37. Calma antes de la tormenta

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Una nueva luz: Capítulo 37: Calma antes de la tormenta

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Una nueva luz: Capítulo 37: Calma antes de la tormenta

"Los prisioneros están por allá"

"¡No, Eren!"...

"¿Esto era lo que querías?"...

"¿Qué es lo que buscas haciendo esto? Ya nos has salvado por un buen tiempo"...

"¡Puedes cambiar tu destino!"...

Aquellas voces... me eran conocidas, pero ¿por qué no podía ver nada? Después de un buen rato de vagar por aquel lugar de una negrura inimaginable, escuché aquello. Lo único que recuerdo es que después de haber curado a Sasha me había quedado inconsciente. 

Aquellas voces que sufrían, solo podía oírlas pero no podía ver quién las decía. El único nombre claro era el de "Eren", aquello me dio una mala espina, pues pareciera que Eren había hecho algo terrible. ¿Qué? No tengo ni idea. Solo espero que estén bien... 

Una luz brillante se filtraba entre aquella oscuridad, y sin que me diera cuenta aquella luz me cegó.

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Abrí los ojos de golpe para ver que estaba en un apacible cuarto. Estaba recostada en una cama, me desorienté. ¿No estaba en una aeronave curando a Sasha? Curando a Sasha... ¡Sasha! ¿Ella estaba bien? ¿No había muerto, verdad? Me incorporé de golpe, pero una fuerte dolor de cabeza se hizo presente por lo que solté un quejido. 

-¿Rose?-preguntó una voz conocida para mi. Me volteé para ver a mi lado, sentado a Levi. Lo miré con alivio, él no había muerto... aunque él es el Levi Ackerman... era casi inmortal, se había enfrentado al titán "bestia" y salió ileso. 

-¿Cuánto tiempo estuve inconsciente?-pregunté con preocupación, no quería retrasar a los demás, y más ahora que Paradis estaba en guerra con Marley. 

-Dos días-contestó Levi dándome un abrazo. Sonreí en el abrazo, aquellos brazos seguían haciéndome sentir querida y segura. Le devolví el abrazo, agradecida. Después de aquello Levi plantó un dulce beso en mis labios. 

-¿Sasha está bien?-pregunté cuándo nos separamos. Levi me hizo acostarme de nuevo, pero esta vez dejó que recargara mi cabeza en su pecho.

-Sasha está bien, le hicieron las transfusión de sangre en cuánto llegamos-explicó Levi, mientras tanto yo me quedé hipnotizada por los latidos de su corazón, era uno de esos momentos que quisieras que duraran para siempre, pero sabes que es imposible. 

Sin que me diera cuenta, caí rendida de nuevo ante un nuevo sueño, del que tal vez no me acordaría al despertar.

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Después de aquel pequeño momento, no hubo muchos más. Pues preparaciones para la guerra era lo que ocupaba nuestros días. Me acuerdo cómo empezó todo esto, me pregunto que hubiera pasado si nunca hubiéramos acordado con el plan de Zeke y Yelena.

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Era una noche pacífica, si a pacífica se le puede definir cómo a los soldados de la Legión tendiendo una emboscada. Eso había sido tres años atrás.

-Rose, si Eren falla tu y tu equipo deben de estar preparados para cualquier cosa-dijo Hange-san con una sonrisa nerviosa, consideraba a Hange como una hermana. Y ella me había dicho que ella sentía lo mismo, era una especie de calma... pues Marley todavía no atacaba desde que el hombre mono se había ido. 

-¡Claro Hange-san!-le contesté con una sonrisa, habíamos logrado establecer bases a lo largo de la isla, y si queríamos evitar ataques teníamos que deshacernos de los grupos de exploración de Marley. Sin embargo, Hange y yo habíamos propuesto que intentáramos aliarnos con ellos, o más bien tenerlos cómo prisioneros... solo que no los trataríamos como tal. 

-Cuídate-me dijo Levi con un abrazo, cómo dije casi no da muestras de afecto en público, cosa que no me molestaba e incluso comprendía. Asentí antes de partir hacia los barcos, Eren se encargaría de uno y nosotros de otro, sin embargo, si algo fallaba nosotros tendríamos que auxiliar a Eren. 

-¿Listos?-susurró Naruto mientras teníamos en la mira al barco, nosotros derrocaríamos a los tripulantes. Cómo sea, no íbamos a matarlos pues íbamos a intentar "negociar" con ellos. Sin embargo, tendríamos que dejarlos inconscientes o algo pues a los bijuus o el Susanoo de Sasuke eran un poco muy grandes cómo para dejar ilesos los barcos o no destruir las bases que habíamos puesto. 

-Claro-susurró Gaara mientras Sasuke asentía silenciosamente. Sin que los tripulantes se dieran cuenta nosotros ya estábamos dentro de aquel barco. Empezamos noqueando a los que estaban abajo de la cubierta. 

Después de un rato, todos los soldados de Marley estaban inconscientes. Con ayuda de compañeros de la Legión, dejamos a los nuevos prisioneros en tierra firme.

-Buen trabajo-dijo Mikasa viendo a los soldados de Marley. Ahora solo faltaba esperar a que Eren trajera el barco. 

Regresamos a donde estaban Levi, Hange, Armin, Jean, Connie y Sasha. 

-¡Misión cumplida!-exclamé cuándo regresamos.

-Los prisioneros están por allá-señaló Gaara. Hange y Levi asintieron con aprobación. Repentinamente, el suelo empezó a temblar. Eso significaba que Eren llevaba el barco, Levi agarró a uno de los prisioneros capturados y puso una cuchilla del equipo atrás de este. EL prisionero se llamaba Nicolo, y Hange-san se escondió detrás de unas rocas. Todos la imitamos. 

Por fin Eren "bajó" o más bien "aventó" el barco de nuevo a la bahía. 

-¡Hola! ¡Amigos de Marley! ¡Les damos la bienvenida a la isla de Paradis!-exclamó Hange-san-¿Les gustaría pararse a compartir una taza de té con nosotros? ¡Sus compañeros se la han pasado muy bien! ¿No es así?, Nicolo-kun-dijo Hange esbozando una sonrisa. Casi me rio pues no era una sonrisa que inspirara mucha confianza, pero aguanté las ganas de reírme.

-¡Capitán! ¡No se preocupe por mi! ¡Dispárele a los demonios de esta isla!-proclamó Nicolo nervioso, pues Levi enterraba cada vez más la cuchilla en su espalda. 

-¡¿Pero qué dices Nicolo-kun?! Sí estabamos pasando un buen rato-contestó Hange nerviosa antes lo que dijo Nicolo. Me preparé para pelear mientras el capitán vociferaba algo sobre que no tomaría la orina de cerdo a la que llamábamos "té" con los demonios de la isla Paradis. 

Algo inesperado pasó, antes de que nos atacáramos uno de los soldados apuntó con su arma al capitán antes de disparar si dudarlo un segundo. Varios soldados se volvieron contra sus compañeros, antes de el soldado se quitara el casco dejando ver su rostro. 

-¡Será un placer compartir un té con ustedes Hange-san!-esa fue la primera vez que vimos a Yelena. 

Una nueva luz (SNK/AOT x Naruto Shippuden x Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora