, simplemente renunciaría a esto y me iría con Levi lejos de cualquier tragedia. Pero, eso no es posible así que cómo todo, nuestro abrazo tuvo que finalizar.
Nos acercamos a las ventanas, dónde todos discretamente esperaban a ver la transformación de Eren a lo lejos. Mientras Levi sostenía mi mano, una intensa culpabilidad me inundó, ante el pensamiento de matar a toda aquella gente. Sin embargo, me importaban más mis compañeros, con los que había luchado casi cinco años.
Lo sentía por ellos, pero si ellos se quejan tanto de que los devoraron con titanes ¿por qué hacen lo mismo? Mientras me perdía entre aquellos pensamientos, el apretón en mi mano me regresó a la realidad. Pude oír el gran estruendo y ver el rayo amarillo... aquello quería decir que Eren se había transformado.
