Rose Uzumaki, hermana gemela de Naruto y contenedora del lobo de las diez colas. Naruto Uzumaki, hermano gemelo de Rose y contenedor del zorro de las nueve colas. Sasuke Uchiha, único sobreviviente de su clan y poseedor del Rinnegan. Gaara, Kazekag...
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Una nueva luz: Capítulo 68: Una segunda oportunidad
-Ya no estamos en una posición cómo para preocuparnos por Eren-prosiguió el capitán Levi-No, para empezar nunca lo estuvimos-se corrigió.
-Pero...-Mikasa iba a empezar a defender a Eren hasta que otra voz la interrumpió.
-¿Pero?-intervino Sasha-¿¡Pero qué!? Habríamos muerto ahí de no ser por el milagro volador en el que estamos-estaba histérica. Nadie nunca la había visto de aquella manera.
-Sí, si esto no nos hubiera rescatado o no tuviéramos a ellos-señaló a los cuatro ninjas-ya hubiéramos muerto.
-Jean...-Mikasa se veía al borde del llanto.
-Había tanto que quería decirle a ese idiota, pero.... maldición-susurró el capitán Levi notablemente afligido ante la situación de Eren.
-¡Yo igual!-exclamó Connie con lágrimas en los ojos-¡No quiero renunciar a Eren, pero ...por mi culpa el capitán casi se queda incapacitado!-exclamó con arrepentimiento-¡Es más... la tenemos contra el mismísimo fundador! ¿Realmente crees que la tenemos fácil?-preguntó Connie.
-Mikasa...-Jean se esforzaba por no sollozar-necesitamos...-hizo una dolorosa pausa para todos-matar a Eren-sentenció.
Mikasa, quién no había permitido que sus esperanzas por Eren se apagaran, quedó anonadada. Incluso los compañeros que consideraba más cercanos a ella, además de Armin y Eren le estaban diciendo que tendría que matar a Eren. Estaba en shock, paralizada, tratando de procesar todo lo que sus compañeros habían dicho.
-¡Mikasa!-gritó Rose agarrándola por el cuello-Tu solo concéntrate en salvar a Armin-indicó-no tienes que pensar en nada más-dijo con firmeza.
-Okay-susurró Mikasa viendo fijamente los ojos azules oscuros de Rose, cómo dos pozos insondables de agua.
Se hizo un tenso silencio, nadie quería hablar en aquella situación. Además de que no había más que decir.
-Cuándo la cabeza de Eren voló...-interrumpió el silencio Gabi.
-¿Qué dices?-inquirió Gaara.
-Le disparé y corté la cabeza de Eren con un rifle anti-titan-explicó Gabi sorprendiendo a todos los presentes-justo antes de que tocara al señor Zeke, cuándo lo hice algo salió de la espina de Eren-rememoró aquel suceso-parecía un ciempiés o algo así, conectando la cabeza de Eren-dijo mirando al frente.
-Que... grotesco-comentó Sasuke.
-Ese es el titán fundador-señaló Gabi-no... si esa es la verdadera naturaleza del poder de los titanes... podríamos verla de nuevo si lo decapitamos.-sentenció.
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Bajo el ave en el que iban los soldados de Paradis se encontraban soldados Marleyanos, admirando la fortaleza de aquellas personas.
-Wow, van de regreso hacia el titán de ataque-comentó uno de ellos, preparando un cañón.
-¡Tampoco nos rendiremos!-exclamó el soldado más cercano-Incluso si solo es un cañón o dos, es mejor que nada-
No obstante, una masa de personas se les acercó por las espaldas, sorprendiéndolos.
-¿¡Refugiados!?-exclamó con horror uno de los soldados.
-¡Espera!¡Ellos solían llevar bandas en el brazo izquierdo!-intervino otro soldados, provocando que todos los soldados presentes apuntaran sus armas contra los eldianos que se refugiaban en aquel Fuerte.
Y al igual que los Marleyanos, los Eldianos no darían su brazo a torcer tan fácil. Las armas de ambos bandos estaban listas para iniciar una matanza.
-¡Hey!-exclamó desesperado un hombre, el padre de Annie-¡Esperen!¡Vinimos a pedir ayuda para nuestros heridos!-aclaró.
-¡No estamos en posibilidades para hacer eso!-replicó un soldado Marleyano-¡¿A qué vinieron realmente?!-inquirió.
-Señor Leonhart, ¿ahora entiende?-lo llamó uno de los eldianos que sostenía un arma-Los soldados de Marley no van a ayudarnos-prosiguió-parece que los superamos en número, también tenemos más experiencia en batalla-señaló.
-Ustedes nos han enviado una y otra vez al frente de la guerra, para su beneficio Marleyanos-aulló un eldiano que parecía ser un veterano de guerra.
-¡Bajen sus armas, eldianos!-gritaron más soldados marleyanos que solo se habían estado escondiendo.
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Mientras el conflicto entre marleyanos y eldianos se desarrollaba, los soldados de Paradis cargaban contra el titán de ataque.
-¿Qué fue eso?-exclamó Naruto al oír los sonidos provenientes del fuerte, parecidos a disparos-¿Siguen queriendo matarse?-inquirió cansado.
-¡Falco!-exclamó Reiner al ver unos titanes especialmente peligrosos-cuidado con los proyectiles, ¡Ahí vienen!-señaló Reiner.
Las flechas fueron disparadas, obra de los titanes martillo de guerra, no obstante nunca llegaron a clavarse en el titán ave.
-Tch-Sasuke chasqueó la lengua-¿tan débiles?-cuestionó con arrogancia. Todos se percataron de que el titán estaba rodeado de una especie de armadura morada, gracias a Sasuke aquella flechas no podían ni rasguñarlos.
Falco aumentó la velocidad, cargando directamente contra el titán de ataque, cuando estuvieron lo suficientemente cerca, todos los soldados de Paradis saltaron.
-¡Vamos!¡Ustedes ayuden a Armin!-ordenó Hange-san, asumiendo el liderazgo-¡Volveremos con Falco después para ayudarlos!-agregó con determinación. Y una segunda vez, los últimos soldados que podían detener a Eren Jaeger, atacaron con fiereza.
Reiner se había convertido en titán, mientras Rose le otorgaba otro tipo de armadura. Una armadura hecha del chakra de su bijuu, así el titán martillo de guerra no podría matarlo.
"¡Jean!¡Reiner!¡Rose! No mueran, por favor"
"Igual ustedes no mueran, nosotros... llamaremos la atención del titán martillo de guerra"
