45. Dolor oculto

77 5 0
                                    

Natalia POV

En el aparcamiento de Optopus Thory no hay rastro de Miki. El coche de ese cretino ha desaparecido, y tan sólo parece que el resto del cuerpo estudiantil está contando los segundo para la fiesta del Fin del mundo. La fiesta del Club Vikingos. Y mañana...

-Por aquí, Natalia-.

-No. Me. Toques-.

¿Cómo puedo deshacerme de este tío, que parece creerse con el derecho a tocarme? Debí ignorar a mi instinto cuando me dijo que tenía que pedirle ayuda a Joan. Ni siquiera soporto estar a su lado. Pero, por Alba...

-¡De prisa, Natalia!-.

-¡Voy tan rápido como puedo!-.

Poco o nada me importa que todos ellos me miren, o que comiencen a cuchichear lo que para mí ya es más que obvio. Sé que mi camiseta está manchada de sangre. Sé perfectamente que apenas puedo seguirle el paso a Joan. ¿Por qué no pueden mantener la boca cerrada? ¿Por qué...?

-¡Natalia!-.

Mierda...

-¡Natalia, espera!-.

Ahora no...

Roberto aligera el paso para posarse justo frente a mí, impidiéndome el paso. Pararme de esa forma tan repentina sólo sirve para causar que el dolor aumente.

-Natalia, ¿Qué...?-.

-A-ahora no, Roberto...-.

-Pero, ¿Eso es...?-.

-¡Roberto!-.

Creo que nunca me había sentido tan contenta por una intervención de Joan, como en este momento. Joan llama la atención de Roberto, colocándose entre nosotros para evitar que la atención se centre en la sangre de mi camiseta.

-Roberto, necesitamos tu ayuda. -Dice Joan acalorado. -Es una emergencia-.

-¿Qué pasa...?-.

-¿Has visto a Alba Reche?-.

-N-no... ¿Por qué...?-.

-No, sin más... -Miente Joan, a pesar de que en sus ojos se refleja su angustia. -Si sabes algo de ella, ¿Podrías avisarnos?-.

-S-sí, supongo...-.

Joan entonces agarra mi mano para ayudarme a salir de ahí, entrando por un pasillo de la academia. Seguirle el paso es cada vez más difícil.

Alba, por favor... Aparece...

-¡De prisa! -Insististe él. -¡Es por ahí!-.

-¿A dónde vamos, Joan?-.

-La clase del profesor Guix empieza pronto. ¡Tenemos que llegar allí justo a tiempo!-.

-¿Crees que Alba estará ahí?-.

Qué pregunta tan estúpida he hecho. Por supuesto que no estará ahí, Natalia. Es momento de aceptarlo. Aunque se me parta el alma en mil pedazos tan sólo por pensarlo... Alba...

La clase del profesor Guix ya está reuniéndose dentro de su clase. Joan me conduce hacia el interior, causando que algunas miradas se posen sobre nosotros. Esto me haría sentir incómoda, si tan sólo no estuviese totalmente dispuesta a afrontarlo todo con tal de ver a...

-Su sitio está vacío. -Dice Joan. -Igual que el de Sabela-.

-Tiene que llegar... ¡Tiene que hacerlo!-.

-¿Qué hacéis vosotros aquí?-.

Esa tercera voz no pertenece a nuestro dúo dinámico, y el tono es totalmente desagradable. Además de que me causa una ligera pizca de escalofríos, especialmente cuando me giro para observar de frente que Miki y su mascota África, nos miran como si nosotros fuésemos indignos de estar en este sitio.

Nefelibata 「Albalia」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora